LA INTERNACIONAL CINÉFILA 2016: LAS MEJORES PELÍCULAS DEL AÑO

LA INTERNACIONAL CINÉFILA 2016: LAS MEJORES PELÍCULAS DEL AÑO

por - La Internacional Cinéfila
26 Dic, 2016 10:18 | comentarios

por Roger Koza

Estoy en una fiesta pero no sé qué se festeja. A la mayoría de la gente no la conozco y hablan todos en idiomas distintos. Escucho a un ruso, me parece oír la musicalidad de la lengua filipina, reconozco el español argentino y también la hermosa sonoridad del portugués de Lisboa. Camino, doy vueltas, llevo una copa de vino (que no tomo) y no consigo establecer contacto con nadie. En el momento no podía entender qué hacía en ese jardín, pero ahora, unas siete horas después, puedo relacionar ese escenario con la fiesta ominosa de Carretera perdida de David Lynch. Obviamente, es un sueño.

Lo admirable del inconsciente es que siempre desborda las creencias que son en definitiva el yo. Tal vez pueda describirse el inconsciente como un coro de yoes sin pertenencia que habitan el yo. La infinita libertad de asociación que tiene lugar en el universo onírico es ostensible, y pienso que los mejores cineastas son aquellos que pueden encontrar un pasadizo por el cual él o ella y esos otros yoes pueden encontrarse. Pienso que películas como Staying Vertical, All the Cities of the North, The Ornithologist y The Dreamed Path dan testimonio de que existe ese desfiladero por el que se puede ir a buscar los signos más libres para después aplicarlos a una obra.

El sueño no terminaba con ese paseo. De pronto conseguía identificar a alguien conocido; no un amigo, sí alguien famoso en el mundo del cine. En esa fiesta estaba Thierry Frémaux. Como el director artístico de Cannes habla español (y no sé cuánto idiomas más) me acerqué con confianza para contarle algo importante. Pero antes lo pensé dos veces. Es él quien iguala a Godard y Dolan, y también quien decide que las dos últimas películas de Weerasethakul y Alonso estén en la segunda sección del festival y no en la primera. Finalmente, me paro frente a él, me presento, quiero hablar y no puedo. Mejor dicho: hablo, muevo la boca, el aire sube desde mis pulmones a la garganta pero no logro pronunciar las palabras. La fonación está castrada. Me doy cuenta, además, de que ni siquiera consigo recordar qué iba a decirle. Él me mira con total indiferencia, saca unos lentes negros con la inscripción “Algas de Cannes” y se va. Me desperté a las 5.30 de la mañana. Era hora de seguir editando La Internacional Cinéfila 2016.

Intuyo que la presencia de Fremáux tiene que ver con que la votación de este año demuestra más que nunca el poder de Cannes. Las películas más significativas de la competencia, que no fueron las ganadoras indiscutibles del festival, están entre las más votadas. Todavía me indignaa el lugar asignado a un film notable como The Death of Louis XIV, de Albert Serra, una película magnífica que debería haber estado en la competencia oficial.

El cierre del sueño hubiera sido enigmático si no fuera por la marca de los anteojos. Algas es el notable mediometraje (amateur) de María Laura Pintor, una realizadora sanjuanina. Sospecho que ese giro tiene que ver con exigirle al representante del poder en el cine que busque más y le dé oportunidades a películas desconocidas, algo en consonancia con el espíritu de este emprendimiento: establecer una cartografía del cine gracias a la mirada de críticos, cineastas y programadores de todo el mundo para ubicar las películas invisibles.

Por un lado, las más elegidas de este año son las de siempre. Por el otro, conviven con ellas muchos títulos desconocidos que pueden ser descubiertos por los lectores y por los participantes mismos, empezando por mí. Yo desconocía la existencia de Life After Life, de Zhang Hanyi, y no fue el único caso.

A lo largo de estos años La Internacional Cinéfila se ha constituido en un lugar de tránsito y descanso para pasar, transcribir y seguir de viaje. Aquí llegan cinéfilos, gente curiosa, colegas y cineastas para ver qué ven otros, aquellos que le dedican tiempo completo o gran parte de su vida al cine. En este banco de títulos pueden identificarse películas de las que poco se ha dicho y a su vez pensar sobre las que se ha dicho mucho. En ese sentido, creo que las justificaciones de muchos participantes permiten divisar las tensiones y las tendencias del cine contemporáneo.

No diré nada más. Solamente quisiera explicar cómo fue la consulta. Se les pidió cinco títulos, en la medida de lo posible del 2016. También se les pidió que eligieran una ópera prima y un film significativo de su país. La razón de este pedido tiene que ver con conjurar el desconocimiento que muchas veces se tiene del cine de ciertos países y con prestar atención a directores debutantes que hayan hecho películas importantes. Estimo que films como Roundabout in My Head, The Human Surge y Jovens infelizes ou um homem que grita não é um urso (que, salvo Hamburgo, sigue siendo sistemáticamente dejado de lado por todos los festivales del mundo) son pruebas de que hay nuevos nombres a tener en cuenta.

En un primer momento tuve la idea de unificar los modos de nombrar las películas. Como me llevaría días hacerlo, opté por mantener los títulos en inglés y en el original.

Antes de pasar a los resultados y a los votos de los participantes, quiero expresar mi agradecimiento a todos los que aceptaron ser parte. De todos ellos siempre aprendo algo y esa es la razón por la que están aquí y han sido convocados. Algunos son “estrellas” del circuito de festivales, otros son “ignotos” cinéfilos. De todos, por igual, he aprendido y sigo aprendiendo. Prácticamente todos los convocados respondieron a la invitación. Algunos me avisaron que no podrían participar este año porque no habían visto muchas películas. Esto sucede a menudo con los cineastas: John Torres, por ejemplo, me dijo que no por esa razón (su nuevo film, por cierto, es extraordinario). Otros invitados no respondieron. Desconozco las razones.

Quiero agradecer a Santiago González Cragnolino, intermitente colaborador de Con los ojos abiertos, por ayudarme con las traducciones de los textos de Rosenbaum, Walsh, Martin ,Young y Cutler.

Espero que todos los films seleccionados puedan alguna vez ser disfrutados por los lectores.

***

LAS PELÍCULAS MÁS VOTADAS:

1. Elle, Paul Verhoeven, Francia-Alemania-Bélgica (Cannes)

30 votos

2. La mort de Louis XIV (The Death of Louis XIV), Albert Serra, Portugal-Francia-España, 2016 (Cannes)

27 votos

3. Aquarius, Kléber Mendonça Filho, Brasil-Francia, 2016 (Cannes)

23 votos

4. Sieranevada, Cristi Puiu, Rumania-Francia-Croacia-Bosnia & Herzogovina-República de Macedonia, 2016 (Cannes)

21 votos

5. Toni Erdmann, Maren Ade, Alemania-Austria-Rumania, 2016 (Cannes)

19 votos

Menciones honorables:

El viento sabe que que vuelvo a casa (16 votos); Homeland: Iraq Year Zero (15 votos); O Ornitólogo (14 votos), Hermia & Helena (14 votos); Paterson (13 votos); Rester vertival (13 votos)

***

MEJOR ÓPERA PRIMA DEL AÑO

 1. La noche, Edgardo Castro, Argentina, 2016 (Bafici)

9 votos

Nota: La película de Castro sumó muchísimos votos, y no solamente de participantes argentinos. Fue votado por varios entre las cinco películas del año y por muchos compatriotas como la película argentina más significativa del año. En total recibió 22 votos.

Menciones honorables:

Short Stay (7 votos); El auge del humano (6 votos)

***

LOS PARTICIPANTES Y SUS VOTOS

Hans Hurch · Director (Viennale) · Austria

Por orden alfabético

The Woman Who Left / Ang Babaeng Humayo) (Lav Diaz)
Dark Night (Tim Sutton)
Roundabout in My Head / Fi rassi rond-point (Hassen Ferhani)
Sieranevada (Cristi Puiu)
Toni Erdmann (Maren Ade)
Sería bueno concebir las películas aquí seleccionadas como si constituyeran una totalidad. No simplemente como una sumatoria de fragmentos dispares, sino como una entidad que tiene algo en común proveniente de distintos trabajos, tal vez dando como resultado un collage o un movimiento en zigzag de un conjunto. Es así como me gustaría verlo, dado la diferencia que existe entre las películas elegidas. Algunos títulos puede resultar más predecibles, como Toni Erdmann y Ang Babaeng Humayo, mientras que otros, como Fi rassi rond-point o Dark Night pueden resultar más sorpresivos. Sin embargo, a medida que elijo estas películas me doy cuenta que bien podrían haber sido otras; pienso que lo mejor es no tomarse las cosas tan seriamente cuando se trata de reunir cinco títulos en una lista.

Ópera prima

Life After Life / Zhi fan ye mao) (Zhang Hanyi)

Para mí, este film de Zhang Hanyi fue tal vez la mayor sorpresa de 2016, porque venía, al menos según mi percepción, de un lugar desconocido. Es así, sobre todo, porque se trata de un raro ejemplo en el que el relato es capaz de asociar de una forma muy misteriosa y a la vez evidente lo sobrenatural a lo natural.

El film austríaco más significativo:

Mister Universo (Tizza Covi & Rainer Frimmel)

Si bien en este año Austria no contó con su película estrella, Mister Universo, de Tizza Covi y Rainer Frimmel, puede ser considerado el film más hermoso y extraordinario del cine austríaco de 2016

Miguel Gomes · Cineasta (As mil e una noite) · Portugal

1. Ex-equo: Rio Corgo (Maya Kosa y Sérgio da Costa) y The Death of Louis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

Tan solo por coincidencia, las dos mejores películas de 2016 giran en torno a la muerte de sus personajes principales: el señor Silva se disipa en soledad rodeado por la nieve y memorias en el norte de Portugal; el rey se pudre en la cama real acompañado por su séquito murmurante en Versalles. Increíble espectáculo del desvanecimiento… ¡Magia blanca! ¡Magia negra!

2. Aquarius (Kléber Mendonça Filho)

3. Slack Bay / Ma Loute (Bruno Dumont)

4. Diamond Island (Davy Chou)

Ópera prima: Rio Corgo

Mejor película portuguesa: Rio Corgo

Jean-Pierre Rehm · Director (FidMarseille) y crítico · Francia

Nocturama (Bertrand Bonello)

Toni Erdmann (Maren Ade)

Rester Vertical (Alain Giuraudie)

Visita ou memórias e confissões (Manoel de Oliveira)

Assassin (Hou Hsiao Hsien )

Ópera prima:

Coeur, George, Ventre / Still Life (Maud Alpi)

Película francesa:

Nocturama (Bertrand Bonello)

Nicole Brenez · Crítica (Abel Ferrara) y programadora · Francia

La película más conmovedora de la década se titula The Last Parisians, de Hamé & Ekoué, debido a que, después de 15 años de una política brillante en contra del racismo y todo tipo de prejuicios, en la que vencieron individualmente (contra Sarkozy) y que nosotros colectivamente perdimos (en contra de la extrema derecha), este trabajo todavía alimenta la hipótesis de una benevolencia humana. Tenemos que merecer una película como esa.

Por orden alfabético

Bangkok Joyride (Ing K)

Blanche / White (Marc Hurtado)

Bienvenue à Madagascar / Welcome to Madagascar (Franssou Prenant)

Hinterlands (Scott Barley)

I Pay for Your Story (Lech Kowalski)

Ópera prima de 2016 :

The Last Parisians (Hamé & Ekoué)

Una película significativa para nuestro país :

The Last Parisians (Hamé & Ekoué)

Jonathan Rosenbaum · Critico (Cinemascope) · EE.UU. 

  1. American Masters: Mike Nichols (Elaine May):

La única película en mi lista dirigido por una vieja maestra (por consiguiente, la única que no tiene que ver en algún punto con la moral del solipsismo), este documental para la televisión, al igual que los anteriores cuatro largometrajes de ficción realizados por May, muestra un exquisito balance entre la apreciación personal y la crítica, lo que es otra forma de decir que sus películas están pobladas exclusivamente por monstruos que ella adora.

2. Everybody Wants Some!! (Richard Linklater):

Si el segundo signo de exclamación parece desmesurado, ésta es la manera muy texana que tiene Linklater de informarnos que la desmesura es algo a ser celebrado, incluso desde un punto de vista mesurado.

3. Fire at Sea / Fuocoammare (Gianfranco Rosi):

Al igual que La La Land, di con ella muy tarde como para incluirla en mis listas de fin de año de Film Comment, Indiewire y Sight and Sound, lo que sugiere que todavía estoy en el proceso de evaluarla. La coexistencia de cotidianeidad y desastre en una isla siciliana es lo que hace que este documental italiano parezca ser sumamente contemporáneo.

4. John From (João Nicolao):

Mi jurado en Filmadrid le dio el premio mayor a esta comedia portuguesa. A mitad de camino entre Everybody Wants Some!! y La La Land en términos de exuberancia, esta película tiene más ideas cinematográficas que aquellas dos en lo que concierne a ilustrar o formular sus fantasías juveniles.

5. La La Land (Damien Chazelle):

Todo el mundo, incluyéndome a mí, se hizo una idea errónea de este pos-musical al compararlo con Jacques Demy, cuando en realidad está temática y emocionalmente mucho más cerca de Too Late Blues de John Cassavetes (y quizás, incluso más traumatizado en sus meditaciones sobre el precio del “éxito” y de “venderse”, según lo que puede verse en su “final feliz”). Retroactivamente esto casi hace justificable a Whiplash, al menos en términos auteuristas.

Ópera prima:

People That Are Not Me (Hadas ben Aroya): 

Ésta perfectamente titulada y desprolija comedia sexual israelí, cuya joven guionista-directora protagoniza -otra película premiada por uno de mis jurados (en este caso, el de Mar del Plata)- ilustra las confusiones restringentes que vienen con la liberación, igual o mejor que La La Land, pero con una pequeña fracción de su presupuesto.

Una película importante de mi país:

Paterson (Jim Jarmusch):

Sólo a Jarmusch podría habérsele ocurrido la ridícula y al mismo tiempo hermosa presunción de que todas las personas en Estados Unidos son secretamente artistas de uno u otro tipo, una noción escalofriante pero seductora dado que lo más parecido a nuestro equivalente de un famoso fallido pintor de casas alemán acaba de ser elegido presidente.

Luis Ospina · Cineasta (Todo comenzó por el fin) y director artístico (Festival Internacional de Cine de Cali FICCALI) · Colombia

Por orden alfabético

Krisha (Trey Edward Shults)

The Death of Lous XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

Moonlight (Barry Jenkins)

The Thoughts That Once We Had  (Thom Andersen)

Visita ou Memorias e Confissoes / Visit or Memories and Confesions (Manoel de Oliveira)

Ópera prima

The Lure (Agnieszka Smoczynska)

Película colombiana

La mujer del animal (Víctor Gaviria)

Carlo Chatrian · Director artístico (Locarno) · Italia

Siempre encuentro muy difícil reducir la complejidad de un pensamiento en un título o en un conjunto de películas. Pero, asumiendo que después de todo se trata de un juego, acepto participar en él.

Certain Women (Kelly Reichardt)

The Death of Louis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

Toni Erdmann (Maren Ade)

The Ornithologist / O Ornitólogo, (João Pedro Rodrigues)

Paterson (Jim Jarmusch)

Mejor ópera prima:

The Human Surge / El auge del humano (Eduardo Williams)

No es fácil encontrarse con algo inesperado. Este es un film que le concede un gran reverso al concepto de globalización; hay algo en él que lucha contra la noción del cine como factor clave en la cultura de la aldea global. Sin embargo se trata de un film rodado en distintas partes del mundo donde se reemplaza la idea de viaje por algo más que aún necesita ser definido.

Mejor película italiana

Tengo dos películas y no puedo decidirme por ninguna de las dos. Que sean las dos.

Fire at Sea / Fucuocoammare (Gianfranco Rosi)

Spira Mirabilis (Massimo d’Anolfi & Martina Parenti)

David Walsh y Joanne Laurier · Criticos (WSWS. Org) · EE.UU.

En general, la concientización artística está atrasada con respecto a los acontecimientos objetivos. El 2016 fue testigo de varios terremotos políticos: el Brexit, un casi golpe de Estado en Turquía, la elección de Trump, etc. Muchos de los acontecimientos expresan un descontento popular masivo. Los partidos de derecha nacionalistas sacaron el mayor provecho hasta el momento, a causa de la completa inutilidad tanto de los partidos tradicionales “de izquierda” y la pseudo izquierda de la clase media-alta, totalmente obsesionada con cuestiones de Raza y Género. Esta es una situación temporal.

Vamos a hacer un poquito de trampa y aprovecharnos de tu permiso de escribir un texto para nombrar algunas películas. Primero que nada, las que vimos el año pasado pero fueron proyectadas en los cines este año (por muy poco tiempo, en la mayoría de los casos): Colonia (Florian Gallenberger), The People vs. Fritz Bauer (Lars Kraume), Ixcanul (Jayro Bustamante), Microbe and Gasoline (Michel Gondry). Además, otras películas interesantes que no entran dentro del quinteto mágico: Certain Women (Kelly Reichardt), Wiener-Dog (Todd Solondz), Indignation (James Schamus), Lady Macbeth (William Oldroyd), Past Life (Avi Nesher), Radio Dreams (Babak Jalali) and The Chosen (Antonio Chavarrías).

Por una combinación de razones artísticas y socio-históricas, nombraríamos a las siguientes películas como nuestras cinco.

En orden alfabético:

Free State of Jones (Gary Ross)

Loving (Jeff Nichols)

Marija (Michael Koch)

Sami Blood (Amanda Kernell)

Snowden (Oliver Stone)

Adrian Martin· Critico y audiovisualista (Cuadernos del caimán, LOLA) · España-Australia

Certain Women (Kelly Reichardt)

Estudio de “personaje en sociedad”, en tono menor, inquietante, hellmanesco.

Evolution (Lucile Hadzihalilovic)

Otra perturbadora joya del “cine de poesía” de esta directora.

Knight of Cups (Terrence Malick)

Un trabajo conmovedor, expresivo y hermosamente estructurado.

Malgré la nuit (Philippe Grandrieux)

Ignorada, poco exhibida y tratada de forma vergonzosa por críticos que deberían tener mejor juicio.

The Was (Soda_Jerk)

Video digital hipnótico realizado por un dúo de hermanas australianas (con soundtrack de The Avalanches). Miralo acá: https://vimeo.com/176637319

Ópera prima, que también es de mi país de origen (Australia):

Joe Cinque’s Consolation (Sotiris Dounoukos):

Evocativamente taciturna, extrañamente perturbadora, rigurosamente inteligente, cinematográficamente fluida: Dounoukis logra todo esto en su película debut, basada en el libro de no-ficción de Helen Garner, un sutil tour de force premingeriano.

Alain Guiraudie · Cineasta (Rester Vertical)

Este año sí he visto muchas películas, no tantas como los críticos, pero he visto muchas.

1 – Busan haeng / Train to Busan (Sand Ho-Yeon)

2 – Midnight Special (Jeff Nichols)

3 – Goksung / The Strangers (Na Hong-Jin)

4 – Ma’ Rosa (Brillante Mendoza)

5 – Agassi / The Handmaiden (Park Chan-Wook)

Maureen Fazendeiro · Cineasta (Motu Maeva) · Portugal-Francia

Por orden alfabético

Julieta (Pedro Almodovar)

The Death of Louis XIV (Albert Serra)

Slack Bay / Ma Loute (Bruno Dumont)

Rio Corgo (Maya Kosa y Sérgio da Costa)

The Woman Who Left / Ang Babaeng Humayo (Lav Diaz)

Dos cortometrajes:

New Life / Nueva vida (Kiro Russo)

The People / Azayz (Ilias El Faris)

Mejor ópera prima:

Rio Corgo (Maya Kosa y Sérgio da Costa)

La película más significativa de mi país:

En Portugal: The Glory of Filmmaking in Portugal / A gloria de fazer cinema em Portugal (Manuel Mozos)

En Francia: Diamond Island (Davy Chou)

Dane Komljen · Cineasta (All the Cities of The North) · Bosnia y Herzegovina

As Without so Within (Manuela De Laborde)
The Death of Louis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)
The Dreamed Path / Der Traumhafte Weg (Angela Schanelec)
The Ornithologist / O Ornitólogo, (João Pedro Rodrigues)
The Wind Knows I’m Coming Back Home / El viento sabe que vuelvo a
casa (José Luis Torres Leiva

Ópera prima
Short Stay (Ted Fendt)

Películas de mis países:

No en un lugar, sino entre ellos. Este año me ha sido todavía más difícil señalar un único lugar en el que pudiera considerarlo propio. Creo que es azaroso que las experiencias más profundas las tuve en el set de filmación de una película alemana situado en Rumania y en el set de un film esloveno que se filmaba en Italia. Por eso elijo:

Toni Erdmann (Maren Ade)

Mother / Mama (Vlado Škafar)

Kiro Russo · Cineasta (Viejo calavera) · Bolivia

Sin orden de prioridad, elijo cinco películas de este año que me hicieron pensar en el cine. Algunas, al llevar al limite su forma, se aproximan nuevos territorios cinematográficos, otras re-observan lo clásico y lo antiguo.

All the Cities of the North / Svi severni gradovi (Dane Komljen)

La mort de Louis XIV / The Death of Louis XIV (Albert Serra)

El auge del humano / The Human Surge (Eduardo Williams)

Donald Cried (Kris Avedisian)

Dawson City: Frozen Time / (Bill Morrison)

Boris Nelepo · Crítico (Cinemascope, Mubi) y programador asociado (Locarno International Film Festival) · Rusia

Yourself and Yours (Hong Sang-soo)

Nocturama (Bertrand Bonello)

Belle Dormant / Sleeping Beauty (Adolfo Arrieta)

Sieranevada (Cristi Puiu)

The Dreamlike Path / Der traumhafte Weg (Angela Schanelec)

El mejor film de 2015 visto en el 2016:

Wake (Subic) (John Gianvito)

Ópera prima:

Jours de France / Four Days in France (Jérôme Reybaud)

La película más significativa de Rusia:

KE-DY / Sneakers  (Sergey Solovyov)

Anne Delseth · Programadora (Quinzaine des Réalisateurs, Cannes / Neuchâtel Fantastic Film Festival / Zürich film festival), Suiza

1. Fuocoamare (Gianfranco Rosi)

2. Under the Shadow (Babak Anvari)

3. Homeland (Irak year Zero) (Abbas Fahdel)

4. Graduation / Bacalaureat (Cristian Mungiu)

5. Midnight Special (Jeff Nichols)

Ópera prima:

Under the Shadow (Babak Anvari)

Mejor película suiza:

My Life as a Zucchini / Ma vie de Courgette (Claude Barras)

Pedro Butcher · Crítico (Valor Econômico, Folha de S. Paulo) y programador (Cine BH – Festival Internacional de Cinema de Belo Horizonte) · Brasil

Me encantan las listas, especialmente las personales. Algunas me permiten descubrir películas que me ayudan a darle forma a mi gusto y personalidad. Pero confeccionarla es siempre una tarea ardua. Y cada año parece ser más espinoso. Sucede que la cantidad de películas nunca parece dejar de crecer; aun se ha vuelto difícil estar al día con los títulos significativos de los festivales más importantes; la circulación está siempre estrangulada por los intereses comerciales. Así que le pido al lector que recuerde que muchas películas que podrían estar aquí estarán ausentes, tan sólo porque me las perdí.

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Una película milagrosamente ligada a su tiempo, particularmente a este bizarro año político de Brasil.

Elle (Paul Verhoeven)

Verhoeven y Huppert, que matrimonio improbable (y bienvenido). En un período histórico en el que los medios masivos de comunicación empequeñecen la polémica de cualquier tipo, es más necesario que nunca defender la complejidad, la ironía y, especialmente, el cine magistral.

Midnight Special (Jeff Nichols)

Los distribuidores brasileños decidieron que esta película tenía que estrenarse directamente en DVD. La vi en un avión, por mera casualidad, y quedé completamente hipnotizado. En un año en el que La llegada (The Arrival) ha conseguido el beneplácito de la crítica, yo prefiero defender el film de Jeff Nichols que tiene alma, y que es también de ciencia ficción.

La mort de Louis XIV (Albert Serra)

En La prise de pouvoir pour Louis XIV, Rossellini filmó los rituales del poder. Ahora Serra se dispuso a filmar los rituales de la muerte.

Sieranevada (Cristi Puiu)

El corazón de una familia rumana filmada tanto con intimidad como con distancia. Otro increíble prodigio de puesta en escena en manos de Puiu.

Ópera prima:

El auge del humano (Eduardo Williams):

La película más sorprendente del año, que cuenta con un misterioso pero concreto uso de la imagen y el sonido.

La película más significativa de Brasil:

Martirio (Vincent Carelli)

Antropólogo y cineasta, creador del proyecto “Video nas aldeias”, Carelli fue la única persona capaz de hacer una película de esta naturaleza: un documental épico que sitúa la causa de los aborígenes en la perspectiva histórica de Brasil.

