Júlia ist, Elena Martín, España, 2017

Notable debut como directora de la joven actriz Elena Martín, aquí también frente a cámara y encarnando al personaje principal del film, Júlia, una estudiante de arquitectura que a sus 21 años gana una beca para estudiar un año en Berlín. Aun cuando cualquier hombre o mujer de nuestro tiempo que viaje solo a un país lejano esté con su yo portátil en su computadora y en su teléfono, la fuerza de otra geografía, otro lenguaje y una cultura sigue siendo un desafío psíquico y emocional que pone en juego el núcleo duro de la identidad. Más que el yo y sus circunstancias, a menudo las circunstancias definen al yo. En el caso de Júlia, los jóvenes berlineses con quienes empieza a interactuar, las modalidades de estudio, el frío ubico de la ciudad, las prácticas de ocio, la economía libidinal van delineando una nueva versión de sí. Martín demuestra una gran inteligencia sensible y cinematográfica en cómo extender el estado de conciencia de su personaje en la propia puesta en escena: la intensificación de la observación de un estilo de vida es perceptible plano tras plano, no solamente por lo que sucede con el personaje sino también por las decisiones de registro de Berlín, cuya arquitectura se discute en el film y se siente con el film, como puede apreciarse enteramente en un pasaje hermoso en el que Júlia y algunos de sus compañeros se recuestan en un puente donde se alcanza a ver la ciudad, los trenes y el humo de la chimenea de una fábrica. Como para cualquier persona que haya vivido por un tiempo en un país que no es el suyo, el regreso a casa puede ser tan anhelado como extraño. Las circunstancias definen al yo, y todo cambio de espacio y tiempo suscita un ajuste fino entre la identidad y el medio.

Roger Koza / Coptleft 20