Isabelle Tollenaere · Cineasta (Battles) · Bélgica

The Death of Louis XIV (Albert Serra)

Toni Erdmann (Maren Ade)

Elle (Paul Verhoeven)

Ópera prima:

El futuro perfecto (Nele Wohlatz)

Película belga

Hollow Hours (Camille Picquout)

Ruben Demasure · Crítico (Photogenie.be, Sabzian.be) · Bélgica

Ta’ang (Wang Bing)

Eldorado XXI (Salomé Lamas)

Certain Women (Kelly Reichardt)

Hermia & Helena (Matías Piñeiro)

Un instante de realidad o de intimidad, y de un cine vivo: la proyección de No reconciliados, como parte del programa de la retrospectiva de Straub-Huillet en el Centre Pompidou. Estaba sentado justo detrás de Straub y fui testigo de cómo dirigía secretamente y en silencio, pero con total pasión, la pieza de Bach con sus manos reposando en la falda. La escena fue iluminada por los créditos finales en blanco y quizás haya sido yo el único que vio esa otra escena.

Las películas belgas:

Grands Travaux (Olivia Rochette & Gerard-Jan Claes)

Rochette & Claes idean una forma, que es más precisa que encantadora, para capturar el mundo, las palabras y los movimientos de un grupo que pertenece a una generación.

En Bélgica, lo más interesante está pasando en el indefinido campo del documental. Este año se pudo ver las películas de Robbrecht Desmet (On a Clear Day and Radical / Light), Nina Devroome (A Sea Change / Een Idee van de Zee) y la obra del artista Robin Vanbesien (Assembly for an Oresteia).

Ópera prima:

Las mejores películas de directores debutantes que he visto tuvieron su genealogía en la escuela de cine Kask, situada en Ghent.

Son las siguientes:

Hollow Hours / Le Temps Cogne (Camille Picquot)

Interval (Constanze Wouters)

Malapascua (Christina Stuhlberger)

Échangeur /Junction (Anne Reijniers & Rob Jacobs)

Mijn zaad is zwart. Waar is de wereld? (Manon De Sutter)

En ik ren rond op zoek naar broers (Hannah Bailliu)

Homer Etminani · Cineasta (Immortal) · Irán (nacido), España (criado), Colombia (residente)

Como decía Jean Epstein, el teatro debe ser teatral, la literatura debe ser literaria y el cine debe ser cinematográfico. De las películas que he visto este año, mis preferidas son muy cinematográficas, cada una a su manera: por su gran trabajo estético-político, por su dosis de experimentación, y por trabajar con el tiempo como materia prima.

1. La muerte de Luis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

2. All the Cities of the North / Svi Severni Gradovi (Dane Komljen) (Mejor ópera Prima)

3. Ta’ang (Wang Bing)

4. Homeland, Iraq Year Zero (Abbas Fahdel)

5. Todo comenzó por el Fin (Luis Ospina) (Cine nacional)

João Nicolau · Cineasta (John From) · Portugal

Sin lugar a cualquier duda, la película que más disfruté este año ha sido Right Now, Wrong Then (Hong Sangsoo). La vi en Ficunam.

Después, sin orden de preferencia, me han gustado mucho las seguientes películas, todas francesas:

Ma Loute (Bruno Dumont)

Le Fils de Joseph» (Eugène Green)

Rester Verticale (Alan Guiraudie)

Le Parc (Damien Manivel)

La película portuguesa destacada:

Rio Corgo (Sérgio da Costa y Maya Kosa)

Julian Radlmaier · Cineasta (Selbstkritik eines buergerlichen Hundes) · Alemania

Mi tiempo de visionado no estuvo sincronizado recientemente con el mundo de los festivales. He visto alguna cosas demasiado tarde. Esa es la razón por la cual incluyo una película que aún no se llegó a estrenar. ¡Atención con ese film!

 

Mejor película en el tiempo preciso

The Death of Louix XIV (Albert Serra)

Mejor film visto un poco tarde

Winter’s Song (Otar Iosseliani)

Mejor película vista demasiado temprano y también ópera prima:

Let The Summer Never Come Again (Alexandre Koberidze)

Una obra maestra poética de tres horas de Georgia, rodada con un viejo teléfono Nokia. Extraordinariamente divertida, asfixiantemente hermosa y profundamente conmovedora. Lumière para el siglo XXI.

Mejor película alemana:

The Dreamed Path (Angela Schanelec)

Emilio Bernini · Crítico (Kilómetro 111. Ensayos sobre cine) · Argentina

Eldorado XXI (Salomé Lamas)

Treblinka Sérgio Tréfaut (Portugal)

Home (Fien Troch)

Todo lo demás (Everything else) (Natalia Almada)

Cuatreros (Albertina Carri)

Ópera prima

La noche (Egdardo Castro)

Pedro Adrián Zuluaga · Programador (Festival de Cine de Cartagena de Indias-FICCI) y crítico (Pajarera del Medio)

Ta’ang (Wang Bing):

La respiración del cineasta Wang Bing, en su seguimiento al grupo de refugiados de la etnia Ta’ang en la frontera entre Birmania y China, no es un mero dato técnico en este excepcional documental, sino la prueba de su cercanía (justa) y de su emoción (precisa, si es que una emoción puede serlo) ante lo que nos quiere mostrar.

Elle (Paul Verhoeven):

La maleabilidad de Isabelle Huppert para representar lo más oscuro de la condición humana alcanza aquí otra cota muy alta. En este ataque a los mitos sobre el deseo sexual y la respetabilidad de los valores familiares y corporativos, nada queda en pie, salvo el poder del arte como arma para enfrentar a la Medusa, sin paralizarnos.

The Human Surge /El auge del humano (Eduardo Williams):

Un nuevo cine y un nuevo ser humano parecen surgir de entre las manos de un inspirado Teddy Williams. Esa cámara que traspasa todos los límites y desafía el tiempo y el espacio, señala lo que serán, tal vez, los relatos del porvenir.

The Woman Who Left /Ang Babaeng Humayo (Lav Diaz):

Cada película de Lav Diaz nos trae una experiencia del tiempo y una experiencia moral. Un tiempo humano (es decir lleno de capas y superposiciones de tiempos) y condensado (a pesar de la extensión de sus films), donde todo acto es significativo, único, no intercambiable, moral en sentido estricto.

La noche (Edgardo Castro):

No hay nada sórdido o adrede provocador y escandaloso en esta noche oscura del alma filmada por Edgardo Castro. Una representación seca de un grupo de personajes que busca una conexión, de un orden casi espiritual, ofreciéndose lo más inmediato: el cuerpo. Un cine que no teme mostrar pero que sabe donde cortar para sugerir el misterio.

Mejor ópera prima:

Godless /Bezbog (Ralitza Petrova):

En un mundo donde todo parece estar predeterminado por la supervivencia y el interés inmediato, esta película descubre, junto con su personaje principal, un camino posible de redención. A la impresionante precisión formal la salva y la remoza una urgencia moral, como si el espítitu de los Dardenne aterrizara en la película para llevarla a otro lugar.

Una película significativa para Colombia:

Wounded Night / Noche herida (Nicolás Rincón Guille)

Última parte del tríptico “Campo hablado” donde el documentalista Nicolás Rincón Guille explora la oralidad y el mundo simbólico de campesinos colombianos, muchos de ellos víctimas de la guerra, pero no reducidos a esa condición. En Noche herida acompaña a una abuela en el heroico esfuerzo porque sus nietos no repitan los ciclos de violencia.

Denis Côté · Cineasta (Boris sans Béatrice) · Canadá

Estas son finalmente mis películas:

Toni Erdmann (Maren Ade)

Sieranevada (Cristi Puiu)

Elle (Verhoeven)

Austerlitz (Loznitsa)

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Ópera prima:

The Witch (Robert Eggers)

Michael Pattison · Crítico (Mubi notebook) y programador(Alchemy Film and Moving Arts) · Reino Unido

The Illinois Parables (Deborah Stratman)

Sarah Winchester, Ghost Opera (Bertrand Bonello)

Scarred Hearts / Inimi Cicatrizate (Radu Jude)

No’i (Aline Magrez)

Answer Print (Mónica Savirón)

Mejor ópera prima:

Depth Two / Dubina dva (Ognjen Glavonić)

Mención especial:

Eldorado XXI (Salomé Lamas)

Mejor película inglesa:

The Trembling Giant (Patrick Tarrant)

Cada título elegido, a su manera, cimienta sus relatos en el espacio; asimismo cartografía sus imágenes (encontradas, constituidas, reconstituidas) en torno a la memoria. La premisa medular del cine: perseguir sueños, grabados en las sombras, aunque pintados por la luz pinta en la niebla.

Leonardo M. D’Espósito · Crítico (El Amante, Noticias, 50 películas para ser feliz) · Argentina

Por orden de preferencia

Il Solengo (Alessio Rigo de Righi)

Una recuperación del misterio que el cine puede transmitir. El uso del espacio y el sonido es el de una alucinación, especialmente hacia el final. Algo nuevo.

El tesoro/Comoara (Corneliu Porumboiu)

Me gustan tres cosas: la idea de que el tiempo pasa y lo esencial permanece, la ironía política que encierra el «tesoro», el final que nos recuerda que el juego y la infancia son los lugares de la felicidad.

Sully (Clint Eastwood)

El mejor narrador clásico -el mejor narrador, y punto- del cine actual. Quizás junto a Spielberg, con el acento en el «quizás».

El libro de la selva/Jungle Book (Jon Favreau)

Probablemente pasen inadvertidas tres cosas: la recuperación del tono oscuro y épico de los cuentos de Kipling, la hazaña de que un actor niño interactúe con nada y nos haga creer en multitudes, la belleza del conjunto. Favreau está aparte en Hollywood.

Tangerine (Sean Baker)

El mejor cuento de Navidad en años. Más allá de su audacia formal, que además es perfectamente coherente con lo que narra.

Una película argentina

Miss (Roberto Bonomo)

Porque es fresca y porque, incluso si toma como núcleo a una persona a la que transforma en personaje (algo que puede confundirnos) nunca deja de construir un mundo cinematográfico y ficcional a partir de una Buenos Aires que se vuelve otro lugar, puro cine.

Una opera prima

La Bruja/ The Witch (Robert Eggers)

La única película de terror del año que comprendió qué es el miedo en el cine, cómo se provoca y, sobre todo, para qué. Podría ir El conjuro 2, de James Wan, que fue el film mainstream más tierno (!) y social (!!!!) del año. Pero The Witch inventa cosas.

Rodrigo Moreno · Cineasta (Réimon, Un mundo misterioso) · Argentina

1. Khesht va Ayeneh /Adobe and mirror (Ibrahim Golestan)

2. Ji-geum-eun-mat-go-geu-ddae-neun-teul-li-da / Right Now, Wrong Then (Hong Sangsoo)

3. Toni Erdmann (Maren Ade)

4. Homeland: Irak Year Zero (Abbas Fahdel)

5. Elle (Paul Verhoeven)  // Café Society (Woody Allen)

6. John From (João Nicolau)

Ópera prima:

Bone Tomahawk (Steven Craig Zahler)

La noche (Edgardo Castro)

Película argentina:

Hermia & Helena de (Matías Piñeiro)

Alexandra Cuesta · Cineasta (Territorio) · Ecuador-Estados Unidos

El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

Gulistan, Land of Roses (Zayne Akyol)

Bad Mama, Who Cares (Brigid McCaffrey)

Engram Of Returning (Daichi Saito)

The Death of Louis XIV/ La Mort de Louis XIV (Albert Serra)

Ópera prima:

All The Cities Of The North/ Svi Severni Gradovi (Dane Komljen)

Película ecuatoriana

Persistencia (Fernando Mieles)

Fernando G. Varea · Crítico (Espacio Cine, El cine y la dictadura) · Argentina

El tesoro / Comoara (Corneliu Porumboiu)

La acusación / Court (ChaitanyaTamhane)

Lejos de ella / Shan he gu ren /Mountains May Depart (Jia Zhang-ke)

Por siempre amigos / Little Men (Ira Sachs)

Mención especial para Visita ou memórias e confissõe / Memories and Confessions (1981, Manoel de Oliveira) y para la exhibición de El caballo de hierro (1924, John Ford), en copia nueva de 35 mm restaurada, con música especialmente compuesta para la misma interpretada por la Orquesta Sinfónica de Mar del Plata, en la última edición del festival realizado en dicha ciudad.

Ópera Prima y también film significativo argentino:

La larga noche de Francisco Sanctis (Francisco Márquez/Andrea Testa)

María Laura Pintor · Cineasta (Algas) · Argentina

Películas en orden de prioridad:

Rat Film (Theo Anthony)

Lo and Behold, Reveries of the Connected World (Werner Herzog)

Paterson (Jim Jarmush)

Staying vertical/ Rester Vertical (Alain Guiraudie)

Sing Street (John Carney)

Ópera Prima:

The Rise of the Human/ El auge del humano (Teddy Williams)

Película Argentina:

The Real Lemon Tree/ El limonero real (Gustavo Fontán)

Ahmad Natche · Cineasta (Two Meters of This Land) · España-Palestina

Mountains May Depart / Shan he gu ren (Jia Zhangke)

Toni Erdmann (Maren Ade)

The Dreamed Path / Der traumhafte Weg (Angela Schanelec)
Sieranevada (Cristi Puiu)

Paterson (Jim Jarmusch)

Ópera prima: Roundabout in My Head / Fi rassi rond-point  (Hassen Ferhani)

Película nacional: The Death of Louis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

De años anteriores, vistas en 2016 no necesariamente por primera vez: Monsieur Verdoux (Charles Chaplin, 1947) · Two Weeks in Another Town (Vincente Minnelli, 1962) Four Nights of a Dreamer / Quatre nuits d’un rêveur (Robert Bresson, 1971) · Ten (Abbas Kiarostami, 2002) · On the Town (Stanley Donen & Gene Kelly, 1949)

Alexandra Zawia · Crítica y consejera de programación · Austria

Por orden alfabético

The Dreamed Ones / Die Geträumten (Ruth Beckermann)

Elle (Paul Verhoeven)

The Student / (M)Uchenik (Kirill Serebrennikov)

Stay Vertical / Rester Vertical (Alain Guiraudie)

Sieranevada (Cristi Puiu)

Ópera prima:

Katie Says Goodbye (Wayne Roberts)

Película austríaca:

The Dreamed Ones / Die Geträumten (Ruth Beckermann)

Thiago B. Mendonça · Cineasta (Jovens Infelizes ou Um Homem que Grita Não É Um Urso) y editor (Revista Zagaia) · Brasil

Este año el hecho más destacado del cine brasileño fue sin duda la muerte de Andrea Tonacci, uno de los mayores directores brasileños de todos los tiempos. Tonacci era un símbolo de cine radical, inventivo y riguroso, comprometido con un ideal libertario de sociedad y uno de los directores de cine más generosos que tuve la oportunidad de conocer. Seguirá vivo en sus películas y en las películas de aquellos que se inspiran en su legado.

Las mejores cinco películas del año

Fai Bei Sogni /Sweet Dreams (Marco Bellocchio)

Sangue del mio sangue / Blood of my Blood (Marco Bellocchio)

Inimi Cicatrizate / Scarred Hearts (Radu Jude)

Sieranevada (Cristi Puiu)

Ederly (Piotd Dumala)

Ópera Prima:

Las mejores operas primas que he visto este año fueron las películas experimentales de Fiona Tan Ascent y History’s Future y la película palestina Personal Affairs, de Maha Hai, una promisoria heredera de Elia Suleiman.

Como mención honorable también agrego Interruption del griego Yorgos Zois.

Películas brasileñas

Dos grandes películas brasileñas marcaron el año de 2016. Dos películas seminales de directores veteranos:

Guerra do Paraguay:

Luiz Rosemberg Filho que retoma en una nueva versión su Jardim de Espumasde (1970), unas de las primeras películas en denunciar la tortura en Brasil.

Martírio:

Obra fundamental de Vincent Carelli que narra la tragedia y genocidio del pueblo Guarani Kaiowa en los últimos 50 años

Paolo Moretti ·Director (La Roche-sur-Yon International film festival), programador y consultor (FIDMarseille, Visions du Réel) · Italia-Francia

Por orden alfabético.

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Certain Women (Kelly Reichardt)

Fuocoammare (Gianfranco Rosi)

La mort de Louis XIV (Albert Serra)

The Woman Who Left (Lav Diaz)

+

Zootopia (Byron Howard y Rich Moore)

Ópera prima

Hay demasiadas películas notables para elegir solamente una. Tengo 12.

Baden Baden (Rachel Lang)

Bodkin Ras (Kaweh Modiri)

El auge del humano (Eduardo Williams)

Empathy (Jeffrey Dunn Rovinelli)

Icaros: A Vision (Leonor Caraballo & Matteo Norzi)

Il solengo (Alessio Rigo de Righi, Matteo Zoppis)

The Challenge (Yuri Ancarani)

The Eyes of My Mother (Nicolas Pesce)

The Giant (Johannes Nyholm)

Under the Shadow (Babak Anvari)

Unfilmévènement (UFE) (César Vayssié)

Where Is Rocky II? (Pierre Bismuth)

Una película italiana:

Lo chiamavano Jeeg Robot (Gabriele Mainetti)
+

Tres cortometrajes notables

Alter Senator (Willehad Eilers)

Sarah Winchester, opéra fantôme (Bertrand Bonello)

The Dust Channel (Roee Rosen)

Nicolas Azalbert · Critico (Les Cahiers du Cinéma) y programador (Festival Biarritz América Latina) y cineasta (La Brasa Las Cenizas) · Francia-Argentina

 Homeland : Iraq Year Zero (Abbas Fahdel)

Visita ou Memorias e Confissoes / Visit or Memories and Confesions (Manoel de Oliveira)

Paterson (Jim Jarmusch)

Rester Vertical / Staying Vertical (Alain Guiraudie)

Toni Erdmann (Maren Ade)

Película francesa:

Rester Vertical / Staying Vertical (Alain Guiraudie)

Primer largo:

Je suis le peuple / I’m the People (Anna Roussillon)

Lois Patiño · Cineasta (Costa da Morte) · España

El auge del humano (Eduardo Williams)

Ma loute (Bruno Dumont)

Hermia & Helena (Matías Piñeiro)

La muerte de Luis XIV (Albert Serra)

Mimosas (Oliver Laxe)

Mejor ópera prima:

El auge del humano (Eduardo Williams)

Película española:

Montañas ardientes que vomitan fuego (Samuel M. Delgado y Helena Girón)

Aaron Cutler · Crítico y Programador (Freelance), EE.UU.-Brasil

Cuando mi amigo Roger Koza me invitó a participar en esta encuesta, mi mente se fue inmediatamente a la experiencia más placentera que tuve este año en un festival de cine, al FICUNAM de Ciudad de México, un festival donde Roger programa junto a Eva Sangiorgi y Sébastien Blayac. Su trabajo fue, en lo que a mí respecta, el equivalente a una cobija de buen cine, sobre la cual mientras menos generalizaciones se hagan, mejor.

Teniendo esto presente, decidí armar mi Top 5 con cinco películas que disfruté de la programación de FICUNAM. Tres de los títulos son trabajos relativamente nuevos que se pasaron en tres secciones diferentes del festival. Agrego la expansiva y meditabunda épica de ciencia ficción Infinitas, proyectada en DCP en el contexto de una retrospectiva itinerante de Marlen Khutsiev; y la breve y aguda Leobardo Barrabás, parto sin temor proyectada en una copia de 16mm por cortesía de la Filmoteca UNAM, dentro de un programa dedicado al cineasta Leobardo López Aretche.

L’Aquarium et la nation / The Aquarium and the Nation (Jean-Marie Straub)

Cuerpo de letra / Embodied Letters (dir. Julián D’Angiolillo)

Beskonechnost / Infinitas (Marlen Khutsiev, ex-USSR, 1992)

Leobardo Barrabás, parto sin temor / Leobardo Barrabás, birth without fear (Leobardo López Aretche, 1969)

Las letras / The Letters (Pablo Chavarría Gutiérrez)

Ópera prima:

Aragane (Kaori Oda)

Me gustaría agregar también una ópera prima que promete mucho. Es una película sobre un trabajo hecho mayormente de forma subterránea y un trabajo en sí mismo lleno de generosa calidez y luz.

Película nacional:

Na Missão, com Kadu / On the Mission, with Kadu (Aiano Bemfica, Kadu Freitas y Pedro Maia de Brito)

Guerra do Paraguay / Paraguay War (Luiz Rosemberg Filho)

Por último, dado que soy residente de Brasil (aunque con pasaporte estadounidense), me gustaría mencionar dos películas que se hicieron en el país este año. Una es un corto documental despojado y una gran pieza de cine confrontativo que exige (literalmente exige) que la policía rinda cuentas por la violencia contra civiles. La otra es una ficción lírica en blanco y negro en Scope dirigida por Luiz Rosemberg Filho, un viejo cineasta poco reconocido que tenemos la suerte que siga trabajando, que tiene un gusto humanista por la expresión teatral.

Philipp Hartmann, cineasta (66 Kinos), Alemania

Austerlitz (Sergei Loznitsa)

This is the Way I like it 2 / Como me da la gana II (Ignacio Agüero)

The Night / La Noche (Edgardo Castro)

The Dreamed Path / Der traumhafte Weg (Angela Schanelec)

Salt and Fire – Werner Herzog

Ópera prima:

Casi Paraíso (Pablo Narezo)

Película alemana:

From the West / Aus westlichen Richtungen (Juliane Henrich)

Celina Murga · Cineasta (La tercera orilla) · Argentina

Los 8 más odiados / The Hateful Eight (Qeuntin Tarantino)

Julieta (Almodovar)

El apostata / The Apostate (Federico Veiroj)

Película argentina:

La luz incidente (Ariel Rotter)

Ópera prima:

Las lindas (Melisa Liebenthal)

Alexandre Rojo · Cineasta (Raoul Ruiz: Contre l’ignorance fiction!) · Argentina-Francia

Estas son mis películas:

No Home Movie (Chantal Akerman)

Ma Loute  / Slack Bay (Bruno Dumont)

A pesar de que hubiera preferido poner  Le p’tit quinquin, pero es de 2015.

John From (João Nicolau)

Dans ma tête un rond point / Fi Rassi Rond-point) (Hassen Ferhani)

Francisco Márquez · Director (Después de Sarmiento y La larga noche de Francisco Sanctis, junto a Andrea Testa) · Argentina

Ordenadas más o menos arbitrariamente y con un pequeño comentario que no buscan explicar la elección sino sólo dar cuenta, someramente, de algún elemento por la que quedaron en mi memoria.

Sieranevada (Cristi Puiu)

La cámara de Puiu adquiere una nueva dimensión. Si en Aurora nos permitía descubrir escena a escena que escondían los movimientos del protagonista, en esta última película la cámara parece encontrar el camino en la acción misma, como si (y sólo “como si”) estuviese tan desorientada y curiosa como nosotros en ese encuentro familiar (que concentra a toda Rumania).

Homeland (Iraq Year Zero) / Patria: Irak año cero (Abbas Fahdel)

Una película-experiencia de la cual es imposible no salir transformado.

The Chechen Family La familia chechena ( Martín Solá)

¿Cómo retratar la espiritualidad? ¿lo intangible? ¿El trance sagrado? Martín Solá (y todo el equipo de la película, brillante y coherente en todas sus partes) lo logra en un documental que te transporta a un estado de la mente.

The Happiest Day in the Life of Olli Mäki / El día más feliz en la vida de Oli Maki (Juho Kuosmanen)

Clásica y moderna. Toma lo mejor del cine de género pero con una apropiación muy personal. Un film popular en blanco y negro, 16mm y cámara en mano.

The treasure / El tesoro (Corneliu Porumboiu)

Quizás sea sólo una pequeña fábula. Pero en estos tiempos de desesperanza es como encontrarse un amigo en terreno hostil.

Un film significativo de Argentina:

The Idea of a Lake / La idea de un lago (Mumenthaler)

Nunca hubiera pensado que una escena de baile entre un auto (sí, un auto) y una niña me podrían hacer llorar. La película es mucho más que esa escena, pero ese encuentro es uno de los momentos que más disfrute en una sala de cine, donde, de alguna manera, volví a ser niño. Y donde, sobre todo, experimenté físicamente ese espacio híbrido de la nostalgia.

Neil Young · Crítico y programador, cineasta, Sunderland/Viena

(por favor no adjudicar definiciones neo-Bismarckianas de Nación/Estado a estas localidades. ¡Elijo vivir en ciudades, no en países!)

  1. We’ll Go To Neuilly, Inshallah / On ira á Neuilly, inch’allah (Mehdi Ahoudig & Anna Salzberg, 2015)

«C’est l’histoire d’une manifestation de jeunes travailleurs de Vélib’ qui apprennent la lutte et tentent de s’organiser. C’est l’histoire d’une joute entre l’image et le son» Realizada bajo el auspicio del ‘Groupe de recherche et d’essais cinématographiques’, también conocido como GREC, una organización fundada en 1969 y actualmente situado en 14, rue Alexandre Parodi 75010 Paris.

  1. Autumn / Herbst (Meinhard Rauchensteiner)

«Un maestro invisible intenta enseñar el poema Otoño de Rainer Maria Rilke a un peluche. En el proceso, el animal de felpa desarrolla una personalidad propia exclusivamente mediada por el lenguaje. Sigue el texto, falla, se niega, se rebela. El maestro, por su parte, grita, halaga, vocifera. Una pedagogía absurda en miniatura”.

La película más graciosa del año, con la posible excepción del tráiler de La momia con el audio desfasado (https://vid.me/twfI) que apareció en el tramo final del 2016, punto en el cual todos estábamos necesitando una buena risa. El primer trabajo en solitario de Rauchensteiner, mejor conocido como el “asesor de ciencias, arte y cultura del Presidente de Austria”. El actual Presidente de Austria es Alexander Van der Bellen, que en la elección del 4 de Diciembre de 2016 recibió 2,472,892 votos.

  1. The French Road [aka The French Road, Detroit MI) (Arthur Summereder)

«¿Qué pasa acá? »

«Estoy filmando»

«¿Policía?»
«No, soy un artista de Austria interesado en la cultura de carreras callejeras de ustedes».

4. No’i (Aline Magrez)

«Cables unidos. Fotos, caras y altares. Máquinas y gestos. Un retrato emotivo de un lugar que combina todos estos elementos”. Co-producción belga-vietnamita; debut de un director nacido en 1990.

  1. One Hundred and Fifty Years of Life / Yi bai wu shi sui de sheng huo (Liu Yu,)

«Con un trabajo de inteligencia derivada de las dificultades que seguramente sería apreciado por los Sres. Loach, Fassbinder y Ozu; Liu se une al linaje de directores plena y minuciosamente interesados por la vida en los duros márgenes. Adoptando un enfoque de vigorosa e innegociable franqueza, Liu dramatiza las difíciles decisiones del día a día que deben enfrentar individuos desafortunados e inocentes a los cuales les han fallado tanto el Estado como sus propias familias”.

Las primeras cuatro, como notarán aquellos con ojo de lince, son todas “cortos”. En 2016 las nuevas películas de relativa corta duración fueron una vez más preferibles en la comparación a sus contrapartes de duración convencional (quelle surprise!). Vi la segunda película de Liu Yu, One Hundred and Fifty Years of Life en San Sebastián (Donostia) en Septiembre, donde tuvo su premiere mundial. Desde entonces fue proyectada en la sección ‘Festival of Festivals’ del Festival de Cine Internacional de El Cairo y… ehhhhhh… eso es todo.

En San Sebastián (Donostia) Liu compitió por el Premio Kutxabank-Nuev@s Director@s de €50,000; nada mal teniendo en cuenta que la película (según fui informado por su mismísimo guionista/director/director de foto/montajista/productor de 35 años) costó ¥1000… digamos unos $150, o €140 o £120. El mejor de los estrenos comerciales que vi fue Pete’s Dragon de David Lowery (presupuesto declarado en $65 millones).

El mejor largo documental fue Miss Kiet’s Children (De Kinderen van Juf Kiet) de Peter Lataster y Petra Lataster-Czisch; la mejor de las películas más largas experimentales fue measuring change de James Benning (61 min.), la tardía continuación de su imponente obra maestra también titulada en minúsculas: casting a glance.

Desde que envié mi lista de 2015, me puse al día con Spotlight (Tom McCarthy) y Creed (Ryan Coogler). Ambas excepcionales, pero llegaron a los cines europeos en Enero. También vi toda la castigada segunda temporada de True Detective (varios directores) —En mi opinión muy superior a la (muy buena) primera temporada, con Vince Vaughn (también, absurdamente castigado) dando una actuación para la posteridad, ¡¿Quién lo hubiera imaginado?!

Ópera prima

Depth Two / Dubina Dva (Ognjen Glavonić):

«Ogjen Glavonić sigue Zivan Makes a Punk Festival — su ameno y placentero híbrido documental de una hora sobre un joven que trata de iniciar un festival de música con un presupuesto minúsculo— con una película más sombría sobre el intento sistemático de encubrir las limpiezas étnicas durante la Guerra de Kosovo. Depth Two surge de la investigación que llevó a cabo el cineasta serbio mientras preparaba una ficción (todavía no realizada) sobre el tema y narra los desgarradores acontecimientos que llevaron en 2001 al descubrimiento de más de 700 cuerpos enterrados en fosas comunes situadas en las afueras de Belgrado. El punto de inicio es, sin embargo, otro descubrimiento: el de un camión frigorífico que contenía los cuerpos de 86 albaneses, que apareció el 4 de abril de 1999 en el Danubio, cerca de Tejika, un pueblo próximo a la frontera serbio-rumana. Utilizando el modelo trotamundos del thriller de conspiración contemporáneo, Glavonić revela cómo se conectan estos dos descubrimientos tan lejanos geográficamente. En la permanente ausencia de cierre o justicia que apuntala los horrores de la Guerra de Kosovo, Depth Two entrelaza diez años de audios de testimonios de testigos, tomados de los tribunales de La Haya, e ilustra estos perturbadores calvarios con imágenes del presente de aquellos sitios donde las tragedias originalmente tuvieron lugar”. — Michael Pattison

Mejor película británica:

A Brief History of Princess X (Gabriel Abrantes)

¡Otro “corto”! Esta vez uno comisionado por dos organizaciones situadas en Londres, la Independent Cinema Office y LUX, tercer tramo de una serie de trabajos catalogados con el rótulo de ‘The Artists Cinema’ (continuando los proyectos previos de 2006 y 2010). Los trabajos resultantes de este proyecto fueron luego mostrados junto a nuevos lanzamientos en la exigua red de salas de cines-arte británicas. Co-financiada con organismos de Francia y Portugal, fue escrita, dirigida y narrada de forma desternillante por Gabriel Abrantes — nacido en Chapel Hill, Carolina del Norte en1984; estudió cine en Nueva York (Cooper Union), Tourcoing (Le Fresnoy) y París (École nationale supérieure des Beaux-Arts); ahora reside en Portugal—

Se trata del escultor rumano Constantin Brâncuși (1876-1957), específicamente su famosa pieza de bronce ‘Princess X’ (1915-1916) completada en París y ahora exhibida en el Museo de Arte de Filadelfia. En el descanso de la legendaria escalera de la institución, uno obviamente puede encontrar otra obra de bronce controversial y muy fotografiada. Realizada por A. Thomas Schomberg, se trata de un Sylvester Stallone de tres metros y diez toneladas.

José Luis Torres Leiva · Cineasta (El viento sabe que vuelvo casa) · Chile

All the Cities of the North (Dane Komljen)

Oleg y las raras artes (Andrés Duque)

Hermia & Helena (Matías Piñeiro)

Ta’ang (Wang Bing)

Austerlitz (Sergei Loznitsa)

Mejor opera prima:

All the Cities of the North (Dane Komljen)

Mejor película chilena:

Aquí no ha pasado nada (Alejandro Fernández Almendras) / Rara (Pepa San Martín)

Jorge García · Critico (Con los ojos abiertos-El amante) · Argentina

No ha sido este un año brillante en materia cinematográfica y no encuentro ninguna obra maestra ni tampoco una gran película. Sí algunos títulos valiosos que me permiten cumplir con los requerimientos de la encuesta (ordenadas por orden alfabético).

Como me da la gana 2 (Ignacio Agüero)

El director chileno ratifica que no solo es uno de los mejores documentalistas de Latinoamérica sino también del mundo. Riquísimas entrevistas realizadas en Chiloé a diversos personajes y a algunos directores de cine de su país.

El vecino  / One Floor Below (Radu Muntean)

Notable film del director rumano que –a partir de un suceso imprevisto- desliza una interesante reflexión sobre las decisiones personales en las que intervienen la moral y la ética.

The Son of Joseph / Le fils du Joseph (Eugene Green)

Green es unos de los secretos mejor guardados y uno de los directores más originales del cine actual, algo que se puede apreciar en este film de claras resonancias bíblicas.

Sieranevada (Cristi Puiu)

Otro muy buen film rumano en el que una reunión familiar es un pretexto para proponer una lúcida reflexión sobre la vida social y política en ese país. La puesta en escena, desarrollada en un solo ambiente, es un auténtico tour de force.

Ta´ang (Wang Bing)

Otro notable documental, austero y riguroso, del director chino, observando con lucidez la vida cotidiana de un grupo de refugiados en la frontera chino-birmana, en medio de un conflicto bélico (siempre fuera de campo).

Ópera prima

Juana a los 12 (Martin Shamly)

Muy interesante debut de este director argentino, que en su mirada del mundo de la infancia elude los clisés, incluso presentando a la niña protagonista sin la simpatía y ternurismo habituales.

Película argentina:

El limonero real (Gustavo Fontán)

Film basado en un relato de Juan José Saer, aunque eso es lo de menos, ya que lo que verdaderamente importa es que Fontán se mantiene fiel a su estilo visual y narrativo, uno de los más coherentes del cine argentino actual.

Isaac León Frías · Crítico (El Nuevo Cine Latinoamericano de los Años Sesenta. Entre el mito político y la modernidad fílmica) · Perú

Lamento no haber podido ver las últimas películas de Lav Diaz y Wang Bing que se dieron en Transcinema.

Sin orden de preferencia.

Elle (Paul Verhoeven)

Ma Loute (Bruno Dumont)

Sieranevada (Cristi Puiu)

La mort de Louis XIV (Albert Serra)

A Quiet Passion (Terence Davies)

Luciano Monteagudo · Crítico, programador, Buenos Aires, Argentina (Página/12, Sala Leopoldo Lugones, DocBuenosAires) 

Austerlitz (Serguei Loznitsa)

El procedimiento del mejor documentalista de la última década sigue el de su cortometraje El viejo cementerio judío (2015): ir revelando paulatina, magistralmente información sobre un lugar, un espacio físico sobre el cual los hombres y mujeres de hoy pasan y pisan sin siquiera saber qué hay bajo sus pies.

Dangsinjasingwa dangsinui geot / Yourself and Yours (Hong Sang-soo)

El gran maestro coreano sigue filmando siempre la misma película, que a su vez es siempre distinta, con infinitas variaciones, como las que atraviesa su protagonista. El juego del doble llevado a su máxima expresión.

La Mort de Louis XIV / The Death of Louis XIV (Albert Serra)

Con un rigor absoluto, que habla de la madurez de Serra como cineasta, de la que mucha crítica dudaba, su cuarto largometraje es un ejemplo no sólo del mejor cine clásico sino de cómo hacer un film de época, al punto de que el espectador parece estar compartiendo, de modo privilegiado, el día a día de un ocaso histórico.

Nocturama (Bertrand Bonello)

Assault on Precinct 13, de John Carpenter, y Dawn of the Dead , de George Romero, en la Europa del siglo XXI. Si, como dice el propio director, el discurso está en la puesta en escena, esta no podría ser más ajustada, más precisa: la preparación de los atentados está filmada con un seco virtuosismo que habla de un determinismo inapelable, en el que todo conduce inexorablemente a la tragedia.

O ornitólogo / The Ornithologist (João Pedro Rodrigues)

Las Estaciones de la Cruz revisadas con humor subversivo, belleza, irrisión y poesía por un cineasta de una libertad absoluta. Un film impredecible.

Opera prima:

Aus westlichen Richtungen / From the West (Juliane Henrich)

Una reflexión profunda, que se complejiza y enriquece con cada nueva visión, sobre las Alemanias de posguerra, a través de un recorrido por su arquitectura más banal, pero capaz de revelar toda una concepción del mundo.

Film argentino:

Cuatreros / Rustlers (Albertina Carri)

“Aquí hay que escapar del formalismo ‘civilizado’ de considerar formas políticas exclusivamente a los ‘partidos’ e ideologías a sus programas”, lee Carri del libro de su padre. Y ella como cineasta hace lo mismo: se escapa de los formalismos civilizados del cine político para hacer una película visceral, fuera de todo programa pero ferozmente ideologizada.

Kathrin Kolsteddhe · Programadora (Filmfest Hamburg) · Alemania

Estas son mis películas:

American Honey (Andrea Arnold)

Certain Women (Kelly Reichardt):

Raw (Julia Ducournau)

Things to Come (Mia Hansen Love)

Wild (Nicolette Krebitz)

Película alemana:

Toni Erdmann (Maren Ade)

Ópera prima:

Godless (Ralitza Petrova)

Bruno Oseguera Pizaña · Programador (Distrital) · México

En este año tan raro era de esperarse no una, sino dos obras maestras del más grande director vivo (para mí, en todo caso) que es Terence Davies. Su A Quiet Passion es un apasionante –como el mismo título lo indica– diálogo entre dos autores inimitables, delicados y poderosos en su forma de concebir el arte y la vida. Sunset Song no es en ningún sentido una película menor, y funciona como la contraparte perfecta de A Quiet Passion, brindándonos un cuerpo de trabajo tan bello que sólo se intensifica con los años.

Como todos los años, hice un poco de trampa ya que mi lista se conforma por películas que no puedo dejar de separar. Son películas que platican entre sí y enriquecen mucho más la sensación que dejan en uno con el paso del tiempo.

  1. A Quiet Passion · Sunset Song (Terence Davies)
  2. El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva) · Tempestad (Tatiana Huezo)
  3. Die Geträumten / The Dreamed Ones (Ruth Beckermann) · Love & Friendship (Whit Stillman)
  4. Elle (Paul Verhoeven) · La noche (Edgardo Castro)
  5. La luz incidente (Ariel Rotter) · Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Mejor ópera prima:

Bellas de noche (María José Cuevas)

Película mexicana significativa:

Tempestad (Tatiana Huezo)

Raúl Camargo · Director (Festival de Cine de Valdivia) · Chile

1-. Dawson City: Frozen Time (Bill Morrison)

2-. Sieranevada (Cristi Puiu)

3-. El viento sabe que vuelvo a casa / The Wind Knows I’m Coming Home (José Luis Torres Leiva)

4-. Yourself and Yours (Hong Sang-soo)

5-. El limonero real (Gustavo Fontán)

Opera Prima:

Ma Vie de Courgette (Claude Barras)

Film Nacional:

El diablo es magnífico (Nicolás Videla)

Diana Bustamante Escobar · Directora Artística (Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias – FICCI) · Colombia

Aunque la cartelera colombiana es de especial pobreza, salvo algunas excepciones como la programación del cine Tonalá en Bogotá o el MAM y Colombo Americano en Medellín, esta lista incluye dos títulos que pasaron por estas salas. Los demás los destaco del circuito de festivales de este año.

I Promise Anarchy / Te Prometo Anarquía (Julio Hernández):

Un amor cómplice que desborda los límites del encasillamiento sexual, social e incluso moral. Entre tantos coming-of-age, esta película desata con una renovada gramática visual una onda eléctrica dentro del cine de la región.

Neon Bull / Boi Neon (Gabriel Mascaro):

El cine es un tema de distancia, de ese lugar preciso de ver y entrar. Boi Neon se aleja de cualquier exotismo, manteniendo esa precisa medida con sus personajes, nos adentra en un Brasil agreste, pero poblado de la ternura de esos personajes. Una película de atmósfera donde la sensualidad, la sexualidad y lo animal, va encontrando su punto, invadiendo no solo la pantalla sino las ideas de los espectadores.

Aquarius (Kleber Mendoça Fiho):

Esta historia de resistencia y dignidad con una magnífica Sonia Braga habla de un cine profundamente político, que logra eso que Glauber Rocha hablaba como elemento de “conciencia nacional”. Su fuerza la encuentra en la humanidad de sus personajes, en actuaciones sólidas y en una narrativa manejada con rigor.

Austerlitz (Sergei Loznitsa):

Viendo el film de Loznitsa es imposible no pensar en “La violencia y lo sagrado” de René Girard. La “des-significación” y la banalización no solo de los lugares, sino de la memoria misma. Lo que un día fueron campos de concentración, maquinas de aniquilación humana y que años después de la guerra fueron abiertos para recordar lo sucedido. Sin embargo, hoy son hervideros turísticos, donde la imagen juega un papel fundamental, una imagen que observa detenida y agudamente Loznitsa, sin invadir, sin preguntar, más sin embargo generando incomodos cuestionamientos en el espectador.

The Neon Demon (Nicolas Winding Refn):

De odios y amores, sin un punto medio pero fascinante. Tildada como “basura de lata costura” entre otras, en esta película híperestilizada, con toda la cosmética de la publicidad hasta un nivel de estridencia, Winding Refn nos lleva por un viaje entre psicodélico y no tan alejado de la realidad vampírica y devoradora de nuestros días que consume, literalmente, la juventud y la belleza. Un mundo hipersexualizado, dominado por la violencia que ejerce el poder de y sobre la belleza, y el deseo mismo de poseerla.

John Campos Gómez · Director y programador (Transcinema, FICValdivia, Radical, Distrital) y crítico (Otroscines Perú) · Perú

Para mí, La Internacional Cinéfila más que una lista de preferidas del año es una oportunidad invaluable para hacer enfáticas recomendaciones de películas inquietas, mutantes, que se sacuden de encasillamientos genéricos y transitan vías más allá de las cinematográficas. Quiero que las busquen y las vean, como sea:

Stand by for a Tape Back Up (Ross Sutherland)

La balada del Oppenheimer Park (José Manuel Sepúlveda)

Le moulin (Huang Ya-li)

Inmortal (Homer Etminani)

La noche (Edgardo Castro)

Aprovecho y menciono mi película predilecta del 2016:

Como me da la gana 2 (Ignacio Agüero)

La que me pareció obra maestra indiscutible:

Sieranevada (Cristi Puiu)

Mención honrosa:

Rester vertical (Alain Guiraudie)

Y las películas peruanas elegidas son:

6 (Eduardo Quispe)

Vacío/a (Carmen Rojas Gamarra)

Claire Allouche · Asistente de programación (Festival de los 3 Continentes, Nantes) y redactora (Denise Labouche Éditions) · Francia

Tengo que confesar que, definitivamente, no vi a todas las películas que me hubieran gustado descubrir este año. Igual fue muy difícil y cruel elegir solamente cinco títulos. 2016 en las pantallas me pareció ser una cosecha llena de promesas cumplidas, de gestos valientes y generosos. Entonces, esta lista no tiene ningún carácter restrictivo, que se vea como una serie de espacios abriéndose.

Fi rassi rond-point (Hassen Ferhani)

Homeland : Iraq Year Zero / Homeland: Irak année zéro (Abbas Fahdel)

In the Last Days of the City (Tamer El Said)

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

In Jackson Heights (Frederick Wiseman)

Mejor ópera prima:

Kaili Blues (Bi Gan)

No se ve como una ópera prima sin plata, se vive adentro de la pantalla como si fuera una última película. Alucinante.

El film más significativo de mi país:

Apnée (Jean-Christophe Meurisse):

Este film comunica algo muy contemporáneo; una urgencia, una energía desesperadamente cómica y bruta a la vez, la necesidad de mezclar lo mas experimental (y enfrentarse al fracaso en ocasiones) con lo mas popular, proponer el encuentro entre algo muy político y una deriva más ingenua.

Iván Pinto · Crítico (La fuga, El agente cine) · Chile

Este año fui un poco menos a festivales, por lo que no pude ver todo lo que se comentó o discutió. Se suma a esta dificultad el retraso de estreno en cartelera en mi país en relación a otros contextos. Mi lista está medida en términos locales, es decir, contando el momento en que determinado film se proyectó en festivales o en sala.

1.- Elle (Paul Verhoeven)

2.- Tres recuerdos de juventud (Trois souvenirs de ma jeunesse) Arnaud Desplechin)

3.- Todo comenzó por el fin (Luis Ospina, 2015).

4.- El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

5.- Carol (Todd Haynes)

Opera prima:

Rara (Pepa San Martín)

Película chilena:

Si escuchas atentamente (Nicolás Guzmán)

María Aparicio · Cineasta (Las calles) · Argentina

Aquí van mis cinco películas sin orden de prioridad. Creo que varias de ellas pertenecen al 2015 pero han llegado a Argentina (o a Córdoba) en el 2016 y han marcado mi año. Difícilmente podría explicar el porqué, pero sé que no las olvidaré.

  1. Homeland: Iraq Year Zero (Abbas Fahdel)
  2. Mountain May Depart (Jia Zhang-Ke)
  3. The Treasure / Comoara (Corneliu Porumboiu)
  4. Les Sauteurs (Moritz Siebert, Estephan Wagner, Abou Bakar Sidibé)
  5. He Who Eats Children (Ben Russell)

Película Argentina:

El limonero real (Gustavo Fontán)

Opera Prima:

La Noche (Edgardo Castro)

Gonzalo de Pedro Amatria · Programador (Festival del Film Locarno / margenes.org / FICValdivia)

Fever Room (Apichatpong Weerasethakul) (performance-película) + Cemetery of splendour (Apichatpong Weerasethakul)

All the Cities of the North (Dane Komljen)

Cilaos (Camilo Restrepo) + Indefinite Pitch (James N. Kienitz Wilkins)

Rat Film (Theo Anthony)

Montañas ardientes que vomitan fuego (Helena Girón, Samuel M. Delgado) + I Had Nowhere to Go (Douglas Gordon)

Ópera prima

All the Cities of the North (Dane Komljen)

Porque la historia del cine entera, su pasado, y quizás también su futuro, se condensa en esta película que es a la vez una historia de amor y un manifiesto político.

Filme destacado español:

Informe general II. El nuevo rapto de Europa (Pere Portabella)

Película controvertida, y mal recibida en España, estoy convencido de que solo el tiempo nos dará la medida de la grandeza, o al menos, la oportunidad de esta nueva entrega del verdadero cineasta político en España, uno de los pocos que entiende el cine como un proyecto de diálogo con la historia, el presente, tanto del cine como de la política, y por qué, como una apuesta hacia el futuro. Si la primera parte de Informe General tuvo la capacidad de radiografiar un momento de cambio profundo como la transición de la dictadura a una forma de democracia, esta segunda entrega trata de hacer lo mismo con esta segunda transición, fruto de una toma de conciencia colectiva y una crisis económica, social y política.

Marcela Gamberini · Crítica (Con los ojos abiertos, Subjetiva) · Argentina.

A Quiet Passion (Terence Davies)

Carol (Todd Haynes)

Elle  (Paul Verhoeven)

La luz incidente (Ariel Rotter)

Las maravillas / Le meraviglie (Alice Rohrwacher)

La academia de las musas (José Luis Guerin)

Este año elijo una línea de lectura; la mirada de los directores sobre la mujer. Creo que estas películas ahondan en el alma y en el cuerpo femenino sin olvidar el valor estético y ético de la puesta en escena. El deseo femenino, sus claves, sus recorridos, sus coartadas laten en el corazón profundo de estas películas de manera sensible, inteligente y emotiva.

Ópera prima y pelicula representativa de argentina:

La noche (Edgardo Castro)

Porque sigo apostando sin dudar a la pasión y a la sensación antes que a la razón. Castro filma La noche delineando una idiosincrasia nacional en la relación de esos cuerpos con el espacio que los contiene y los expulsa, con el tiempo que pasa y se detiene, con los prejuicios y la moral preconcebida. La audacia, la soledad, una Buenos Aires extraña y a la vez conocida, la clase hacen de La noche una de las grandes apuestas de este año.

Xurxo Chirro · Cineasta (Vikingland) · España

Isabella Morra (Isabel Pagliai):

Tiene una puesta en escena sobria  y desconcertante que me sugirió caminos infinitos. Es la película que más pensé en ella.

The Wolf´s Lair / A Toca do Lobo (Cristina Mourão):

Un documental sobre cómo exorcizar poéticamente la memoria familiar.

Elle (Paul Verhoeven):

Por el recital de Isabelle Hubert.

El futuro perfecto (Nele Wohlatz)

Por la analogía entre el conocimiento de una lengua y la complejidad del lenguaje cinematográfico.

Mimosas (Oliver Laxe)

Por la facultad de aprehender el infraleve.

Aquí están mis cinco; no resalto ni película española ni ópera prima. Están implícitos en la lista.

Damien Manivel · Cineasta (Le Parc)  · Francia

No vi demasiada películas en este año, de tal modo que no seré del todo justo; pero son estos los títulos que vi y me gustaron:

  1. The Death of Louis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

Ha permanecido conmigo mucho tiempos después de verlo en la sala.

  1. Staying Vertical / Rester vertical (Alain Guiraudie)

Es una película muy generosa y extremadamente simple.

  1. The Son of Joseph / Le fils de Joseph (Eugène Green)

Porque sus actores miran directamente a nuestros ojos.

  1. No no sleep (Tsai Ming Liang)

Extrañaba las películas de Tsai; es un placer único entrar en su mundo.

  1. Right Now, Wrong Then. (Hong Sangsoo)

No se puede hacer una lista de las mejores sin un film de Hong.

Mejor ópera prima:

El futuro perfecto (Nele Wolatz):

El film cuenta con un delicado sentido del humor, tiene momentos hermosos sostenidos en retratos y una dirección lúdica de actores. Estoy seguro que Wolatz hará películas grandiosas en el futuro.

Mejor película de Francia:

Staying vertical / Rester Vertical (Alain Guiraudie)

Agnès Wildenstein · Programador asociada (DocLisboa) · Portugal-Francia

Mis cinco películas del año en orden alfabético debido a que las amo a todas por igual:

The Dreamed Ones (Ruth Beckermann)

Hermia & Helena (Matías Piñeiro)

How I Fell In Love With Eva Ras (André Gil Mata)

Mimosas (Oliver Laxe)

The Ornithologist / O Ornitologo (João Pedro Rodrigues)

Mi ópera prima:

El auge del humano / The Human Surge (Eduardo Williams)

Mi película favorita del país en el que nací:

Nocturama (Bertrand Bonello)

No quiero agregar ningún comentario. Por supuesto que amé otras películas, en especial una alemana y otra brasileña que seguramente estarán en las listas de mis colegas.

Benjamín Naishtat · Cineasta (El movimiento) · Argentina

1.Homeland: Irak Year Zero (Abbas Fahdel)

2. Aquarius (Kleber Mendon ça Filho)

3. Le Meraviglie (Alice Rohrwacher)

4. La Noche (Edgardo Castro)

5. Manchester by the Sea (Kenneth Lonergan)

Estas cinco películas hablan de amor y de resistencia. Están al alcance de todos, fueron hechas por cineastas humildes que saben dejar que fluya la vida en las imágenes, sin anteponerse y distraernos. Cineastas que no caen en la tentación del efecto y la novedad porque saben de qué quieren hablar. Las elijo por eso y porque siento que cada una a su manera, tomó la corajuda decisión de no especular, de no calcular, de durar lo que tenían que durar y mostrar lo que tenían que mostrar. Hablan de un mundo lleno de peligros, de una especie humana decidida a extinguirse, sin por eso ser obras oscuras. Derrochan libertad, eso que vemos tan poco.

Sergio Wolf · Cineasta (Viviré con tu recuerdo) y crítico (Revista de cine) · Argentina

Los 8 más odiados / The Hateful Eight (QuentinTarantino)

The Death of Louis XIV / La Mort de Louis XIV (Albert Serra)

Lejos de ella / Mountains May Departes (Jia Zhangke)

Todo comenzó por el fin (Luis Ospina)

Hermia & Helena (Matías Piñeiro)

Mejor Opera prima:

Le nouveau (Rudi Rosenberg)

Film significativo (argentino):

La noche (Edgardo Castro)

Bernhard Karl · Programador y director rogramador ((Munich Film Festiva /Around the World in 14 films Berlin) · Alemania

Sieranevada (Cristi Puiu)

The Woman Who Left / Ang babaeng humayo (Lav Diaz)

The Death of Louis XIV / La Mort de Louis XIV (Albert Serra)

American Honey (Andrea Arnold)

Neruda (Pablo Larrain)

Primera película:

Divines  (Houda Benyamina)

Película alemana:

Toni Erdmann (Maren Ade)

Jens Geiger · Programador asociado (Filmfest Hamburg) · Alemania

En mi percepción selectiva y personal de lo que sucedió en el cine en este año, el término “snub” (desdeñar) estaba presente en muchas de las conversaciones habituales. Para ser honesto, desconocía ese término, hasta ahora. Aparentemente, en la actualidad, goza de gran estima, y suele ser ideal para escandalizar(se) por razones diversas respecto de las decisiones de jurados en festivales, como si existiera una verdad objetiva en el cine que lo permitiera. Sea como fuere, mi lista incluye varias películas que obtuvieron premios y que fueron “snubiadas” en reiteradas ocasiones. Todas sobrevivieron al desdén.

Otra experiencia interesante de este año es que hubo muchas buenas películas alemanas. Títulos que dejaron la zona de seguridad, ese territorio que el cine alemán ha descansando por una década sin propósito alguno. Toni Erdmann fue uno de esos films, pero no el más interesante (he aquí, mi primer y pequeño “snub”). Wild es, en mi opinión, el film alemán que hay que ver, y también el film de género de AKIZ, The Nightmare / Der Nachtmahr, que también se me escurrió al final de mi lista.

Las mejores películas de 2016 por orden alfabético

The Time It Gets Dark / Dao khanong (Anocha Suwichakornpong)

En la misma línea de Rester Vertical de Alain Guiraudie y The Ornithologist, de J. P. Rodrigues, este film se anima a desafiar las expectativas de la audiencia. Su coherencia narrativa es otra, pues se trata de una especie de cine ateleológico que desestima las respuestas finales. El film de Anocha consigue hallar una línea flotante de narración y una respiración en la forma cinematográfica con lo que se evidencia la naturaleza de otro orden de construcción de cualquier historia.

Elle / Elle (Paul Verhoeven)

Verhoeven ha regresado a mi vida con una película que es poderosa, temeraria y divertida, como solían ser las películas que veía cuando empecé ir al cine (o también frente al televisor mientras poníamos un VHS). Recordaba Verhoeven con cariño.

Ta‘ang / Ta‘ang (Wang Bing)

Una vez más, Wang Bing permite tener una mirada sobre personas que están en la periferia de la sociedad, en este caso viven oscilando entre fronteras; son refugiados, siempre en movimiento en las regiones limítrofes de Myanmar y China. Un documental contemporáneo y eterno que examina el destino errante de los habitantes de una tierra sin nombre.

The Dreamed Ones / Die Geträumten (Ruth Beckermann)

Dos gigantes de la poesía de posguerra de la lengua alemana luchan con las palabras para expresar sus emociones. La correspondencia entre Ingeborg Bachmann y Paul Celan es de por sí literatura poderosa, y parece imposible transferir esa experiencia al cine. Sin embargo, gracias a un par de decisiones formales inteligentes, un elenco perfecto y un montaje astuto, Beckermann recrea este espacio literario y privado sin prescindir de las dimensiones sentimentales, artísticas y políticas.

 The Woman Who Left / Ang babaeng humayo (Lav Diaz)

Un año con dos películas de Lav Diaz para elegir es un buen año, aunque implique tomar una decisión difícil. Para que quede en actas, yo voy por la que ganó el León de Oro y no por la que se llevó el Oso de Plata – Lullaby to a Sorrowful Mystery-, pero ambas deberían estar en cualquier lista cinéfila, porque las dos películas nos dan una idea del alcance y la maestría del director filipino.

Mejor ópera prima:

Per Song / Per Song (Xie Shuchang)

Cinco amigos entre 37 millones de habitantes en la megaciudad de Chongqing. Los pibes viven flotando: una noche toman, otra pelean, cantan y conversan. Un film sobre el amor y la vida, el dolor y la tragedia. El director Xie Suchang, ahora radicado en Hamburgo, crea una película que parece casual y articulada por momentos pasajeros. Sin embargo el film es mucho más que eso, pues se trata de un íntimo y universal retrato de crecimiento, que tiene la dicha de conjurar el característico falso romanticismo de los coming of age.

La mejor película alemana del año:

Wild (Nicolette Krebitz)

Es una verdadera vergüenza que este film no haya cosechado los elogios que merece. Es la película más arriesgada que se ha hecho en Alemania en mucho tiempo. Krebitz explora un territorio desconocido, entre las fronteras del realismo social y un film de género. Merece nuestros elogios por ser un verdadero film femenino, por proteger su alma de la ideología de la taquilla y por la interpretación de Lilith Stangenberg.

Jérôme Baron · Director artístico (3 Continents) · Francia

Por orden alfabético

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Brooks, Meadows and Lovely Faces / Al Ma’ wal Khodra wal Wajh al Hassan (Yousry Nasrallah)

Ta’ang (Wang Bing)

Toni Erdman (Maren Ade)

The Woods Dreams Are Made of / Les bois dont les rêves sont faits (Claire Simon)

Ópera prima

Life After Life (Zhang Hanyi)

En 2015, la primera película del director chino Bi Gan me conmovió por su ambición y audacia. El 2016 tal vez dejó otra novedad, en un registro más discreto. Es posiblemente la llegada de otro cineasta chino cuyos próximos pasos habrá que seguir. Se trata, además, de otra región y situación familiar, y asimismo de otra tradición muy distintas a las que se ven en el film de Bi Gan; lo mismo sucede con la poética elegida para evocar las consecuencias que tiene sobre los hombres las revueltas y eventos que tienen lugar en la República Popular de China de nuestro tiempo. El árbol que los personajes de Life Afer Life desean (re)plantar en una tierra árida tal vez sean las vigorosas raíces de una futura película.

David Obarrio · Crítico (Cinemarama y El Amante) y programador (Bafici)

Sin orden de preferencia

La reconquista (Jonás Trueba)

Everybody Wants Some! (Richard Linkalter)

La idea de un lago (Milagros Mumenthaler)

Sing Street (John Carney)

Girl Asleep (Rosemary Myers)

Película argentina destacada del año:

El limonero real (Gustavo Fontán)

Ópera prima:

Las plantas (Roberto Doveris)

Me fijo en algunas de mis películas preferidas del año y descubro esto: la mayoría de ellas bordea, con una sensibilidad a la que no le faltan dosis de malicia, la dimensión de los años formativos de los personajes. Pienso quizá que ese trance en el que pasamos de un mundo a otro, no siempre con nuestra anuencia, es capaz de operar todavía como uno de los deslices más fértiles y luminosos del cine que nos toca en suerte. Si las imágenes en movimiento son siempre formas que tiemblan, acaso están por ello particularmente habilitadas para albergar el estupor, la expectativa, el miedo o el sentimiento de indefensión de los seres embarcados en un viaje rumbo a horizontes inciertos. Es precisamente frente a la pantalla que trato siempre de recobrar, quizá sin esperanza, pero también sin descanso, ecos perdidos de una especie de espectador niño, que mira todo como por primera vez y encuentra en el cine no un refugio sino un boleto hacia un universo cuya comprensión cabal está siempre un paso más allá, lejana aunque no inalcanzable. Veo entonces que mis películas del año –ese trazo un poco al azar que sin embargo nos constituye – encuentran a sus criaturas, incluso a las adultas, intentando saber quiénes son, escapando de los padres o acercándose a ellos, persiguiendo sombras, conviviendo con fantasmas; huyendo para encontrarse; inventándose un cuarto propio para asumir la desdicha y el desconcierto como reverberaciones tenaces de un mundo que se desea y a la vez se teme. Cuando las películas consiguen eso, producir la sensación de que su flujo de interrogantes, enigmas, misterios y temores también nos atraviesa, es que entablamos con ellas una comunión que desdeña la mirada “profesional” como única vía: pueden ser las películas que admiramos, pero sobre todo son las películas que amamos; aquellas capaces de proporcionarnos felicidad y congoja, tantas veces las dos cosas juntas. Todas las grandes películas, y considero que las que elegí lo son, develan zonas de la experiencia que no conocíamos, que creíamos perdidas o que habíamos olvidado. Además nos recuerdan, incluso jubilosamente, un cierto estado de fragilidad esencial en el que estamos inmersos. El cine puede ser también un mapa en el que nos buscamos a nosotros mismos.

Manuel Ferrari · Cineasta (Crónica de solitude) · Argentina

El viento sabe que vuelvo a casa / The Winds Knows I’m Coming Back Home (José Luis Torres Leiva)

Panke (Alejo Franzetti)

John From (João Nicolau)

Como me dé la gana II / This is the Way I like it II (Ignacio Agüero)

Yourself and Yours (Hong Sang-Soo )

Mejor ópera prima:

Implantación / Implantation (Fermín Acosta, Lucía Salas y Sol Bolloqui)

Diego Lerer · Crítico (Micropsia) y programador (International Film Festival & Awards Macao

5.- A Quiet Passion · Sunset Song (Terence Davies)

4.- Love & Friendship (Whit Stillman)

3.- Toni Erdmann (Maren Ade)

2.- Elle (Paul Verhoeven)

1.- Yourself and yours (Hong Sang soo)

Opera prima:

Kaili Blues (Bi Gan)

Película de mi país:

El futuro perfecto / The Future Perfect (Nele Wohlatz)

Farid Rodriguez Rivero ·Cineasta (Una semana con pocas muertes) y programador (Lima Independiente Festival Internacional de Cine) · Perú

  1. Beduino (Julio Bressane)
  2. Violet (Bas Devos)+ Alone / Hon-ja (Park Hong-min)
  3. Digimon Tri: Determination (Keitaro Motonaga)
  4. Happy Times Will Come Soon / I tempi felici verranno presto (Alessandro Comodin) + The Challenge (Yuri Ancarani) (Italia)
  5. Dead Ears / Šaltos ausys (Linas Mikuta) + The Road Back (Maurits Wouters)

Ópera prima:

Dark Skull / Viejo calavera (Kiro Russo) + The Night / La noche (Edgardo Castro)

Película peruana:

El poder de la X (José Miguel Vizcarra) + Grietas (Yhan Chávez)

 Sylvain George · Cineasta (Paris est une fete) · Francia

Eternalism Gallery : 3d For 2d Monitor (Ken Jacobs)

Strata 3

Turbulence

Orange Reflection

Traffic

Central Park

Snow In Headlights 1

Snow In Headlights 2

Snow In Headlights 3

Dogwalkers

Tree Decoration

Homeless Scholar 1

Homeless Scholar 2

Homeless Scholar 3

Walker

Rain

Ice Chips And Cigarette Butt

Liberate Masonry

Painting

Crossing Broadway And Chambers

Water

Stickers

From Brook 1

From Brook 2

From Brook 3

From Bitemporal Vision Of Sea 1

From Bitemporal Vision Of Sea 2

From Bitemporal Vision Of Sea 3

From Bitemporal Vision Of Sea 4

En cada película de Ken Jacobs el espacio y el tiempo como entidades se multiplican, examinando así diferentes aspectos de la existencia. Cada film devela la realidad como si estuviera emergiendo por primera vez frente a la cámara. Y sí, es justamente así que la realidad aparece como se ve aquí

The Ornithologist / O Ornitólogo (João Pedro Rodrigues)

Portugal: la tierra del cine, primera parte:

El cineasta encontró el camino y el viaje, para definir su espacio de libertad, como también el de su identidad personal (siempre en movimiento). Y al mismo tiempo, debido a su generosidad, es tal vez la humanidad en su conjunto la que puede ser redefinida.

Project X (John Gianvito)

El nuevo proyecto de Gianvito. Cada minuto de la obra de Gianvito, incluso si se trata de un film aún virtual, es absolutamente necesario.

Ópera prima:

Quinzaine claire (Adrien Genoudet)

No es solamente una película sobre un escultor de Cambodia que tiene que crear una escultura para conmemorar el genocidio perpetrado por los Jemeres Rojos; tampoco se trata solamente de una película que se pregunta cómo interpretar ese genocidio. Y es inexacto circunscribir el film al acto de crear y de representar. Es toso eso, pero también un film sobre la duda y su permanencia, un film que a su vez duda constantemente mientras busca entender con gran obstinación.

La primera película de un joven investigador, escritor y cineasta.

Otros:

Las películas de Andrea Tonacci

Olho por olho ; Blablablá; Bang bang ; Jouez encore, payez encore ; Conversas do Maranhão ; Guaranis do Espírito Santo; Discursos Canelas ; Os araras (1980-81); Biblioteca Nacional ; Serras da Desordem ; Já Visto Jamais Visto.

Andre ya no está, pero él permanece en sus películas. A través de su obra, ya no se puede hablar del mundo, sino de los mundos. Y entonces nos sentimos menos solos.

Reencontrándose con Paradjanov

Shadows of the Forgotten Ancestors; Sayat Nova; The Legend of the Suram fortress, Achib Kerib.

Un reencuentro con la obra de Paradjanov: un sentimiento de juventud, gestos narrativos poéticos y políticos y una innovación plástica total.

Mehrnaz Saeed Vafa · Cineasta (Jerry and I) y crítica (Abbas Kiarostami) · EE.UU.-Irán

Es una pena que en este año no he podido ver muchas películas.

A continuación algunas que pondero:

Certain Women (Kelly Reichardt)

Paterson (Jim Jarmusch)

Moonlight (Barry Jenkins)

Assassin (Hou Hsiao Hsien )

Este film se estrenó el año pasado, pero llegó a los cines de Chicago en este año.

Patrick Holzapfel · Crítico (Jugend ohne Film, Perlentaucher, kino-zeit.de, Festivalists, Mubi Notebook) y cineasta · Alemania

¿Qué es una paseo en el cine? No estoy seguro, pero el 2016 me prodigó algunas respuestas posibles. Primero es un sueño, un deseo o un temor llevado por palabras, imágenes y sonidos. Después se transforma en una decisión, una fuga, una lucha o una imposibilidad. Finalmente, todo se transforma en un juego, un trabajo, una muerte, una realidad fantasmal. Podríamos decir que todo deviene en sueño, deseo y miedo, una vez más. Un paseo por el cine no es algo que podamos considerar sin mucho cuidado.

The Dreamed Ones / Die Geträumten (Ruth Beckerman)

(Un paseo con palabras, sueños y ficciones)

The Dreamed Path / Der traumhafte Weg (Angela Schanelec)

(Un paseo entre varios)

Ta‘ang (Wang Bing)

(Un paseo con la gente y no frente a ellos)

Scarred Hearts /Inimi cicatrizate (Radu Jude)

(El sueño de un paseo con una camilla de rosas)

Brothers of the Night / Brüder der Nacht by Patric Chiha

(Un paseo en los deseos de un cine posible)

Película significativa de mi país

The Park / Le Parc (Damien Manivel)

Mi país es el cine, así que propongo a todos aquellos que lo visiten y se den un paseo por uno de sus parques donde los amantes aparecen y desaparecen como sombras misteriosas que caminan en reverso en un bosque. Es un parque que como el propio cine podría estar en cualquier lugar del mundo.

Ópera prima

Atlantic 35 (Manfred Schwaba)

En vez de elegir una película debutante elegí algo que podría denominarse la última película. Se trata de un film que dura apenas unos segundos y todavía colma un sueño. El sueño de filmar el océano en 35mm. Ni más, ni menos. Después este tipo de cine encuentra su capitulación, que es también, parafraseando a Ozu, su comienzo.

Gustavo Fontán· Cineasta (El limonero real) · Argentina

Las cinco películas que elijo me resultan extraordinarias: son rebeldes, provocadoras y gozan de una enorme libertad.

Como me da la gana 2 (Ignacio Agüero)

El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

Il solengo» (Alessio Rigo de Eighi y Matteo Zoppis)

The Dazzling Light of Sunset (Salome  Jashi)

El auge del humano (Eduardo Williams)

Juan Villegas · Cineasta (Victoria) y crítico (Revista de cine)

El orden es alfabético. Las cinco películas me gustan por motivos tan distintos que es difícil establecer preferencias. Pensando en la lista, confirmo una de mis obsesiones de los últimos tiempos: las buenas películas son el resultado del sistema industrial funcionando en sintonía con la mirada de un director o la consecuencia de modestos esquemas de producción permeables a la libertad creativa y, otra vez, a la mirada de un director. Los caminos del medio parecen inviables.

Hermia & Helena (Matías Piñeriro)

La mejor película de su director. La misma elegancia, virtuosismo y precisión en la puesta en escena de siempre, pero con un mayor compromiso con sus personajes. La escena entre padre e hija es una bienvenida novedad en el cine de Piñeiro.

Little Men (Ira Sachs)

Ozu en Brooklyn. No por la puesta en escena, que remite al clasisismo americano, sino por el tono narrativo (sin prisas ni golpes de efecto) y la forma de encarar un drama familiar en apariencia menor, pero en el que trasciende una complejidad nunca declamada.

Pete’s Dragon (David Lowery)

Los dragones suelen ser presencias cinematográficas potentes, pero este es definitivamente inolvidable. Un antídoto de gran cine familiar, frente al cinismo de Minions y la pereza de Buscando a Dory. Las emociones más nobles del cine de este año.

The Hateful Eight (Quentin Tarantino)

El director de cine más dotado del mundo. Nadie tiene más ideas de puesta en escena por minuto, nadie domina como él las herramientas de la narración. Acá lo sigue demostrando y le agrega una belleza visual que justifica su supuesto capricho al resistir con el rodaje en fílmico.

The Winds Know That I’m Coming Back Home / El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

Una película libre, emotiva y feliz. Como ya se ha dicho, esta película logra reunir lo mejor del cine de Kiarostami y el de Coutinho, para encontrar un tono original y nuevo. Torres Leiva es el mejor director latinoamericano de la década.

Mejor ópera prima / film significativo de la Argentina

The Night / La noche (Edgardo Castro)

Película imperfecta, incómoda, pero inmensamente viva, sincera y eficaz. Un retrato de la soledad y el desamparo realizado con una mezcla muy rara de crudeza y ternura.

Gustavo Beck · Crítico (Cinética-Mubi), programador (Olhar de Cinema, Cinéma du Réel, IndieLisboa) y cineasta (Chantal Akerman, de cá)· Brasil

  1. Elle (Paul Verhoeven)
  2. The Death of Louis XIV / La Mort de Louis XIV (Albert Serra)
  3. Toni Erdmann (Maren Ade)
  4. Sieranevada (Cristi Puiu)
  5. Hermia & Helena (Matías Piñeiro)

Ópera prima:

El auge del humano (Eduardo Williams)

Película brasileña:

Aquarius (Kleber Mendonça Filho, 2016)

Marcelo Alderete ·Crítico (Revista Haciendo Cine, Encerrados Afuera) y programador (Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, Antofadocs -Festival Internacional de Documentales de Antofagasta) · Argentina

Creo que podría repetir lo escrito el año pasado, pero esta vez en mi lista hay algunos tanques del “mundillo festivalero” (ese circuito tan criticado por algunos programadores), algo que había evitado en el 2015, así que escribo una nueva justificación. O algo así.

Hace unos días el amigo Boris Nelepo subió un post a Facebook (que feo que suena todo eso), en donde hacía referencia a las listas que llegan en estas épocas para resumir lo mejor del año cinematográfico. (Lo peor no hace falta porque todos sabemos que fue I, Daniel Blake de Ken Loach). No era exactamente una queja, pero si denotaba un cansancio a esta costumbre que a mí también me está fastidiando un poco. Quizás con la edad esté perdiendo mi cinefilia y su inseparable amor por las listas. Vaya uno a saber los motivos, pero últimamente esta tarea me genera más angustia que placer. No es una queja, es simplemente un comentario quejoso. Hay una diferencia. Una última aclaración, como no leo ruso, también es muy probable que lo escrito por Boris diga todo lo contrario a lo que yo creí entender. De ser así, igual estoy de acuerdo con el amigo Nelepo. Vivan las listas, aunque yo perezca. Acá va la mía (que quizás sea la última):

Yourself and yours, Hong Sang soo (Corea del Sur)

Destruction babies, Mariko Tetsuya (Japón, 2016)

Short Stay, Ted Fendt (EE.UU., 2016)

The dreamed ones, Ruth Beckerman (Austria, 2016)

La mort de Louis XIV (Francia / Portugal / España, 2016)

Ópera prima:

Rat Film, Theo Anthony (EE.UU., 2016)

Otras muy buenas operas primas:

The Stairs, Hugh Gibson (Canadá, 2016)

Short Stay, Ted Fendt (EE.UU., 2016)

Delta Boys, Ko Bongsoo (Corea del Sur, 2016)

The Challenge, Yuri Ancanari (Italia / Francia, 2016).

Film local:

Fue un año con demasiadas películas argentinas buenas o, al menos, interesantes. Elegir una se me hace bastante difícil. Eso sí, puedo decir que la pasé muy bien viendo La siesta del tigre (Maximiliano Schonfeld, 2016).

Jonathan Perel · Cineasta (Toponimia) · Argentina

Uno participa de estas listas no para lograr realmente que sus preferidas estén en el podio final, sino apenas para expresar un gusto personal, para pelear y defender lo que espera del cine, lo que quisiera que el cine sea en el futuro. En esta lucha, si las reglas lo permiten, me gustaría poder darle 5 votos a:

All the Cities of the North / Svi severni gradovi, (Dane Komljen)

Las que hubieran podido recibir alguno de los otros 4 votos podrían haber sido:

Dead Ears / Šaltos ausys (Linas Mikuta)

Atlal (Djamel Kerkar)

From the West / Aus westlichen Richtungen (Juliane Henrich)

Homo Sapiens, (Nikolaus Geyrhalter)

Jason Di Rosso · Crítico (ABC Radio National) · Australia

Sin orden de preferencia.

Sully (Clint Eastwood):

Una hermosa composición artesanal de flashbacks, visiones y re-creaciones.

Lost and Beatiful / Bella e perduta (Pietro Marcello):

Debido a su complejidad, sinceridad y extravagancia.

Certain Women (Kelly Reichardt)

Lúdica y rigurosa.

Aquarius (Kleber Mendonça Filho):

Un gran mural, enamorado de sus relatos, en deuda con cierto clasicismo, pero que se sostiene en una apasionada dinámica.

I Am Not Madam Bovary (Feng Xiaogang):

Impresionante verla en scope; pícara.

Mención honorable:

The Childhood of Leader (Brady Corbert):

Es maravillosa, y tiene un final notable.

Otra mención honorable:

A Magical Substance Flows Into Me (Jumana Manna).

Mejor ópera prima:

The Fits (Anna Rose Holmer).

Una película estadounidense que no teme de la alegoría, que prescinde de la explicación, situada entre un austero realismo y lo irracional.

La mejor película australiana:

Early Winter (Michael Rowe)

Rodada en Canada por un director australiano, Michael Rowe; o dicho de otro modo no ha sido un gran año para el cine australiano.

Diego Brodersen · Crítico (Página/12, Rolling Stone) y programador (Sala Leopoldo Lugones) · Argentina.

Como en la temporada anterior, este año pueden obviarse varios títulos si lo que se busca es ser original o provocador, pero resulta muy difícil abstraerse del regreso en la mejor de las formas del holandés Verhoeven (¡filme más seguido, hombre!) o el paso a un estadio creativo superior (¡tal cosa era posible!) de Matías Piñeiro, en la que tal vez su película más fresca y madura a la fecha. Sieranevada confirma dos cosas: el enorme talento de Puiu y (por si hacía falta confirmarlo nuevamente) que la cantera del cine rumano se ha agotado ni por lejos. El film de la alemana, por su lado, logra hablar de la humanidad toda en un envase de los más pequeños y entrega una de las grandes escenas del año (¿hace falta aclarar cuál?), mientras que la portuguesa John From se transformó, para quien esto escribe, en un caudal de placeres cinematográficos inagotables (y las fuentes del placer son así, personales e indiscutibles). ¡Y hay tantas películas que no pude ver aún!

En estricto orden alfabético:

Elle (Paul Verhoeven)

Hermia & Elena (Matías Piñeiro)

John From (João Nicolau)

Sieranevada (Cristi Puiu)

Tony Erdmann (Maren Ade)

Argentina:

La noche (Edgardo Castro)

Podrían haber sido otras, de directores establecidos y no tanto, en un año que acumuló varios títulos notables. Pero La noche, con su visceralidad y humanidad a flor de piel, fue tal vez el título más inesperadamente sorprendente. Un experimento narrativo y actoral con resultados memorables.

Ópera prima:

La acusación (Chaitanya Tamhane)

El estreno comercial de esta primera película de un realizador indio es, desafortunadamente, un caso aislado y casi único en la cartelera local.

Ela Bittencourt · Crítica (Film Comment) y programadora · Brasil

EL 2016 ha sido un año desafiante. Luché con varias películas que obtuvieron el beneplácito de la crítica (en esta lista no incluyo Elle ni Nocturnal Animals). He llegado a considerar si la violencia contra la mujer ha sido tan internalizada que ha dejado de ser un genuino tema de discusión. Existe un cierto tipo de cine de autor en el que la brutalidad subida de tono sirve para enmascarar(la), algo que rechazo. Reconozco que este parecer revela limitaciones personales –de principios, pues ningún tema y estilo tienen que estar vedados. Sin embargo, he hallado varias películas que me representan. La lista que presento aquí expande otras que ya he realizado para otros medios.

After Love (or Our Children) / L’economie du couple (Joachim Lafosse)

Lafosse reclamó mi atención con Private Property, con el protagónico de Isabelle Huppert. En After Love, una vez más la economía de una familia es el centro de la cuestión. En un mundo de consumo, es inusual que un cineasta elija como tópico la ansiedad económica de la clase media, sugiriendo que el amor y las matemáticas se yuxtaponen cruelmente. Lafosse apela a la compasión y extrae de sus actores interpretaciones que son conmovedoras.

Ama-San (Cláudia Varejão)

Los críticos han encomiado la deslumbrante fotografía de los pasajes acuáticos del filme de Varejão, pero han pasado por alto la increíble intimidad que la película retrata, más allá de las barreras culturales que existe entre la realizadora portuguesa y sus personajes japoneses. Mucho más que un mito de Terrence Malick acerca de la armonía de la vida, o un himno a la maternidad, Ama-San es un vistazo Mnouchkine por detrás de los rituales arcaicos y hábitos que suelen dispensar reparo, en contra de la impiadosa lógica del tiempo.

The Monument Hunter (Jerónimo Rodríguez)

Desde que vi el film de Rodríguez no puedo despegarme de la idea que todo viaje que emprendemos a grandes distancias termina siendo un reencuentro con nosotros, donde se reflejan traumas y esperanzas, constituyendo entonces un nuevo palimpsesto psíquico. Como sucede en una gran novela de Roberto Bolaño, este film es una amalgama de una búsqueda de tesoros urbanos, una historia de investigaciones y una indagación personal, en el que se combina lo político y lo personal con un misterioso ingenio e ímpetu.

Still Life / George Coeur Ventre (Maud Alpi)

La película de Alpi es tan serenamente desvergonzada que resulta inevitable que su política quede en segundo plano, como sucedió en su estreno en Locarno. El activismo de la cámara de ALpi es radical -¿se nos puede seducir, incluso si se trata de animales, ganado? Como sucede con J. M. Coetzze, Alpi pide por lo imponderable. Siendo yo una exvegerariana, salí del film sin respuestas, pero ciertamente la pregunta que esboza define nuestro zeitgeist.

Those Who Jump / Les sauteurs  (Moritz Siebert, Abou Bakar Sidibé, Estephan Wagner)

La esperanza en medio de la desesperación. En un año en el que muchos documentales se centraron en Europa y la crisis de refugiados, obteniendo así premios, he aquí finalmente el mundo que no vemos ni escuchamos, excepto en la singular obra de Sylvain George, lejos de la falsa dicotomía entre salvadores y salvados; para sobrevivir se requiere ingenio, resiliencia, fe y buena suerte. Una declaración política, un grito, una corrección de perspectiva; es el testamento más singular del año.

Ópera prima:

Between Sisters (Manu Gerosa)

Mientras miro documentales me suelo preguntar “¿por qué no la gente?” Las personas son singulares, misteriosas e infinitas. Es una pregunta que me recuerda lo difícil que resulta adentrarse en la vida de alguien y filmarla, que implica ganar confianza entre el hombre y la máquina; una chispa de magia. Las dos hermanas mayores de Gerosa permiten que los lentes de la cámara se transformen en espejos, y no eluden los innumerables reflejos, algunos amables, otros angustiantes o condenatorios.

A Significant Film From My Country:

Rifle, Davi Pretto

En el año que Aquarius y Boi Neo, Rifle de Davi Pretto integra la urgencia social y la destreza artesanal. La tierra es árida, la gente taciturna: una familia, una alianza desesperada para mantener lejos la extinción. La película de Pretto, como El extranjero de Camus y Meridiano de sangre de McCarthy, encarna la ira reprimida. El rifle representa una forma de vida que se defiende a expensas de todo; el miedo al mañana engendra violencia.

 Lucas Granero · Crítico (Las Pistas, Grupo Kane) · Argentina

Repaso, algo apresuradamente, el cuaderno donde voy llevando el registro de las películas que ví durante el año. 211 me da la cuenta final. No se si es mucho o poco (¿cómo saberlo?), pero lo cierto es que no me cuesta demasiado elegir de esa lista las cinco películas que mejor me han acompañado. No tuve muchas dudas y hasta podría decir que lo supe mientras las miraba, conmovido por esa primera impresión que luego va creciendo y creciendo en la memoria. Algunas de ellas hacen de la amabilidad de su tono la fuente secreta de su encanto. Otras, algo más oscuras y ambiguas, se tornan misteriosas e impenetrables. Todas ellas muestran el mundo que quieren y en él nos dejan habitar.

Elle (Paul Verhoeven)

En el año en el que la corrección política se impuso como regla, tuvo que llegar Verhoeven (siempre la excepción) para hacernos recordar que el deseo es siempre un arma de doble filo y, sobre todo, un gesto sumamente político.

El limonero real (Gustavo Fontán)

Fontán encontró la forma ideal de hacer convivir el misterio de la prosa de Saer con la delicadeza de su cine, siempre alerta a la aparición de los gestos mínimos, a los ruidos del silencio y al encuentro de la naturaleza y el hombre.

Hermia & Helena (Matías Piñeiro)

Despojándose cada vez más de sus propios hábitos, Piñeiro encuentra en la variación constante la clave para renovar su cine. El cambio, elemento central del relato, se manifiesta aquí en una forma siempre inquieta que encuentra belleza donde sea.

La mort De Louis XIV (Albert Serra)

Si bien no hay un solo plano en esta película que no esté impregnado con un misterioso magnetismo, el momento en el que el rey Léaud mira hacia la cámara cuenta como la experiencia más intensa vivida dentro de una sala durante el 2016.

Love & Friendship / Amor y Amistad (Whit Stillman)

La comedia del año sucede en 1790. La protagoniza una burguesa en decadencia, que habla mal de todo el mundo y planea las más enrevesadas estrategias para volver a ocupar su posición social. Que todo esto funcione sin cinismo alguno es lo que hace grande a Stillman.

Película argentina:

La Noche (Edgardo Castro)

Ópera prima

Short Stay (Ted Fendt)

Isabel Orellana Guarello · Programadora (FicValdivia) y productora (Araucaria cine)· Chile-Francia

Sin ningún orden en particular

All the Cities of the North (Dane Komljen)

The Dreamed Ones  (Ruth Beckermann)

Elle (Paul Verhoeven)

An Aviation Field (Joanna Pimenta)

Viejo calavera (Kiro Russo)

Mejor Opera Prima:

The Dazzling Light of Sunset (Salomé Jashi)

Mención Especial:

Territorio (Alexandra Cuesta)

Mejor Película Chilena:

[Pewen] Araucaria –  Carlos Vásquez

Diego Trerotola · Crítico (Varios medios) y programador (Asterisco) · Argentina

Gimme Danger (Jim Jarmusch)

Iggy Pop dice con una risa medio trabada que con los Stooges «limpiaron los 60» y sigue un plano de Dick Manitoba y otro de Stiv Bators; y así hasta crear una secuencia de los territorios marginales del punk en el mejor efecto de montaje que podía hacer Jarmusch, que acá se corre un poco de ser Jarmusch y deja que la historia de Iggy y los Stooges sea la voz épica de una generación de deformes. Por eso no se trata de un documental sobre una estrella de rock sino sobre el milagro de la música como torbellino colectivo.

Operación Avalancha (Matt Johnson)

Una cámara en mano con la ductibilidad para ir del mockumentary a lo Christopher Guest al thriller político más inquietante, en una película que resucita (literalmente) a Kubrick (pero, por suerte, Johnson está alejado de su estilo arty). Contiene la mejor persecución de autos de la historia del cine, que es lo mismo que decir que tiene una de las mejores secuencias cinemáticas de la historia de todo. Ahora hay que quemar todas las películas filmadas en cámara en mano que se hicieron en las últimas dos décadas, porque con esta sola nos arreglamos.

How I Fell In Love With Eva Ras (André Gil Mata)

Un registro contemplativo de una mujer viviendo en la cabina de proyección de un cine es un relato de post-cinefilia de ideas simples pero contundentes, como los fragmentos de películas vistos desde el reencuadre de la ventanilla de proyección. Un juego de oposición entre los pequeños milagros del cine y la gigantesca dimensión de lo pedestre. Una de las mejores justificaciones sobre la existencia del cine. Va como piña en un doble programa con Goodbye Dragon Inn.

Moonlight (Barry Jenkins)

Un niño negro se encierra en un departamento desconocido y en ruinas huyendo del bullying por ser puto, y un dealer lo rescata, le da un plato de comida, un paseo en auto, una vida. Y Moonlight, con un arco narrativo que nunca deja de ser honesto con retratar el doble filo de la vida marginal, es de esas películas que hacen que el cine sea una pantalla horizontal donde el sentimiento estalla como si fuese nuevo y de todos y todas.

No Money, No Future (Lee Dong-woo)

Unos punks coreanos toman las calles para gritarle a una sociedad que no los escucha todos los ruidos que callaron. Y este es el documental menos careta que existe y que mantiene bien alto el DIY como afrenta política. Noise ultraáspero, cerveza intravenosa, humor de locura ordinaria. Todo un movimiento musical marginal registrado desde adentro y sin distancia alguna, como si estuviese filmada en medio del fragor de un pogo.

Mejor película argentina:

Los ganadores (Néstor Frenkel)

Mejor ópera prima del año:

Las decisiones formales (Melisa Aller)

James Lattimer · Programador (Berlinale Forum) y crítico (varios medios) · Alemania

By the Time It Gets Dark / Dao Khanong (Anocha Suwichakornpong)

The Death of Louis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

Hustlers / Cuatreros (Albertina Carri)

The Illinois Parables (Deborah Stratman)

The Winds Know I’m Coming Back Home / El viento sabe que vuelvo a casa (Jose Luis Torres Leiva)

Siempre tengo que luchar con las listas de mejores películas, ya que todas las películas que me gustan tienden a amontonarse en mi mente, con imágenes distintas y sensaciones ligadas a ellas que pasan al frente en distintos momentos. Dependiendo en cuál momento del año se le pida a uno elegir un film, podría igualmente haber incluido en esa lista una película con mineros que suben y bajan en las montañas de Perú, otra con una familia romana que inventa historias en un monoblock de Toronto, un documental sobre el futuro constituido por imágenes del presente, una película con termitas que se desarrolla en Recife y otra en la que la relación entre un padre y una hija se reinventa en Rumania. La lista que antecede a este párrafo debe ser considerada como un grano de sal. Lo que sí tienen en común todos estos títulos es una riqueza, complejidad y densidad que implican ciertas ideas que solamente se revelan con el tiempo y después de una distancia conveniente. Tal vez las mejores películas del año son aquellas en la que uno se siente que todavía no ha terminado con ella.

Ópera prima:

All the Cities of the North / Svi severni gradovi (Dane Komljen):

Las preferencias son difíciles. Después de que se ha participado del circuito de festivales por un tiempo, se vuelve imposible juzgar a un film por lo que es; tarde o temprano las películas quedan asociadas a lo real, a las personas reales que las han hecho. Más allá de si a uno le resulta indiferente, si le gusta o si rechaza un film, el mero hecho de conocer a los responsables altera la lectura del film. La primera vez que vi All the Cities of the North fue en el living de mi casa a comienzo del año; al recordar ese momento aquel film que vi ya no es para mí el que veo hoy, aunque la dificultad en hallar una objetividad auténtica sigue siendo un problema inalterable. ¿Es así? A medida que he visto el film en reiteradas oportunidades, sus cualidades intrínsecas resultan imposibles de ignorar, más allá de la relación que pueda tener con la persona que lo hizo: son imágenes de lo hermoso, de una inexplicable ternura, imágenes que también remiten a una arquitectura que supo expresar con gran entusiasmo una utopía ahora perdida; una película que asimismo se refiere al rechazo de palabras y definiciones como una estrategia de supervivencia; en el film el amor es algo mayor, pero tampoco es suficiente.

Película alemana:

The Dreamed Path / Der traumhafte Weg (Angela Schanelec):

Todos los años se repite la misma discusión o los simposios acerca del estado actual del cine alemán; la habitual conclusión es afirmar que éste “no está bien”. Pero ¿qué país, además de Alemania, ha dejado dos películas tan significativas, y la vez tan diferentes, como Toni Erdmann y The Dreamed Path? No voy a proseguir con la merecida adulación que se le profirió al film de Maren Ade, pero sí diré que Schanelec es alguien que trabaja al límite de sus posibilidades. Su nueva película es algo así como un singular objeto monolítico situado en un paisaje; tan solo está ahí; fue concebidp sin ninguna motivación respecto de qué se pensaría de él, y resulta indiferente a la recepción. Pero a medida que se da vuelta alrededor de ese film, más se entiende su belleza, incluso su ternura y su poética, o el extraño y acaso indescifrable conjunto de sentimientos y gestos que le dan forma. Es otra película con la que todavía no he terminado de hacer una experiencia y tal vez nunca termine de entenderla.

José Miccio · Crítico (Hacerse La Crítica, Bazar Americano, La Otra) · Argentina

2016 no pide balance sino retreta. Prince, Rivette, Leonard Cohen, Kiarostami. Lo peor para mí pasó en enero. Que se te muera el tipo que tenías colgado en la pared de tu pieza no es joda. No al menos si esa pared todavía tiene para vos algo de importancia. El día que se murió Bowie me sentí tan mal como cuando se murió Spinetta. Hice lo mismo: puse sus discos, salí a caminar. Yendo por Santa Cruz una ex alumna me saludó de lejos, y yo le contesté, porque sabía que sabía y le importaba: “Se murió Bowie, Majo, se murió Bowie”, y seguí caminando como un zombi hacia la costa, y escuchando lo que acababa de decir, y pensando que no era posible, y apostándome: “Si está el mar, no pasó”, y el mar estaba, y Bowie se había muerto. El mundo es una estafa. La saña de lo real culeándote día a día. / Tal vez por eso (quiero decir, por Bowie), las cinco películas que elegí este año (y La muerte de Luis XIV, que sería mi sexta, y Misterios de Lisboa, que sería la primera pero no permite compañía) muestran con orgullo eso que son: pases de magia, artificios, ingenios para que la identidad tropiece. Es claramente el caso de Hail, Caesar! Pero también el de The Hateful Eight. En los Coen la ficción funciona como el único orden capaz de sobrevivir entero en un mundo ingobernable. En Tarantino, como el espacio en el que la violencia puede desplegarse como espectáculo grotesco. El número musical de Channing Tatum y el maltrato que recibe durante tres horas el personaje de Jeniffer Jason Leigh no se parecen en nada pero comparten la misma condición de posibilidad (qué fino eso): un cine libre, mediado, imposible de juzgar de acuerdo con el modo en que nuestro cuerpo se mueve y nuestras ideas se afirman en la vida cotidiana. Elle está del lado de Tarantino. Three y Train to Busan, del lado de Hail, Caesar! / En la extraordinaria Furyo, de Nagisa Oshima, David Bowie desmaya de un beso a un oficial japonés. Un cine así necesitamos.

Películas

The Hateful Eight (Quentin Tarantino)

Hail, Caesar! (Joel y Ethan Coen)

Elle (Paul Verhoeven)

Three / Sam Yan Heng (Johnnie To)

Train to Busam / Boosanhaeng (Yeon Sang-ho)

Opera Prima

The Witch (Robert Eggers)

Película argentina

Juana a los 12 (Martín Shanly)

Fernando Luis Pujato · Crítico (Cinéfilo) y programador (EPA Cine) ·Argentina

The Ornithologist / O Ornitólogo (João Pedro Rodrigues)

Ta’ ang (Wang Bing)

Le dernier voyage de Madame Phung (Tham Nguyen Thi)

Certain Women (Kelly Reichardt)

Julius´s Last Christmas / La última navidad de Julius (Edmundo Bejarano)

Mejor ópera prima:

Algas (María Laura Pintor)

Film representativo:

Toponimia (Jonathan Perel)

He pensado mucho sobre esta reducida lista, en realidad sobre si encabezarla o no con Misterios de Lisboa, uno de los grandes estrenos del año junto a Homeland (Iraq Year Zero) y Mountains May depart; y a estas dos últimas las voté el año pasado en este mismo sitio. He visto el film de Ruiz tres veces, una en el curso de Roger, la otra en el querido cineclub Cinéfilo y luego en el cine; podría verla una y otra vez por el resto de mi vida. El caso es que decidí no incluirla para intentar dialogar con otros films aunque sólo sea por ahora a través de un listado y seguramente porque es uno de esos films que se llevan en el corazón, como My Darling Clementine y la Emperatriz Yang Kwei-fei, por poner sólo dos ejemplos a la par. Probablemente también porque salvo Toponimia -una creativa indagación acerca del horror de la última dictadura militar en nuestro país- en el resto de los films sus resoluciones formales se encuentran estrechamente ligadas al tránsito vivencial de sus personajes, como en Ruiz. Y finalmente porque todos despliegan unas vidas dentro de aquello que son, de su lugar en el mundo, no luchando por aquello que deberían ser, por otro lugar en este mismo mundo. Como en el querido Raúl Ruiz.

Daniel Hui · Cineasta (Snakeskin) · Singapur.

Sin orden de prioridad

Journey to the Shore (Kiyoshi Kurosawa)

El maestro de la forma cinematográfica trabajando en la cúspide de su genialidad.

In the Last Days of the City (Tamer El-Said)

La tarea imposible de un cineasta: cartografiar los contornos de su ciudad, porque la ciudad es un sueño que desaparece al despertar.

Poet on a Business Trip (Ju Anqi)

La anatomía de un viaje –caminos de montaña que no van a ninguna parte, encuentros sexuales que revelan un futuro imposible y la melancolía de una parada solitaria de camiones en el medio del desierto.

The Final Master (Xu Haofeng)

Xu Haofeng ha sustituido a King Hu como guardián de las películas chinas de artes marciales; perfección del vínculo entre movimiento, montaje y sonido.

Yourself and Yours (Hong Sangsoo)

Estaremos atrapados por siempre en las imágenes que producimos del mundo, pero las películas de Hong proponen una salida; su película más libre desde Women on the Beach

Una película de Singapur:

A Yellow Bird (K. Rajagopal)

Esta película tiene lo que la sociedad singapurense carece: compasión.

Ópera prima:

10 Cloverfield Lane (Dan Trachtenberg):

Una película que sintetiza nuestro tiempo a la perfección: atrapados en una falsa dicotomía, pensamos que si algo es verdadero, lo opuesto tiene que ser falso. Pero dos cosas pueden ser verdad al mismo tiempo, y no saber que así puede serlo será nuestra capitulación.

Cintia Gil · Directora (DocLisboa) · Portugal

  1. Nocturama (Bertrand Bonello)

Esta película me resultó un shock. Es al mismo tiempo intuitiva sobre nuestro futuro y extremadamente madura acerca de nuestro pasado. Es la película más inteligente que vi recientemente en torno a nuestra relación con el terrorismo, con nuestro asombro y la vacuidad de las explicaciones que provienen de viejas categorías de análisis. Nocturama establece un vínculo entre la historia europea (una historia que no parece en verdad constituir memoria), la cultura contemporánea de este milenio y la forma en la que nuestra sociedad poscapitalista empuja a darle forma a nuestra concepción sobre el poder. Es una película enigmática y extremadamente densa que se resiste a cualquier lectura inapropiada y moralista del cine.

  1. Mountains May Depart / Shan he gu ren (Jia Zhangke)
  2. Incident Reports (Mike Hoolboom)
  3. 5. The Artist of Fasting / Danjiki geinin (Masao Adachi) + The Dreamlike Path / Der traumhafte Weg (Angela Schanelec)

+

I, Daniel Blake (Ken Loach) + General Report II. The New Abduction of Europe / Informe General II. El Nuevo Rapto de Europa (Pere Portabella)

Aun cuando no formen parte de mis preferencias, debo mencionar estos títulos por la importancia que tienen para nuestro tiempo. Son películas que están concebidas para intervenir directamente en el presente, pero que, al mismo tiempo, ayudan a entender lo que está sucediendo. Una película que finalmente termina siendo discutida en el parlamento británico, como sucedió con I, Daniel Blake debe ser considerada; es un acontecimiento significativo. Informe General II, un esfuerzo reciente del maestro Pere Portabella retoma, cuarenta años después de su Informe general sobre unas cuestiones de interés para una proyección pública, la democracia en España; se trata de una generosa lección de cine político

Algunas películas portuguesas que aún no se han discutido lo suficiente:

Third Floor / Terceiro Andar (Luciana Fina)

Correspondences / Correspondências (Rita Azevedo Gomes)

How I Fell in Love With Eva Ras / Kako sam se zaljubio u Evu Ras (André Gil Mata)

Downhill (Miguel Faro)

Mejor ópera prima:

A Road / Aru Michi (Daichi Sugimoto)

Eva Sangiorgi · Directora (Ficunam) · México-Italia

 Aquí están mis películas del año.

Toni Erdmann (Maren Ade)

Staying Vertical / Rester vertical (Alain Guiraudie)

The Deat of Louis XIV / La mort de  Luis XIV (Albert Serra)

The Ornithologist / O Ornitologo (João Pedro Rodrigues)

And babaeng humayo / The Woman Who Left (Lav Diaz)

 

Mario Salazar · Crítico (Nenúfares efervescentes) · Perú

Mi lista va en orden de mayor/mejor a menor, aunque están cerca las unas de las otras. He colocado algunos empates porque son todas estas obras las que más me han enamorado y entusiasmado, y dejar alguna fuera sería incompleto.

Ausma (Laila Pakalnina)/ Arrival (Denis Villeneuve)

Ausma me ha mostrado lo inteligente, bello, complejo y creativo que puede ser el cine. Arrival es una película que me ha conmovido muchísimo.

Elle (Paul Verhoeven)/ The Neon Demon (Nicolas Winding Refn)

A estas dos maravillosas películas las hallo imperfectas, recriminables e híper arriesgadas, distintivas, atrevidas y sobre todo muy cinéfilas.

La academia de las musas (José Luis Guerín)

No soy muy seguidor de José Luis Guerín, pero esta película es perfecta, con mucho ingenio por sobre presupuesto hace una película demasiado inteligente y clara.

Take Me Home (Abbas Kiarostami)/Foyer (Ismaïl Bahri)

La despedida de Abbas Kiarostami es un romance con nuestra bondad, optimismo y alegría por la vida, como por la emotividad del cine. Foyer me saca una sonrisa, siempre es genial que el cine nos rete con su originalidad, valentía, soledad y personalidad.

Alone (Hon-ja, Park Hong-min)/ Hell or High Water (David Mackenzie)

Películas que entretienen de manera especial, que son puro placer de principio a fin.

Una ópera prima:

El rastreador de estatuas (Jerónimo Rodríguez)

Una película que trasmite nobleza.

Una película representativa del 2016 de mi país:

Este año no he visto nada que pueda mencionar, creo que un poco el listón ha quedado alto con Videofilia y otros síndromes virales (2015) y el culmen del cine independiente peruano.

Martin Pawley · Crítico (Acto de Primavera) · Galicia (España)

Aquarius (Kleber Mendonça Filho, 2016)

Los breves flashes que casi al principio de la película evocan la juventud (sexual) de un personaje me parecen una de las proezas cinematográficas del año. No se puede decir más con menos.

Elle (Paul Verhoeven, 2016)

Un placer por su gozosa desvergüenza, que remite a su anterior trabajo, menos aplaudido de lo que debería, Steekspel (2012).

O ornitólogo (João Pedro Rodrigues, 2016)

La película más libre y exuberante, también la más generosa para un espectador atento.

Paterson (Jim Jarmusch, 2016)

Cuando hay tantos filmes que gritan, se agradece uno que habla en voz baja. Es, además, uno de los mejores retratos del proceso de creación (literario en este caso) visto en una pantalla.

Toni Erdmann (Maren Ade, 2016)

Tragicomedia política y familiar a la vez: trata de un padre empeñado en salvar a su hija y de la urgente necesidad de salvarnos a todos de los horrores del capitalismo sin control. Deberían estudiarla todos los Ken Loach del mundo.

Siento que es una lista muy obvia, pero es que ¡cinco películas son tan pocas! Fuera de catálogo: la mejor película que he visto en 2016 es de hace cincuenta años, The Art of Vision de Stan Brakhage, que es como un curso para aprender a mirar.

  1. Ópera prima

En una época en que los medios digitales ponen (casi) al alcance de cualquiera hacer una obra audiovisual, ¿a qué le debemos llamar “ópera prima”? Me quedo con el primer largometraje de alguien que antes hizo varios cortos (que no conozco), Ross Lipman. Su fascinante ensayo Notfilm (2015) es un modelo a imitar en el tratamiento del cine desde el cine.

Vivimos rodeados de ruido, vulgaridad y pensamiento blando, en todos los campos, de la política a la cultura. Por eso es útil escuchar a Herzog y/o al genial manipulador Adam Curtis y su advertencia sobre las redes sociales y la fascinación acrítica ante lo que simula ser progreso. La renuncia al pensamiento crítico equivale a entregarse a la fe (en Dios, en Alá, en Wall Street, en el futuro) y eso jamás en la historia de la humanidad ha sido provechoso. Hace falta más pensamiento científico, también para pensar el cine.

  1. «A minha pátria é a língua portuguesa»

Hago mía la frase de Pessoa: mi patria es la lengua (gallego)portuguesa. Y a esa patria pertenecen dos películas ya citadas, Aquarius y O ornitólogo. Añado otras. En Galicia y en gallego el corto A liña política (The Policy Line) de Santos Díaz, con una pareja de intérpretes en estado de gracia, María Vázquez y Xosé Barato. Cartas da guerra de Ivo Ferreira, bellísimo acercamiento a una herida aún reciente -la guerra en Angola- a través de las cartas que escribió uno de los mejores escritores en lengua portuguesa, António Lobo Antunes. La memoria de la guerra se extiende en el tiempo y el espacio y lo contamina todo, como refleja de forma sensacional el corto portugués de animación Estilhaços (Fragments) de José Miguel Ribeiro. Casi sin palabras, una de las mejores películas de 2016 es otro corto, Ascensão, obra de emocionante madurez de un cineasta joven, Pedro Peralta.

Concluyo con una impresionante experiencia cinematográfica que no es una película: la exposición con la que llenaron João Pedro Rodrigues y João Rui Guerra da Mata la Galería Solar de Vila do Conde este verano. Y en particular una instalación, la que recoge el casting de Ricardo Meneses, protagonista de O fantasma.

Ignacio Agüero · Cineasta (El otro día) · Chile

The Wind Knows I’m Coming Back Home / El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

The Monument Hunter / El rastreador de estatuas (Jerónimo Rodríguez)

El limonero real (Gustavo Fontán)

John From (João Nicolau)

Dark Skull / Viejo calavera (Kiro Russo)

Mejor ópera prima:

The Monument Hunter / El rastreador de estatuas (Jerónimo Rodríguez)

Película significativa de mi país:

The Wind Knows I’m Coming Back Home / El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

Pablo Mazzola · Director artístico y programador (Fest Nac de General Pico, JIIFF, Uruguay) · Argentina

Staying vertical/ Rester Vertical (Alain Guiraudie)

Paterson (Jim Jarmush)

Destruction Babies (Mariko Tetsuya)

The Son of Joseph / Le fils du Joseph (Eugene Green)

Old Stone /  Lao Shi (Johnny Ma)

Ópera prima:

Life After Life / Zhi fan ye mao (Zhang Hany)

Javier Olivera · Cineasta (La sombra) · Argentina-Uruguay

Este año estuve muy poco en el circuito festivalero y realmente no tengo la información como para elegir 5 películas. Sólo me referiré a una:

Homeland, Iraq Year Zero (Abbas Fahdel)

Está película de 5 horas es una épica en sentido cinematográfico pero es mucho más que eso; se trata de una cruda y amorosa lección de humanidad. Una celebración de aquello que nos constituye profundamente y que en estos tiempos se ignora, especialmente cuando existe una intención de ocultar lo humano de esos «otros», en estecaso, los iraquíes.

Homeland, Iraq Year Zero da a ver la cotidianeidad de una familia, y cómo el contexto del antes y después de la invasión estadounidense atraviesa sus vidas. El riesgo, la valentía de Fahdel es persistir en su misión, arriesgando su propia vida, exponiendo la intimidad de su propia familia pero nunca apelando al golpe bajo ni al mensaje panfletario. Es una película política más allá de la denuncia; lo es en sentido de la defensa de los más altos valores humanos.

La visión de la película fue para mí una experiencia demoledora, profunda, casi una epifanía. Cada vez que vemos a Haidar, el sobrino del director, vemos en su inocencia y curiosidad a la humanidad toda y unida en el reconocimiento de estas emociones tan humanas, pero también vemos un futuro, una posibilidad, cercenados. Ahí lo trágico y lo bello de esta monumental obra.

Cristina Nord ·Crítica y programadora (Goethe-Institut) · Bélgica-Alemania

Sin orden de prioridad

Ang Babaeng Humayo 7 The Woman Who left (Lav Diaz)

Toni Erdmann (Maren Ade)

Elle (Paul Verhoeven)

Nocturama (Bertrand Bonello)

Ma Loute / Slack Bay (Bruno Dumont)

En la categoria «película alemán que me impresionó» quisiera mencionar dos películas:

Wild (Nicolette Krebitz)

Havarie (Philip Schefnner)

En cambio, no puedo hablar de ninguna ópera prima, porque no vi ninguna que me pareció interesante.

Oscar Cuervo · Crítico (La otra revista y programa de radio) · Argentina.

«El encanto que lucha por nosotros, el ojo de Venus que cautiva y enceguece hasta a nuestros enemigos, es la magia del extremo, la seducción que ejerce todo extremo» decía Nietzsche hace 125 años para referirse a su época que más aún es la nuestra.

Este año vi algunas películas que tocan y se dejan tocar por la magia y el horror del extremo. Estas películas son muy distintas entre sí pero su virtudes que están heridas por el extremismo que rige la época y lo plasman en su forma y su textura cinematográfica:

Los 8 más odiados / The Hateful Eight (QuentinTarantino)

Homeland – Iraq Year Zero (Abbas Fahdel)

La noche / The Night (Edgardo Castro)

Cump4rsita (Raúl Perrone)

Train to Busan (Yeon Sang-ho)

Ópera prima:

La noche (Edgardo Castro):

La excepcional determinación para asumir una política de la mirada evidencian que un autor se puede definir por una sola película, por su política, no por sus «constantes temáticas».

Película argentina:

La luz incidente (Ariel Rotter):

La rareza de La luz incidente es su fe rotunda en la construcción de una ficción y la confianza en que el espectador puede meterse en ella. Hoy ya casi no se hacen películas así.

Magdalena Arau · Programadora (Bafici) · Argentina.

Por orden alfabético:

Como me da la gana 2 / This is the way I like it 2 (Ignacio Agüero)

La Idea de un Lago / The Idea of a Lake (Milagros Mumenthaler)

Mistérios de Lisboa / Mysteries of Lisbon (Raúl Ruiz)

O Ornitólogo / The Ornithologist (João Pedro Rodrigues)

Oleg y las raras artes / Oleg and Strange Arts (Andrés Duque)

Mejor ópera prima:

Viejo Calavera / Dark Skull (Kiro Russo)

Un film significativo de mi país:

La noche / The Night (Edgardo Castro)

Anita Piotrowsk · Crítica (Tygodnik Powszechny) y programadora (Krakow Film Festival) · Polonia

Sieranevada (Cristi Puiu)

Paterson (Jim Jarmusch)

Toni Erdmann (Maren Ade)

Anomalisa (Charlie Kaufman, Duke Johnson)

Fire At Sea / Fuocoammare (Gianfranco Rosi)

Ópera prima:

Bone Tomahawk (S. Craig Zahler)

Película significativa de Polonia:

Ostatnia rodzina / The Last Family (Jan. P. Matuszewski)

Ivonete Pinto ·Crítica (Teorema e Orson) · Brasil

Toni Erdmann (Maren Ade)

Embrace of the serpent / El abrazo de la serpente (Ciro Guerra)

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Mountains May Depart / Shan he gu ren, China (Jia Zhangke)

Cemitery of Splendor / Rak ti Khon Kaen (Apichatpong Weerasethakul)

Ópera prima:

Viejo calavera / Dark Skull (Kiro Russo)

Película brasileña:

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Kleber Mendonça Filho, alguna vez crítico de cine, en su tercer film continúa buscando cómo mirar lúcidamente los conflictos de clase en el contexto de los problemas contemporáneos de Brasi. Si en Sonidos vecinos (2012) los conflictos aludidos estaban claramente identificados, en Aquarius resultan más sutiles, sin dejar de referirlos a una violencia endémica de la sociedad. A través del personaje de Clara (Sonia Braga en un momento excepcional), Mendonça Filho nos lleva a pensar en Bartleby de Herman Melville: Clara dice “preferiría no hacerlo”, mientras la mayoría simplemente preferiría hacerlo.

Antônio Junior · Director y director de programación (Olhar de Cinema – Curitiba IFF) · Brasil

El mundo de hoy es tan complejo y con tantos dilemas para los hombres que las películas que he elegido que, además de contar propuestas formales inquietantes, tocan cuestiones que expresan nuestro contexto social e histórico.

Between Fences / Bein gderot (Avi Mograbi)

Brothers of the Night / Brüder der Nacht  (Patric Chiha)

Elle (Paul Verhoeven)

Son of Joseph / Le fils de Joseph (Eugène Green)

Toni Erdmann (Maren Ade)

Ópera prima

Antonia. (Ferdinando Cito Filomarino)

Película de Brasil

A Cidade do futuro (Marília Hughes Guerreiro, Cláudio Marques)

Pamela Biénzobas · Crítica y consultora · Chile-Francia

Siete películas (5+1+1) que me han impactado gracias al inteligente y sensible uso del cine, y que meses después de haberlas visto no se disipan sino todo lo contrario: persisten y siguen creciendo en mí.

1.- Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

2.- Mimosas (Oliver Laxe)

3.- Nocturama (Bertrand Bonello)

4.- Toni Erdmann (Maren Ade)

5.- Under the Sun / V paprscích slunce (Vitaly Mansky)

Ópera prima

Ma vie de Courgette (Claude Barras)

El 2016 continúa entregándonos buenos ejemplos de cineastas de todo el mundo que se dirigen a los niños de distintas edades con respecto y dignidad; aun sin evadir temáticas complejas y arduas, pero trabajándolas de una forma directa de modo que cada espectador pueda relacionarse según su propia edad y experiencia. La adaptación de la «Autobiographie d’une courgette” de Gilles Paris con la técnica del stop motion puede ser entendida como un cuento de hadas triste (como lo ha sugerido Dana Linssen) o tal vez como el drama social más optimista que se haya visto en mucho tiempo.

Películas de Chile:

The Winds Know I’m Coming Back Home / El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

La esperanza existe aún en la bondad de los hombres. Torres Leiva registra a Ignacio Agüero mientras éste observa y escucha a la gente que vive en la pequeña isla de Chiloé. Este filme que cuenta con uno de los títulos más hermosos de la historia del cine, revela una de las maravillas de Chile (esta misteriosa región regida por sus propios mitos y lógica) y asimismo introduce el mejor cine chileno actual (dos maestros muy distintos pero complementarios, Torres Leiva y Agüero, uno detrás de cámara, el otro frentea ella, y no estoy utilizando la palabra maestro sin comprender el peso que tiene). La mirada de Torres Leiva, y en ese sentido todo su cine, es enteramente humanista, amoroso y respetuoso, capaz de capturar la hermosura de los paisajes y la dignidad esencial de cualquier hombre. (De visión complementaria resulta Como me da la gana 2, de Ignacio Agüero).

Abbas Fahdel · Cineasta (Homeland: Irak Year Zero) · Irak-Francia

Aquí mis películas preferidas:

La academia de las musas (José Luis Guerín)

Todo comenzó por el fin (Luis Ospina)

The Assassin (Hou Hisiao-hsien)

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Another Year (Shengze Zhu)

Eduardo Rojas · Crítico (Hacerse la crítica). Argentina

Me atengo para mi elección a las películas que vi en este año aunque alguna se haya visto el anterior. Me complazco en hacerlo porque es el primer año en que la integro –distinción que agradezco- y porque las grandes películas lo merecen.

El primer lugar es para Homeland, las restantes pueden ser intercambiables.

Homeland, Iraq year zero (Abbas Fahdel)

Una película sobre la guerra, sobre la patria, la familia, su destrucción y su persistencia. Un testimonio de dolor que se eleva de lo mínimo (no minimalista) hasta lo trágico sin que importen las transiciones, porque Fahdel nos hace parte de su familia.

Sully (Clint Eastwood)

El clasicismo no es un estilo para Eastwood, es una forma de vivir y de asomarse al final de su vida. El deber como heroísmo y viceversa. La narración duplicándose, yendo y volviendo sobre sí misma para demostrar que aún desde el clasicismo se puede apuntar hacia un lugar cercano a lo experimental.

Visita ou Memórias e Confissoes (Manoel de Oliveira)

También anciano, también clásico pero de otra vertiente cultural, Manoel de Oliveira preparaba su despedida hace cuarenta años anticipando el cine que haría en su ancianidad, conviviendo con fantasmas y transformando todo tiempo en presente ¿Será tan disparatado emparentar a Don Manoel con el Eastwood de la senectud, casi tan viejo y tan sabio?

Julieta (Pedro Almodóvar)

Otro clásico. Almodóvar se acerca a las formas de la tragedia a medida que (le) pasan los años, trascendiendo modernismos o posmodernismos. Todo en Julieta es oscuro y luminoso, pesimista y esperanzado.

Scarred Hearts (Rumania)

Radu Jude. Apogeo del Nuevo cine rumano ahora indagando en el pasado mediato. Biografía del poeta surrealista Max Blecher muerto de tuberculosis en plena juventud poco antes de la segunda guerra. El hospital como un presagio del inminente campo de concentración. Para Jude, Blecher es un ejemplo de vitalismo en la agonía.

La mejor ópera prima es para mí también el film argentino más significativo del año:

Juana a los doce (Martín Shanley):

La vida de una preadolescente dentro del ghetto de la colectividad inglesa en un Gran Buenos Aires elegante y anónimo. Rigor extremo en la puesta, pinceladas de british horror y british humor.

Por esta primera vez permítanme excederme con algunas menciones: El invierno, ópera prima argentina de Emiliano Torres. Exil del implacable Rithy Pan. Le noveau de Rudi Rosemberg. Les sauters de Mauritz Siebert, Estephan Wagner y Abou Bakar Sidebé. Ilegítimo de Adrian Sitaru.

Jaime Grijalba · Crítico (El Agente Cine, MUBI) y cineasta /guionista · Chile.

No voy a justificar mis opciones (que son una mezcla de películas vistas en diversos festivales tanto en Chile como en Argentina), así que aprovecharé para agradecer a todas las personas de la cinefilia internacional a lo largo de todo el mundo que me apoyaron en este 2016. Gracias a todos, ellos saben quiénes son.

Paterson (Jim Jarmusch)

Elle (Paul Verhoeven)

The Ornithologist / O Ornitologo (João Pedro Rodrigues)

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

The Alchemist Cookbook (Joel Potrykus) // El limonero real (Gustavo Fontán)

Mejor Ópera Prima:

Short Stay (Ted Fendt)

Ninguna otra película este año se sintió tan incómodamente cercana como esta aproximación cruda al «nunca quedas mal con nadie» y a la sensación que algunos tenemos de que el mundo nos debe algo, cuando en realidad no nos debe nada.

Mejor Película Chilena:

El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva) // El Diablo es magnífico (Nicolás Videla)

Elijo dos películas que representan de mejor forma esas de las que el público fuera del asiduo a festivales no conoce. Si uno pregunta en el mundo sobre películas chilenas les hablarán de los Lelio, los Larraín, los Silva y para la desgracia de algunos, de los López de mi tierra. Estas dos películas muestran las ambiciones más allá de ganar el Oscar a Mejor Película Extranjera. Filmes que experimentan con la identidad y el límite mismo de la ficción.

Alejandro Cozza · Cineasta (El deportivo) y crítico (Diorama, Cinéfilo)

Al revisar mi listado caigo en cuenta que de mis cinco elegidas, cuatro (y puedo sumar tambien a Gilda que quedó como película argentina) tienen una poderosísima impronta femenina, a pesar de no ser dirigidas todas por mujeres. En estas películas se conjugan deseos, injusticias, políticas, sensibilidades que se pueden asociar a una energía femenina. Es más llamativo esto cuando en el medio de mi selección se ubica un film en las antípodas, el de Linklater, que es pura hormona masculina en ebullición en su sentido mas bruto y primal. Sin pretender hacer apologías de género, creo que es una lectura posible de las tensiones del 2016 en el cine.

Elle (Paul Verhoeven)

Certain women (Kelly Reichardt)

Everybody Wants Some! (Richard Linklater)

Sangre de mi sangre (Marco Bellocchio)

Santa Teresa y otras historias (Nelson Carlo De Los Santos Arias)

Bonus: vi este año Heimat, la otra tierra de Edgar Reitz, que si bien tiene un par de años ya (por eso va al bonus); me pareció una obra maestra capital del nuevo milenio y por lejos mi mayor satisfacción cinéfila del año.

Ópera prima:

Le moulin (Huang Ya-li:

¡No se puede creer que sea ópera prima!

Pelicula argentina: Gilda (Lorena Muñoz) y La noche ( Edgardo Castro)

Va doble por representar ambas extremos satisfactorios y muy saludables dentro del cine más popular como el del más radical que se realiza en Argentina.

Fernando Vílchez Rodríguez · Director (Filmadrid Festival Internacional de Cine) · Perú-España

Las nueve películas que menciono a continuación me parecieron distintas, únicas. Algunas de ellas, gloriosas:

Por orden alfabético:

A Lullaby to the Sorrowful Mystery (Lav Diaz)

Beduino ( Júlio Bressane)

Mother (Vlado Skafar)

O Ornitólogo (Joao Pedro Rodrigues)

Vendredi 13 (Nicolas Klotz)

Le fils de Joseph (Eugène Green)

Una ópera prima:

Le Moulin (Huang Ya-li)

Evocadora, imaginativa, precisa.

Un film significativo de tu país:

Al estar mi vida dividida entre Perú y España, elijo dos títulos.

Película peruana:

El brujo (Louidgi Beltrame). La mejor película peruana del año la protagoniza nada más y nada menos que Jean-Pierre Léaud.

Película española:

Amijima (orge Suárez-Quiñones).

Obra terrenal, lírica y emocionalmente arrolladora. Ambos títulos son dos joyas donde la geografía es elemento indispensable para la magia.

Germán Scelso · Cineasta (La sensibilidad) · Argentina

Como me da la gana 2 / This is the Way I Like it 2 (Ignacio Agüero)

El viento sabe que vuelvo a casa / The Wind Knows Im Coming Back Home  (José Luis Torres Leiva )

Oleg, y las raras artes / Oeg, and the rare arts (Andrés Duque)

Las calles / The Streets (Maru Aparicio) –También en ópera prima-

El limonero real / The Real Lemon Tree (Gustavo Fontán) -También mejor película argentina-

Elmar Podlasly, Cineasta · Alemania

Mis favoritas del año:

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

66 Kinos / 66 Cinemas (Philipp Hartmann)

Remake, Remix, Rip-Off (Cem Kaya)

Scarred Hearts / Inimi Cicatrizate (Radu Jude)

The Ornithologist / O Ornitólogo (João Pedro Rodrigues)

Ópera prima: Dark Skull / Viejo Calavera (Kiro Russo)

Mejor película alemana:

66 Kinos / 66 Cinemas (Philipp Hartmann)

Felipe Blanco · Programador (Universidad Católica) y crítico (El Agente, La Fuga)

5 películas estrenadas en salas comerciales y festivales

Dawson City: Frozen Time (Bill Morrison)

La mort de Louis XIV/ La Muerte de Luis XIV (Albert Serra)

Elle/Ella (Paul Verhoeven)

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Sieranevada (Cristi Puiu)

Mejor ópera prima

Rara (Pepa San Martín)

Mejor película chilena

El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

Lucas Asmar Moreno · Crítico (La Voz del Interior y Hoy Día Córdoba) · Argentina.

Por orden alfabético, sin prioridad:

Arrival (Denis Villeneuve)

El director logra que un guión propenso al cancherismo intelectual se convierta en un deleite sensorial. Del terror a la dulzura hay un tránsito imperceptible. Esta es, a mi criterio, la auténtica gramática de la ciencia ficción en el cine.

Los decentes (Lukas Valenta Rinner)

Se combinan con alquimia los elementos que particularmente me excitan en un filme: humor alienado, encuadres con T.O.C., personajes desquiciados, ambigüedad equidistante y un desenlace desaforado. Quiero aclarar que Parabellum me pareció espantosa.

El invierno (Emiliano Torres)

Una ópera prima es apañada por su condición de promesa. Éste no sería el caso: Emiliano Torres posee la madurez formal y la precisión rítmica de un cineasta octogenario. Además, pocas veces se entiende a la geografía como un elemento crucial del conflicto y se la fotografía a consecuencia.

Homeland: Irak Year Zero (Abbas Fahdel)

Su final me afectó de la misma manera que el relato de Podchlebnik en Shoah. Al tomar conciencia de que presenciaba las últimas horas de Haidar, las imágenes crecían en vitalidad, se hacían únicas e irrepetibles. Una sensación de agonía y vastedad que me hizo romper en un llanto histérico.

Sully (Clint Eastwood)

El heroísmo es involuntario; buscarlo sería una canallada. Si bien el Sully de Tom Hanks no se considera un héroe, tampoco permitirá que lo juzguen como negligente. Esto es lo fascinante del relato: redefinir el acto heroico como la decisión más acertada dentro de un contexto hostil.

Mejor ópera prima: 

Solar (Manuel Abramovich)

Abramovich no se limita a filmar la novela familiar del neurótico, también decide formar parte de ella. Entre el objeto documentado y el documentalista hay una fricción que pone al narcisismo como verdadero corazón del relato.

Film significativo de mi país:

Gilda: no me arrepiento de este amor (Lorena Muñoz)

Ubico esta biopic como estreno argentino significativo porque en reiteradas ocasiones me cuestioné si lograría el mismo impacto emocional sin su trasfondo mitológico. Sus logros son incuestionables pero un argentino tiene mayor back-up para validarla.

Cecilia Barrionuevo· Programadora (Mar del Plata International Film Festival) y editora (Las Naves Cine) · Argentina.

Este año mis cinco favoritas son Argentinas. Tomándome algunas libertades, al listado le he agregado algunas sorpresas en pequeño formato, un rescate y un par de bonus:
Favoritas 2016:

* Hermia & Helena (Matías Piñeiro) + Angelus Novus (Pablo Marín, Súper 8)
* El auge del humano / The Human Surge  (Teddy Williams) + Fish Point (Pablo Mazzolo,16mm) + Corumbé (Andrés Denegri, Super 8)
* El futuro perfecto / The Future Perfect (Nele Wohlatz) + SP (Azucena Losana, Súper 8)
* Kékszakállú (Gastón Solnicki) + Rolf Gelewski, spiritual dancer (Claudio Caldini, Súper 8)
* La noche / The Night (Edgardo Castro) + Impregnar (Ernesto Baca, 16mm)

Opera prima:
Short Stay (Ted Fendt, 35mm)

Rescate:
Papá Gringo (Mario Piazza, Súper 8)

Bonus retros:

Beloved and Rejected: Cinema in the Young Federal Republic of Germany (retrospectiva organizada en el Festival de Locarno, curada por Olaf Möller y Roberto Turigliatto)

Pierre León (retrospectiva organizada por el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata)

Lucía Salas · Crítica (Las Pistas, Cinéfilo) y programadora (Cine Migrante 2016) · Argentina.

This is the Way I Like it 2 / Como me da la gana 2 (Ignacio Agüero)

Stand By For The Tape Backup (Ross Sutherland)

Creed (Ryan Coogler)

Correspondencias (Rita Azevedo Gomes)

Le fils du Joseph (Eugène Green)

Ópera prima:

Las calles (María Aparicio)

Una argentina (en Nueva York):

Hermia y Helena (Matías Piñeiro)

Mariano Benito · Cineasta (Historias Clasificadas, Reinas) y crítico (Revista CIC) · Argentina.

Las películas:

Bone Tomahawk (S. Craig Zahler)

Moonlight (Barry Jenkins)

45 años / 45 Years (Andrew Haigh)

Sieranevada (Cristi Puiu)

Aquarius (Kleber Mendonca Filho)

Ópera prima

Soleada (Gabriela Trettel)

Siento que hay que tener coraje para hacer una película de este tipo. Se suele confundir (para mal) a una pequeña historia con una pequeña película. La disfruté mucho y espero la próxima de esta directora.

Cine argentino:

La luz Incidente (Ariel Rotter)

Para mi, palabras mayores del cine. Aunque la vi en el 2015, su estreno comercial fue en el 2016. Creo que como en casi todos los estrenos nacionales, no se superó el millar de espectadores. El cine argentino puede ser que tenga problemas, pero no de las dimensiones del «gran problema» de los argentinos con su cine.

Hernán Rosselli · Cineasta (Mauro) · Argentina

Algo de lo mejor que vi en el año en un orden que varía con el humor y los días.

The Hateful Eight (Quentin Tarantino)

La nieve nunca fue tan blanca ni la sangre tan roja desde McCabe & Mrs. Miller de Robert Altman. Una carreta y una cabaña le bastan a Tarantino como escenario para desplegar su arte dramático, su talento para la puesta en escena y hacer ese cine que cada vez se parece más a una sátira del gran relato americano en su propio jugo.

La mort de Louis XVI (Albert Serra)

Me gusta mucho Crespi, the film not the Village. Pero nunca participé del entusiasmo que despertó Honor de Cavalleria o Le cant do Ocell. Sin embargo, creo que desde Historia de meva mort Serra dejó de ser un simple provocador del circuito de los festivales para convertirse en un cineasta importante. La mort de Louis XVI es un ajustado desglose de claroscuros flamencos, donde el protocolo real impone tiempos y tonos, hasta asfixiar el relato y conducirlo inexorablemente a su final. La cultura que se aferra a un dogma sólo parece reproducir muerte y Serra hace de esa deriva una comedia negra algo desesperante.

Hermia & Helena (Matías Piñeyro)

Tan bella como Viola y Rosalinda, mis preferidas de su filmografía, en Hermia y Helena la distancia de la extranjería parece animar a Piñeyro a buscar otras formas de evitar el costumbrismo y el psicologismo, sin vaciar a los personajes de realismo ni psicología, algo muy difícil de hace y que la película alcanza en varias escenas cerca del final, uno de los más lindos que vi en mucho tiempo.

El futuro Perfecto (Nele Wohlatz)

El único viaje real es el del inmigrante, me apunta acá un amigo que dice Deleuze. Nele Wohlatz construye un relato sensible y transparente que logra abstraerse de su condición documental sin aplastar su personaje.

Rester Vertical (Alain Guiraudie)

Rester Vertical no tiene la perfección estructural de L´Inconnu du lac, pero recupera la deriva de los films anteriores de Guiraudie, donde el extrañamiento y el deseo se abren paso sin distinguir géneros ni estereotipos, y la imaginación y la vida se unen.

Ópera Prima

La noche (Edgardo Castro, 2016)

Todas las porongas parecen venirle bien al personaje que compone Edgardo Castro, mientras se lleva por delante toda la pacatería y el pudor del nuevo cine argentino y haceuna película desaforada y amorosa, donde el desarrollo y la profundidad de las escenas logra sortear el sensacionalismo que apriori puede despertar la  propuesta. El sexo es el teatro de los pobres, decían durante la revolución francesa. A su vez, por una especie de metafísica de los actores La noche resignifica e invita a revisar esa gran película que es Castro de Alejo Moguillansky cuya superficie abstracta sobre espacios del trajinado realismo argentino desconcertó a más de uno.

Fernando E. Juan Lima · Crítico (El Amante, Diario BAE, La Autopista del Sur, Cinema mon amour -Canal A-) · Argentina.

Al momento de revisar los estrenos comerciales acaecidos durante el 2016 en Argentina el listado demuestra algo parecido a lo que sucede con la taquilla: la sensación es peor de lo que la realidad refleja. 2016 no fue un mal año, aun cuando, en lo que tiene que ver con los estrenos, ello se debe en gran medida a películas que arribaron a las pantallas locales con mucho atraso. Sin llegar a los 6 años que pasaron para que pudiera verse en cine Misteries of Lisbon/Mistérios de Lisboa (Raúl Ruiz), que debe estar en lo más alto de cualquier lista, también se estrenaron comercialmente otras películas que ya formaron parte de la selección de precedentes internacionales cinéfilas. Así, Homeland, Iraq Year Zero (Abbas Fahdel), Tangerine (Sean Baker), Mountains May Depart (Jia Zhang-ke), por ejemplo, merecerían formar parte de un posible elenco de seleccionadas. Sin embargo, el acento está puesto en películas que fueron conocidas mayoritariamente a nivel global en este año, para favorecer el diálogo con los listados de los colegas y amigos.

En lo que tiene que ver con el cine nacional, la transición hacia un nuevo plan de fomento y los cambios políticos todavía importan una incógnita. Las señales preocupan en cuanto a la continuidad de cantidad y diversidad de películas, aun cuando este año ello todavía no se evidenció tan claramente en razón de la cantidad de películas sin estrenar que quedaban del período anterior.  Habrá que estar atentos a lo que sucede en Argentina.

Mejores estrenos 2016

The Fixer (Adrian Sitaru)

Elle (Paul Verhoeven)

Rester vertical (Alain Guiraudie)

Le fils de Joseph (Eugene Green)

Homo Sapiens (Nikolaus Geyrhalter)

Mejor opera prima

Juana a los 12 (Martín Shanly):

Pequeña traición a la declaración de principios del inicio, ya que aquí tomo la fecha del estreno comercial en Argentina, oportunidad en la que pude ver este pequeño y hermoso OVNI.

Film significativo argentino

Hija única (Santiago Palavecino)

Santiago Palavecino estrenó comercialmente en 2016 dos largometrajes impares. Algunas chicas llevaba mucho tiempo en espera, pero Hija única sí es de este año. Y es la primera vez que el director conserva plenamente los resortes que hacen al corte final de su obra. Toda ella es interesante y personal, pero su última película destaca por su riesgo y originalidad, tanto temática como formal. El inicio del film y las escenas de sexo nos enfrentan a un realizador que no teme utilizar todas las herramientas que le provee el cine, que no apuesta al minimalismo como refugio ante posibles errores.

Sandro Fiorin · Agente de ventas (FiGa Films · EE.UU-Brasil

Acá están mis películas favoritas de 2016:

Hermia & Helena (Matías Piñeiro)

Jackie (Pablo Larraín)

Moonlight (Berry Jenkins)

Sing Street (John Carney)

Staying Vertical / Rester Vertical (Alain Guiraudie)

Ópera prima:

The Witch (Robert Eggers)

Mejor película de Brasil:

Cinema Novo (Eryk Rocha)

La razón por la que me metí en el cine es el tema de este ensayo documental. Más poesía y libertad. ¡Cine con alma!

Diego Menegazzi · Crítico y programador (Teatro Estudio) · Argentina

Peace For Us In Our Dreams (Sharunas Bartas)

Austerlitz (Sergei Loznitsa)

The Dreamed Ones (Ruth Beckermann)

Sangre de mi sangre (Marco Bellocchio)

Paterson (Jim Jarmusch)

Film argentino

El limonero real (Gustavo Fontán)

Opera Prima

La bruja (Robert Eggers)

Pedro Emilio Segura · Crítico (Diario de Ficunam y Mi cine, tu cine) · México

Me veo en la obligación de tomarme la libertad de crear, más que una lista, un juego de asociación que permite la generación de un diálogo, tanto entre sus discrepancias de los filmes enunciados, como con sus similitudes y que da como resultado, bajo mi perspectiva, un consenso ideológico, temático y formal del cine del presente año y de como este dialoga o lo hará con la Historia y el cine del pasado y el futuro.

Aquarius – (Kléber Mendonça Filho) / Toni Erdmann (Maren Ade)

Austerlitz (Sergei Loznitsa) / Lumieres d’ Ete (Jean Gabriel Periot)

ElDorado XXI (Salomé Lamas) /Ta’ Ang (Wang Bing)

Kékzákallú (Gastón Solnicki) / Svi Severni Gradovi (Dane Komljen)

La mort De Louis XIV (Albert Serra) / Sieranevada (Cristi Puiu)

Eduardo Russo · Crítico (El cine clásico) · Argentina

Por orden alfabético:

Comoara / The Treasure (Cornelio Porumboiu)

Misterios de Lisboa / Mistérios de Lisboa /Lisbon Mysteries (Raúl Ruiz)

Ta’ang (Wang Bing)

Homeland. Iraq Year Zero (Abbas Fahdel)

El limonero real (Gustavo Fontán)

Mi opera prima

Under the Shadow (Babak Anvari)

Mi película argentina

La larga noche de Francisco Sanctis, (Andre Testa y Franciso Márquez)

Sébastián Blayac · Programador (Ficunam) · México-Francia

La única justificación que quisiera escribir es lo siguiente: lista relativa que podría cambiar de un día para otro.

The Death of Louis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

Rester vertical / Staying Vertical (Alain Guiraudie)

American Honey (Andrea Arnold)

Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

The Ornithologist / O ornitólogo (João Pedro Rodrigues)

Jerónimo Rodríguez · Cineasta (El rastreador de estatuas) · Chile-EE.UU.

All the Cities of the North / Svi severni gradovi. (Dane Komljen) Serbia/Bosnia-Herzegovina/Montenegro, 2016. (Opera Prima)

The Dreamer (Nathaniel Dorsky)

The Illinois Parables (Deborah Stratman)

The Wind Knows That I’m Coming Back Home / El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

This Is the Way I Like It 2 / ‘Como me da la gana 2 (Ignacio Agüero)

Mejor restauración vista este año:

From the Notebook of…’. Robert Beavers

Martín Emilio Campos · Cineasta (La victoria), crítico (Cinéfilo) programador (Cineclub Municipal Hugo del Carril) · Argentina.

Por orden de preferencia:

Homeland (Iraq Year Zero) (Abbas Fahdel)

Stand by for Tape Back-up (Ross Sutherland)

La mort de Louis XIV (Albert Serra)

Anti-Porn (Sion Sono)

El viento sabe que llego a casa (José Luis Torres Leiva)

Ópera prima:

Short Stay (Ted Fendt)

Película argentina:

Cump4rsit4 (Raúl Perrone)

Pablo Conde · Crítico (Revista Los Inrockuptibles – Sitio web Encerrados Afuera) y programador (Festival Internacional de Cine de Mar del Plata) · Argentina

Agradezco a la plana mayor del comité organizativo de La Internacional Cinéfila (alias, Roger Koza) por renovar la convocatoria. Es un honor formar parte de esta estimulante experiencia. Lo que sigue es un listado antojadizo que tiene una sola e inexpugnable condición: la necesidad de revisión que los títulos enumerados han provocado en el abajo firmante. Por motivos bien dispares, estas son algunas de las pocas películas que este año despertaron la necesidad del revisionado en el minuto exacto de terminar de verlas por primera vez. En una época en la que la oferta y la obligación superan con creces lo humanamente posible en cuanto a visionado, esa urgencia resulta una razón de peso para destacar, humildemente, a los siguientes largometrajes:

Bone Tomahawk (S. Craig Zahler)

Superando la buena idea de mezclar el western con el slasher, con sus correspondientes trotes y tripas, el debut de Zahler es una contundente muestra del excelente momento por el que está pasando el cine de género. Inteligente, cruda, visceral, Bone Tomahawk es un certero hachazo a la pantalla.

Paterson (Jim Jarmusch)

Una de esas películas en las que uno se podría quedar a vivir. Lo sencillo llevado al extremo. Hay que dejar todo y mudarse a un pueblo como Paterson. Y conocer gente como Paterson, por supuesto.

Moonlight (Barry Jenkin)

Si bien en Medicine for Melancholy, Jenkins demostraba saber lo que hacía, el exponencial crecimiento de sus habilidades narrativas bien valió la espera hasta Moonlight, una experiencia tan dura como sensible. Su humildad, lejana a la grandilocuencia con afán de bajada de línea de productos preseteados con búsquedas similares, hace la diferencia.

The Fits (Anna Rose Holmer)

Toni y los ataques epilépticos que padecen las chicas del equipo de baile moderno –no los aspirantes a boxeadores, como solía ser ella- definen como pocos el debate interno de la adolescencia entre el miedo a crecer y la ansiedad de hacerlo. Probablemente, el mejor coming of age de los últimos años.

The Greasy Strangler (Jim Hosking)

Habría que desarrollar teorías acerca de ciertas películas que prácticamente nacen siendo films de culto, para ser inmortalizadas en esa categoría. O sea, de culto instantáneo, sin la construcción “necesaria” de la audiencia y el paso del tiempo. No cabe duda de que The Greasy Strangler sería parte de ese listado, que posiblemente no sea tan largo. Producto de la unión –carnal, sudorosa, afiebrada- de Napoleon Dynamite y The Toxic Avenger (heredando, respectivamente, ponzoñoso humor y escatológico grafismo), el debut de Hosking será amado u odiado, pero difícilmente olvidado.

Título nacional:

Fuga de la Patagonia (Javier Zevallos, Francisco D`Eufemia)

Otro paso bien firme del cine de género argentino, acá apuntando hacia el cine de aventuras, con el western como norte. Zevallos y D`Eufemia logran una película intensa, muy bien construida, cuya frescura es inusual por estas partes del mundo a la hora de recrear épocas. El resultado final es fuertemente destacable. Y, sí: la aventura es la aventura.

Ópera prima:

My Entire High School Sinking Into the Sea (Dash Shaw)

Autor de El ombligo sin fondo y una buena cantidad de cómics realmente necesarios, Shaw debuta en el largometraje con una animación que parte de la tosquedad visual de los viejos y populares shows de Hanna-Barbera para trasladar a la pantalla grande un universo que ya había construido en el cómic. El resultado es brillante, lo que no resulta ninguna sorpresa, por supuesto.

Carla Maglio · Critica (No viste nada) y programadora (Festival Migrantes) · Argentina

En 2016 vi pocas películas de 2016. Las otras, las que no son de 2016, bastantes más, fueron hechas hace décadas, algunas hace incluso unas cuantas décadas. Que sean menos actuales es, sin embargo, cosa muy distinta. Morgen beginnt das Leben(1933), Razzia in St Pauli (1932), o Schleppzug M 17 (1933), de Werner Hochbaum, Pechos eternos (1955), de Kinuyô Tanaka, Misterios de Lisboa o Out1 -todas películas que vi este año- son de una presencia arrolladora, si se puede hablar así. La historia del cine guarda muchos momentos de esa vitalidad que hace que uno respire más fuerte y más rápido y se quede sin aire temblando en la butaca del cine (o en el sofá de casa). Pero también la historia, y sobre todo la reciente, nos acostumbró a un cine de repetición que garantiza la entrada a algún nicho internacional donde es posible, entonces, la supervivencia. También, a una gratuidad caprichosa, a la identificación de la posibilidad de filmar o de una vaga voluntad de expresión con la necesidad o el auténtico deseo de filmar y de mostrar lo que se filma. Quizá, es por esto que cuando vemos películas vivas -después de tantos años, vivas- como estas, tenemos la impresión de estar ante una especie de tesoro recobrado, algo raro y perdido. La verdad es que las películas no tienen fecha de caducidad, aunque viviendo solos, sólo veamos fechas de caducidad: https://www.youtube.com/watch?v=XSn4NikWEug

En fin, después de todo, una lista es un lugar común (sea lo que sea que se diga con esto) y tiene, por lo tanto, unas reglas. Habituados como estamos, y cada día más, a vivir en la estrechez, hicimos de necesidad, virtud: de la estrechez que imponen el corte temporal y el recorrido acotado de películas, una nueva razón para conversar con los amigos de acá cerca y de más lejos, con los que compartimos muchas tardes y noches de cine este año. Están acá.

Por orden alfabético:

Elle (Paul Verhoeven)

Está aquí contra toda la tentación psicologista o la voluntad sociologizante al mirarla. Abierta al juego, a la gracia, como una confirmación de que todos somos. No somos posibles: Somos.

Sully (Clint Eastwood)

No sé cómo hace Eastwood (aunque algo quizá sepamos) para reunir la indecidibilidad del mundo con la potencia de la decisión que lo ordena, y hacer que esa convivencia en unas imágenes, en unas conversaciones, parezca no simple, pero sí sencilla. Eso y otras cosas. ¡Chapeau!

The Death of Louis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

Serra mismo dijo, si no me equivoco, que lo que le interesaba en la película era la conjugación del poder absoluto con la impotencia absoluta. Aunque parezca muy distinta, encuentro a La mort… más cerca de El cant dels ocells, donde lo que vemos (y nos mira, se me perdone) es no tanto la impotencia como la fragilidad, la aleatoriedad de las cosas y de nosotros mismos. Y la desesperación por encontrar sentido.

The Red Turtle / La tortue rouge (Michaël Dudok de Wit)

Algo que dijo Manuel: “En La tortuga roja hay láminas que podrían ser planos de Bresson, pero ninguna puede ponerse aquí arriba para que lo veáis; por ejemplo esas en las que la madre que parece que duerme pone la palma sobre el dorso de la del hijo que también parece que duerme, y entonces muy rápido (en Bresson habría sido aún más rápido) el hijo escurre su mano bajo la palma de la madre para volver a ponerla encima. Ese movimiento hace tantas cosas como los mejores movimientos de Bresson, hace que a la vez que tenemos conciencia de que el tiempo pasa para el hijo la tengamos de que el tiempo también pasa, pero en sentido contrario, para la madre.” http://eldiabloquizas.blogspot.com.ar/2016/08/solo.html

The Woods Dreams Are Made Of / Le bois dont les rêves sont faits, (Claire Simon)

Imaginen una utopía que se parezca muy poco a las utopías que conocemos: una utopía que no obedezca a un orden imaginario e ideal, expresión de un buen vivir, sino que está a medio terminar, en una semiorganicidad; una utopía que ya existe, pero… No, ni siquiera existe, no sabemos si existe: aparece cuando la voz y la cámara de Claire la tocan. Eso hace la película: toca las cosas, las personas, los árboles, los bichitos diminutos, los perros, nosotros… y los devuelve, nos devuelve, con otra luz, con otro orden, uno que nos acoge a todos.

Ópera prima y film significativo de mi país (los dos son las dos cosas)

Implantation / Implantación (Fermín Eloy Acosta, Sol Bolloqui, Lucía Salas)

La película empieza con unas imágenes que si no son del terror, son de algo que se le va acercando bastante: la dictadura de Lanusse; los funcionarios, militares y burócratas de la época, perorando en el barrio sobre el futuro; las cuadrículas que imaginaron para ordenar racionalmente la actividad de los que van a ocupar el nuevo complejo de monoblocks en Lugano, concebido como un espacio para contener el mundo íntegro de las familias. De todo esto, saldrá victoriosa la vida real y concreta de las personas, que se adueñan de los lugares, que se encuentran y reconocen. Cuarenta años después de aquellos sueños de la razón burocrática, unos chicos de 10 o 12 años se reúnen en los pasillos de un monoblock. Está oscuro, buscan que esté oscuro probablemente, así que se iluminan con una linterna que pasea de unos a otros y ese paseo hace visibles los rostros, también para nosotros. Sentados en el suelo, se ríen, conversan y juegan a recordar, a inventar cuentos entre todos y a contarse cuentos unos a otros; naturalmente, como corresponde, son cuentos de terror.

The Streets / Las calles, María Aparicio (Argentina, 2016)

Distinto que Le bois…, Las calles va a la busca de algo que existe, que se conoce porque hay alguna certeza de que ha ocurrido, algo que tiene ya la consistencia de una historia. ¿Para qué preguntamos? Porque queremos saber qué personas viven acá, de dónde vienen esas personas, pregunta y se responde la profesora de Puerto Pirámides que, con sus alumnos del secundario, sale al encuentro de las voces y los recuerdos de los vecinos de esa comunidad para poner nombres entre todos a las calles del pueblo. Aparicio, que es cordobesa, no filma, sin embargo, su ciudad ni su barrio; necesita, o quiere, que la película dé con algo que, si es cierto que se reconoce como propio, está sin embargo un poco más allá de las certidumbres de todos los días. Las calles es una forma muy bonita de modular la experiencia de eso que, a veces con tantas tensiones, llamamos “amor a la patria”.

Cortos

Absences / Ausencias, Tatiana Huezo (México- El Salvador, 2015)

Casa da Quina / Casa da Quina, Arya Rothe (Portugal, 2015)

L’aquarium et la Nation / L’aquarium et la Nation, Jean-Marie Straub (Suiza-Francia, 2015)

MinorBorder / Minor Border, Lisbeth Kovacic (Austria, 2015)

Leandro Naranjo, cineasta (El último verano) y crítico (Cinéfilo, ¡Cualquiera!) · Argentina. 

No vi Paterson (Jim Jarmusch), Personal Shopper (Olivier Assayas), Certain Women (Kelly Reichardt) ni Le Nouveau (Rudi Rosenberg); 4 firmes candidatas a esta lista.

Por orden alfabético:

El viento sabe que vuelvo a casa (José Luis Torres Leiva)

La larga noche de Francisco Sanctis (Andrea Testa, Francisco Márquez) -Un film significativo de mi país

The Big Short (Adam McKay)

The Witch (Robert Eggers) – Ópera prima

Yourself and Yours (Hong Sang-soo)

Che Sandoval · Cineasta (Soy mucho mejor que vos) · Chile

Toni Erdmann (Mared Ade)

Como me da la gana II (Ignacio Agüero)

Aquarius/ Doña Clara ( Kleber Mendonça Filho)

Busanhaeng/ Train to Busan ( Sang-ho Yeon)

Inmortal ( Homer Etminani)

Ópera prima:

El futuro perfecto/ The Perfect Future (Nehle Wohlatz)

Solo vi 20 minutos en el Bal (BAFICI), pero me es suficiente para elegirla, habiendo ya mencionado Inmortal.

Película chilena:

Como me da la gana II (Ignacio Agüero)

Solo Nacho Agüero supera a Nacho Agüero. Su cine es tan propio que es imposible compararlo con otro director.

Sentimiento encontrado:

Elle ( Paul Verhoeven)

Por momentos pensé que la recordaría toda la vida, pero la película se hace insoportable por esa intención «moderna» de mostrar personajes que soportan todo. Isabelle Huppert impecable, como siempre.
* No vi ni la de Jarmush ni la de Hong Han Soo, que siempre adornan mis listas de fin de año.

Jan Pieter Ekker · Crítico (Filmkrant) · Holanda

Heart of a Dog (Laurie Anderson)

Cementery of Splendour (Apichatpong Weerasethakul)

The Revenant (Alejandro Iñarritu)

La La Land (Damien Chazelle)

Fuocoammare (Gianfranco Rosi)

Mejor ópera prima:

Heart of a Dog (Laurie Anderson)

Película holandesa:

Elle (Verhoeven)

Victor Guimarães · Critico (Cinética) y programador (Cineclube Comum) · Brasil

El auge del humano / The Human Surge (Eduardo Williams)

¿Qué hay de común entre la luminosidad de un crepúsculo y la sensación física de intentar acordarse de algo olvidado? Williams filma la espesura de lo inestable y la materialidad del misterio de lo que aún no es. Para eso, hay que forjar, con las herramientas del cine, otro mundo: anclado en la Tierra, pero sometido a condiciones alienígenas de presión y temperatura.

Elle (Paul Verhoeven)

La pantomima social alcanza la médula del cuerpo. El fingimiento necesario se hizo carne y hueso y ya no hay psicología que aguante. El juego alcanzó las entrañas del drama y no hay puerto seguro para una mirada humanista. Nadie está a salvo (mucho menos el espectador) en el teatro de la perversidad de Verhoeven y Huppert.

Danjiki Geinin / Artist of Fasting (Masao Adachi)

En esta farsa anárquica y polimorfa, todo pasa como si las grandes referencias de la generación de Adachi fueran retomadas por un cineasta que combina la experiencia de un viejo gruñón – inquieto por la mediatización actual – y el impudor de un adolescente, que no le da pelota a las tendencias del cine contemporáneo y por eso puede romper la baraja y rasgar las cartas del buen gusto.

Correspondências / Correspondences (Rita Azevedo Gomes)

Las imágenes sugeridas por la poesía de Jorge de Sena y Sophia de Mello Breyner Andresen como dos afluentes de un río caudaloso, que se entrecruzan para componer un misterio violento y bello. Pocas veces la visita del cine a otra arte (al mismo tiempo vecina y extranjera) fue tan bienvenida.

Na Missão, com Kadu / On the Mission, With Kadu, (Aiano Bemfica, Kadu Freitas e Pedro Maia de Britto)

Los dos planos finales de este cortometraje concentran, con una fuerza dramática incomparable, lo esencial de las energías políticas que componen la silenciosa guerra social en la cual hoy sobrevivimos en Brasil. La inteligencia formal del activista y cineasta Kadu Freitas, el peso de su cuerpo-cámara y la gravedad del duelo por su muerte son acogidas por el montaje – el cine como puro gesto de hospitalidad.

Mejor film brasileño:

Martírio (Vincent Carelli, en colaboración con Ernesto de Carvalho e Tita)

La historicidad de un genocidio en curso encuentra la energía presente de una lucha incansable. El desastre civilizatorio encuentra la resistencia, pero también el cinismo. La pedagogía encuentra la generosidad, pero también el silencio. Vincent y sus colaboradores encuentran a los Guarani-Kaiowá. Martírio prosigue en la búsqueda de su espectador.

Mejor ópera prima:

Ava Yvy Vera (A Terra do Povo do Raio) (Genito Gomes, Valmir Gonçalves Cabreira, Jhon Nara Gomes, Jhonatan Gomes, Edina Ximenez, Dulcídio Gomes, Sarah Brites, Joilson Brites)

En el fuera de campo, todo es desierto: el verdor engañoso de la soja soberana, la frialdad de los matones, nuestro silencio asesino. Adentro, todo es transfiguración: el comentario explicativo deviene digresión memorialista, la caza fracasada se vuelve teatro antinaturalista, la tempestad se convierte en música experimental de la luz. Los Guarani-Kaiowá todavía están vivos y la evidencia más fuerte es su capacidad de seguir inventándose.

Martín Iparraguirre, crítico (La mirada encendida y Hoy Día Córdob,) · Argentina

Cada una de las películas elegidas expresa, de distintas maneras, las posibilidades que el cine contemporáneo ofrece para establecer relaciones reflexivas con el mundo y consigo mismo. En una época de cambios radicales en la naturaleza del séptimo arte y en las formas en que se lo consume, donde el mandato de instantaneidad que rige las relaciones con las imágenes parece obturar cualquier posibilidad de reflexión, estas películas han logrado trascender esos límites y recuperar una idea antológica del cine como un espacio de conocimiento de los otros y de gozo con placeres que sólo se pueden experimentar en una sala oscura. Por orden de importancia, entonces, van las que considero las mejores cinco películas del año:

1- This is the way I like it 2 / Como me da la gana 2 (Ignacio Agüero).

2-Mysteries of Lisbon / Mistérios de Lisboa (Raúl Ruiz) .

3- Sieranevada (Cristi Puiu).

4-John From (João Nicolau).

5-Tangerine (Sean Baker).

Mejor ópera prima:

Stand By For The Tape Backup (Ross Sutherland).

Una película argentina:

Las calles (María Aparicio).

Carlos Enrique Díaz · Crítico (Fotogramaniaco) · Perú

Ante todo, pedirle disculpas a Roger por no contemplar su lista de hasta 7 películas, poniendo finalmente y con mucho sufrimiento en madrugadoras horas, 8 muy recomendables films que pasaron durante este año cinéfilo, más una inolvidable ópera prima en el largometraje. Obras que aún terminado el año calendario, espero den y sigan dando que expresar en los próximos meses. Sin embargo, más allá del auspicio, considero que cada una de estas, para uno, joyas del cine contemporáneo están prestas a ser evaluadas y discutidas en cualquier espacio cinematográfico, dado en algunos casos su corta promoción o desconocimiento de las mismas. Quizás en los 4 años que llevo cumpliendo este grato recuento, esta oportunidad sea la más arriesgada, pues trato en lo posible de salirme del cauce promocional tendenciosamente cannesista para enfocarme a disconformes ofertas paralelas al usual como en la presente nómina. Muchas gracias por convocarme una vez más a esta agradable participación.

Ang Babaeng Humayo / The Woman Who Left (Lav Díaz)

Anuncia mediante el plomo característico del realizador, una declaración continua de esa volcada realidad partida como un latido moral, gerenciado por la sublimidad sirviente sobre alguien o en otro caso, el efecto de una tardía justicia a cobrar.

Cump4rsit4 (Raúl Perrone)

Logrado manejo entre la edición y melodía, esta venerable  de compases inesperados mas no desalineados resulta ser un medido instructivo de la cultura intelectual del prolífico Perrone que ligado a esta parte, puede filmar lo inimaginable sin perder un rasgo de irreverente modernidad.

El viento sabe que vuelvo a casa / The Winds Knows That I’m Coming Back Home (José Luis Torres Leiva)

Único recorrido visual por el Chile profundo, ese que no sale en los panfletos publicitarios de la mano del maestro documentalista Ignacio Agüero, paciente preguntón sobre el día a día paisano en aquellos hermosos y recónditos barajes del que solo se puede admirar.

Epitafio / Epitaph (Yulene Olaizola y Rubén Imaz)

El Popocatépetl cinematográfico, una maravilla visual para los ojos envueltos en esta extremista odisea colonialista que, más allá de los riesgos físicos y mentales de tamaña empresa, provee un inusual expresionismo actoral como naturalista. Si Herzog descendió del Huayna Picchu con su Aguirre, la dupla mexicana encumbra a sus personajes a un hiperbólico sublime fascistoide.

La Tierra aún se mueve / The Land Still Moves (Pablo Chavarría)

Mantiene el registro libertario de su alucinación, equiparando una serie de tanteos ópticos a la materia firme, sea de forma bidimensional o cuasi subliminal, exigencia técnica al dispositivo focalizador a cada turbación visual perseguida.

Le Fils Du Joseph / The Son Of Joseph (Eugène Green)

Este film de Green resulta especial para uno, pues tras un día pesado bonaerense, aparte que es una prueba más del magistral talento del franco americano, no solo me espero hasta llegar tarde a su cita sino que en un momento particular, el mismo Green me calmó.

Nocturama / Nocturama, Paris Is Happening (Bertrand Bonello)

Segmentada en un previo, durante y post ataque, esta artística incitación a una insurgencia mancomunada se solventa en la consecuente repercusión psicológica de sus perpetuadores, que recluidos en un contradictorio bunker, les desatará temores.

O Ornitólogo / The Ornithologist (João Pedro Rodrigues)

En un igual de cautivante total wide , los procedimientos técnicos del film se destacan mediante la textura rugosa del follaje entrelazado con el sobrio color de las piedras, otorgándole un toque clásico que aunado a la risueña conducción del ficcionado conquista la ojeada.

Ópera Prima: 

Orange Confucius (Frank Fu e Yves Gore).

Por fin la cinefilia peruana tuvo ocasión de apreciar un film ovni que exprese a lo largo, la desfachatez sexual sin algún ápice de auto remordimiento moral que la degenere, alejándose de modositas ficciones o tornándose una desgraciada experiencia como es visto en los mediáticos films shocking de estos tiempos.

Jesús Rubio · Crítico (La voz del interior) y programador (Cineclub de la Biblioteca) · Argentina

Estas son las mejores películas de 2016:

1- Fantastic Beasts and Where to Find Them / Animales fantásticos y dónde encontrarlos, (David Yates)

Hay películas que marcan a fuego el corazón de toda una generación de espectadores, como las que integran la saga de Harry Potter. El universo mágico de la obra maestra creada por J.K. Rowling sigue expandiéndose a paso firme. La historia se renueva y el regreso de ese mundo es tan fascinante como cualquiera de las ocho partes anteriores.

2- 10 Cloverfield Lane / Avenida Cloverfield 10, (Dan Trachtenberg )

En la genial y extraordinaria y enorme Avenida Cloverfield 10 está todo: La dimensión desconocida y las series de misterio, las películas de monstruos clase B, las de psicópatas, las de suspenso, los thrillers psicológicos, las teen movies ochentosas, las de superhéroes. Todo lo que amamos está concentrado de manera magistral en esta gema que llegó con poco ruido y muchas nueces.

3- The Shallows / Miedo profundo, Jaume Collet-Serra (EE.UU., 2016)

La película dirigida por Jaume Collet-Serra (responsable de La huérfana y Una noche para sobrevivir, entre otras) es muy buena porque logra que sintamos lo que siente su protagonista, que suframos con ella, que nos comamos las uñas de la desesperación, que vivamos la tensión de la situación, que nos empapemos de su atmósfera.

4- Don’t Breathe / No respires (Fede Álvarez)

Lo más importante en una película es la puesta en escena. Son los planos y los movimientos de cámara los que van a determinar eso que se conoce como atmósfera. Y si se suman situaciones y actuaciones verosímiles, la armonía entre forma y contenido está asegurada. Esto es lo que logra el uruguayo Fede Álvarez en No respires.

5- The Jungle Book / El libro de la selva (Jon Favreau)

En 1942 los hermanos Korda filmaron la primera versión y posteriormente Disney se encargó de reactualizarla en forma de animación (la hizo en 1967, en 1994 y una secuela en 2003). Esta vez la compañía del ratón Mickey vuelve sobre este relato de supervivencia y le da la dirección a Jon Favreau, quien ya demostró capacidad en el manejo del entretenimiento y talento en el género en Iron Man 1 y 2.

Mejor ópera prima:

Hardcore Henry / Hardcore: misión extrema (Ilya Naishuller)

La ópera prima de Ilya Naishuller es una apuesta de puesta en escena. Está filmada con cámara GoPro para que todo se vea en primera persona y el espectador adopte la mirada de Henry, el personaje principal, como si se tratara de un videojuego perteneciente al género POV – FPS (First Person Shooter).

Como no vi todas las películas argentinas de este año, dejo el lugar para la mejor animación estrenada en 2016:

Bakemono no Ko / El niño y la bestia (Mamoru Hosoda)

Dirigida por el aclamado director Mamoru Hosoda (La chica que saltaba a través del tiempo), El niño y la bestia es una película de iniciación, que incluye de manera secreta lo esencial de la filosofía nipona (con la búsqueda interior como brújula que orienta la aventura del personaje principal) y que toca diversos temas, como el de la soledad, el amor, la amistad, el perdón.

Pablo Acosta Larroca · Cineasta y editor cinéfilo (GRUPOKANE) · Argentina.

Elle (Paul Verhoeven)

Yourself and Yours (Sang-soo Hong)

Paterson (Jim Jarmusch)

El abrazo de la serpiente (Ciro Guerra)

Gilda, no me arrepiento de este amor (Lorena Muñoz)

Ópera Prima:

People That Are Not Me (Hadas ben Aroya)

Película Argentina

Los decentes (Lukas Valenta Rinner)

Cortometrajes:

Take me home (Abbas Kiarostami)

El silencio (Mariano Cócolo)

Guillermo Franco · Programador (Cineclub Municipal Hugo del Carril) · Argentina

L’avenir (Mia Hansen-Love)

Misterios de Lisboa / Mysteries of Lisbon (Raúl Ruiz)

Lejos de ella / Mountains May Departes (Jia Zhangke)

El viento sabe que vuelvo a casa / The Wind Knows That I’m Coming Back Home (José Luis Torres Leiva)

Wiener-Dog (Todd Solondz)

Película argentina

La larga noche de Franciso Sanctis / The Long Night of Francisco Sanctics (Francisco Márquez, Andrea Testa)

Ópera prima:

Le noveau (Rudi Rosenberg)

Juan Francisco Gacitúa · Crítico (El amante-Museo del Cine Pablo Ducrós Hicken) · Argentina
1) La larga noche de Francisco Sanctis (Andrea Testa y Francisco Márquez)

2) Hermia & Helena (Matías Piñeiro)

3) Visita ou memórias e confissões (Manoel de Oliveira)

4) Strike a Pose (Ester Gould y Reijer Zwaan)

5) Sin título (Celina Murga y Juan Villegas, para Archivos intervenidos: Cine Escuela)

Denis DeLaRoca · Programador (Cartagena de las Indias International Film Festival y Chicago International Film Festival)

Moonlight (Barry Jenkins)

I Am Not Your Negro (Raoul Peck)

Aquarius (Kléber Mendonça Filho)

Into the Inferno (Werner Herzog)

Tony Erdmann (Maren Ade)

Ópera prima:

La larga noche de Franciso Sanctis / The Long Night of Francisco Sanctics (Francisco Márquez, Andrea Testa)

Mejor película de mi país:

Tempestad (Tatiana Huezo)

Juan Pablo Cinelli · Crítico (Página/12, Tiempo Argentino) · Argentina

45 años (45 Years) (Andrew Haigh)

Creed ( Ryan Coogler)

El botón de nácar / Nostalgia de la luz (Patricio Guzmán)

El limonero real (Gustavo Fontán)

Operación Avalancha / Operation Avalanche (Matt Johnson)

Mejor ópera prima

La noche (Edgardo Castro)

Mejor película de mi país

La luz incidente (Ariel Rotter)

Las películas han sido enlistadas por orden alfabético, sin tener en cuenta criterios de prioridad ni estéticos. No daré ninguna justificación ni razones para haberlas elegido. Tampoco he tenido en cuenta las categorías adicionales de Ópera prima y Mejor película de mí país más que como una excusa para extender a siete la lista de mejores películas del año, ya que las elegidas en ambos casos podrían perfectamente ser parte de las 5 mejores, si no fuera porque la consigna permite elegir sólo 5. Los dos documentales de Patricio Guzmán los he colocado juntos porque así se estrenaron este año en Buenos Aires y porque me resulta imposible elegir a uno por encima del otro. Sepan entonces que he hecho trampa (y más de una vez).

Aprovecho el espacio que me queda para mencionar algunas otras películas que disfruté y me da mucha pena dejar de lado: Zootopia; La bruja (The VVitch), de Robert Eggers; El libro de la selva (The Jungle Book), de Jon Favreau; Dos tipos peligrosos (The Nice Guys), de Shane Black; Los cuerpos dóciles, de Diego Gachassin y Matías Scarvaci; Al final del túnel, de Rodrigo Grande; Deadpool, de Tim Miller.

Ramiro Sonzini · Crítico (Cinéfilo)· Argentina

Con respecto a la lista, quería hacer una aclaración: debo haber visto menos de la mitad de todas las películas de este año que quisiera ver, por lo tanto es una lista muy parcial, que no da cuenta para nada de “lo mejor del año”. Es más bien un puñado de películas que en su conjunto representan gran parte de las distintas formas que el cine adopta y que me parecen valiosas. Algunas recuperan un gesto fundante del cine que para mí es la materialización de una forma (de una mirada) como consecuencia de una imperiosa necesidad de redescubrir el mundo desnaturalizando la mirada que tenemos de él (Paterson / Rester Vertical / Como me da la gana 2) otra es de esas películas casi imposibles, que surgen muy cada tanto y que por su íntima relación con el mundo que retratan y la forma que dialogan con la política de su tiempo pueden llevar el mote de “película importante” con justicia (Homeland: Irak Year Zero); es una película con una voluntad de ir más allá del cine y afectar el mundo, de una grandeza única. Otra es una película que mucha gente diría que no es una película, por lo estructurado de su formato (lo televisivo), pero American Epic Trilogy me llevó a explorar una porción de mundo totalmente desconocida para mí, llena de música y de películas y de personajes extravagantes, esa capacidad de contagiar la sed de conocimiento es algo que le agradezco inmensamente a una película.

Con respecto a la película de Kiro Russo quiero decir que es la película que más me transmitió la sensación de que había detrás un director que buscaba con muchísima fuerza elaborar un mundo propio a través de la puesta en escena.

Con respecto a las argentinas: Piñeiro me parece uno de los cineastas más interesantes del panorama nacional; es probablemente el cineasta que más ha mutado en los últimos 10 años. Siempre está buscando algo nuevo a la vez que mantiene una base constante que se profundiza poco a poco. Es nuestro Hong Sang-Soo. No hay bestias de Agustina San Martín IV es el corto que ganó la competencia de cortos de escuela del pasado festival de Cosquín. Es una de esas pelícuas que te meten de cabeza en un universo hecho de cine, de luces que se mueven y de sonidos que expanden el plano, un película de una sensualidad formal pocas veces vista.

Paterson (Jim Jarmusch)

Homeland: Irak Year Zero (Abbas Fahdel)

American Epic Trilogy (Bernard MacMaho

Como me da la gana 2 (Ignacio Agüero)

Rester Vertical (Alain Giuraudie)

Mejor ópera prima:

Viejo calavera (Kiro Russo)

Película argentina:

Hermia & Helena (Matías Piñeiro) + No hay bestias (Agustina San Martín IV)

Santiago González Cragnolino · Crítico (Cinéfilo) · Argentina

No recuerdo haber vivido un año tan denostado por tanta gente como el 2016. Las redes sociales se convirtieron en una lista de lamentos por los golpes de la vida privada y las terribles noticias que nos trae el panorama político, con la muerte de artistas queridos como los sobreactuados puntos de exclamación que acentúan una suerte de año maldito. Aun comprendiendo lo caprichoso de culpar el recorte arbitrario que supone el año calendario dentro de procesos históricos más amplios, no me quedo afuera de la tendencia: 2016 fue un año de mierda. Mientras escribo estas líneas, leo con profunda tristeza las noticias de los recortes a Ciencia y Técnica y los atropellos constitucionales en Jujuy, las últimas novedades del notable avance que hizo la derecha más reaccionaria de la mano del actual gobierno. Se ha escrito mucho en este espacio sobre como el cine argentino no puede o no quiere hacerse cargo de su tiempo histórico, pero eso es parcialmente cierto. Vuelvo el tiempo atrás unos meses y me encuentro en la Ciudad de Buenos Aires, sentado triste y solo (pero rodeado de gente satisfecha) en una sala del coqueto Barrio Norte, algo así como el marco perfecto para ver una triada de películas que se ajustan perfectamente al régimen estético PRO (muy exitosas, lo que aumenta el desconsuelo). Permitidos (Ariel Winograd), Inseparables (Marcos Carnevale) y El ciudadano ilustre (Cohn-Duprat), sintonizan (y ayudan a dar forma) al espíritu de época. Para peor, las tres hunden sus raíces en males más profundos que los coyunturales: la arbitrariedad festiva y la convicción de que todas las relaciones se miden desde el interés personal en Permitidos, la condescendencia con el Otro, que apenas atenúa el desprecio en el cine zoológico de Carnevale y la idea de que el cinismo y la manipulación son sinónimos de lucidez en la candidata argentina al Oscar.

Muchos críticos vieron en Gilda (Lorena Muñoz) una reivindicación del cine popular. Personalmente veo una película sin inquietudes que excedan lo biográfico y una concepción de cine que se limita a tomar lo convencional e intenta refinarlo en su ejecución. Una película sobre semejante figura, sin apertura, sin puntos oscuros se parece demasiado a una estampita. Una y otra vez en los últimos meses me preguntaba, ¿que tiene para decir la película de Muñoz sobre que el actual presidente desde hace unos años baile esas canciones en sus actos (más notablemente en el balcón de Casa Rosada, durante su asunción)? Es probable que sea una pregunta capciosa, no lo sé.

Si bien he visto buenas películas argentinas de este año, como no encuentro ninguna película que tenga la potencia cinematográfica para ser una respuesta superadora al trío diabólico del mainstream local, dejo el premio vacante.

Vuelvo a mis redes sociales. En el ámbito internacional, el descontento también fue patrimonio de muchos. Esta vez lamentos por Trump, Siria, Turquía, Brexit (y lo que debería ser un casi infinito etc.) Tengo que votar cinco películas. Este año vi varias películas excelentes (¿10, 15, 20?) pero realmente resaltan y me han acompañado notoriamente tres. Lo que tienen en común es que, desde tonos y recursos muy distintos, son lecturas del presente, que toman el malestar y lo convierten en variantes de un cine poético, con voz propia, imaginación y carácter.

Rester Vertical (Alain Guiraudie)

Malgré la nuit (Philippe Grandrieux)

Stand by for Tape Back-up de (Ross Sutherland; que dobla como la mejor ópera prima).

Tres películas que tienen lugar en un contexto desesperanzador y no dan respuestas cándidas ni hacen formulaciones triviales; abren preguntas en formas cinematográficas y amplían la experiencia al situar el lenguaje de los sueños en el tiempo presente. Las tres películas son vulnerables (la oscuridad de Grandieux es más bien desgarradora) pero siempre estoicas. Qué más puedo decir, según una amiga que sabe mucho francés rester vertical significa mantenerse erguido. Un gesto político y un deseo de año nuevo. Felicidades.

Alejandro Ricagno · Crítico · Argentina

Este año, por razones personales, familiares (y también políticas, ya que no me acredité por primera vez  en el  Bafici loperfidiano) vi menos cine del que hubiera debido/querido ver.

De la lista de estrenos en Argentina, vi solo 28; me refugié en ciclos en la vapuleada Sala Lugones en el solitario exilio del CCSAN MARTIN,  y en Filmoteca en vivo.

Mi lista

1) Misterios de Lisboa / Mysteries of Lisbon  (Raul Ruiz)

Tardíamente se estrenó en Buenos Aires.  Después de eso, que no se hable más; todo el cine y la literatura, el melodrama, el juego y la representación y la belleza, y el placer de contar están aquí, en este penúltimo Ruiz que por siempre nos sobrevivirá-.

2) Sangue del mio sangue / Sangrede mi sangre (Marco Bellocchio)

Entre tanto joven o no joven pretendidamente trascendente, Bellocchio ( 77 años) nos regaló a la monja más hermosa  poseída por el deseo y al vampiro poseído por la codicia en una obra  desbordada e hipnóticamente desconcertante. Un más que necesario diablo en el cuerpo cinematográfico en la cada vez más adocenado filmografía italiana. ¡Qué Bellocchio filme hasta la edad de Oliveira!

3) The Hateful Eight / Los 8 más odiados (Quentin Tarantino)

Tarde en verla  y la vi en DVD. Otra pateada de tablero de Quentin, irresponsable, tramposo, ingenioso y todo lo que que quieran. Pero qué placer físico de tanta incorreción política en el corazón del nuevo puritanismo americano (la incorreción solo se admite en las comedias, se sabe), adolescentemente madura pese ( o a causea de) a su amargo, aunque juguetón cinismo. Por eso y por Jenniffer Jason Leigh y Morricone merece celebrarse, aún discutiéndola.

4) 45 years / 45 años (Andrew Haigh)

 Casi un mini Bergman de cámara  en clave british; los  extraordinarios Rampling y Courtney  bajo la distanciada mirada de Haigh  constelan una película de fantasmas que se convierte paulatinamente en un film de género;  del  horror del silencio matrimonial bajo el cadáver de lo no dicho.

5) La loi du marché/ El precio de un hombre ( Stéphane Brizé)

El siempre cumplidor Brizé juega aquá la cuerda del mejor Loach afrancesado (es decir, mucho más sutil) con cierto aire a lo Dardenne para retratar con justeza fílmica  este presente mundial  de humillación y descarte en el mundo de (no) trabajo. Cualquier semejanza con nuestra realidad (la mía incluida) no es casualidad- Irremplazable  Vincent Lindon en otra de sus actuaciones económicamente   descomunales.

6) La luz incidente (Ariel Rotter)

¡Magia!  La mejor película de Rotter y una de las mejores argentinas del año. La sutileza de Rotter  para construir una época  y sobre todo una «época interior» de sus criaturas fijadas a atavismos sociales de la burguesía vernácula de principio de los 60, tiene toda la solidez y la dignidad de un clásico moderno. Y a una Eria Rivas que le daría envidia al mismo Antonioni, cuyo ecos (vía aquel cine argentino de los ‘60), Rotter supo muy bien aprovechar. Sin tradición nada crece.

Opera prima:

La larga noche de Francisco Santis. (Andrea Testa, Francisco Márquez)

Un tour de force para nada forzado en esta adaptación excelente de la novela homónima de Humberro Constantini.  El film retrata como pocas la opresión de la dictadura argentina en el brumoso cotidiano del hombre gris  y el  dilema moral de los que decidieron no saber para sobrevivir y de pronto se ven impelidos a actuar. Todo, sin caer en ningún clisé ochentontoso, el film va dejando el costumbrismo del que parece nacer  para  tornarse una pesadilla  claustrofóbica, como un thriller melviliano. Ética de cada elección estética. Un must; sobre todo ahora que en los medios públicos no se puede decir dictadura-cívica militar, ¿sabían?

El film mas significativo, del que no pude escribir:

Crespo. La continuidad de la memoria  (Eduardo Crespo)

Film sobre el duelo de la muerte del padre del director Eduardo Crespo.

¿Cómo filmar la ausencia y el duelo? ¿Cómo llenar la magen de aquello que debía ser presencia?

Cuando la vi mi padre aún vivía y yo me decía mientras la miraba:»algín día próximo deberé (y no querré) hacer una película así”. No la hice, no filmé, no entrevisté, no fotografié a mi padre vivo; esa película fue una obsesión en mi mente en estos últimos años. Mi padre murió apenas unos meses después, en este país de CEOS y puteando sobre una boleta de expensas. Y ahora soy yo presa de memorias ajenas. My own private Crespo es un sinfín sin continuidad en mi memoria. Saltos de eje del dolor. No sé si volveré a ver Crespo, pero su visón realizó un montaje fulminante en mi propio cine interior, allí donde mi padre construye barcos a escala en mi film imposible mientas le cuenta cosas a mi perro y lee un novela de LeCarré. (¿Algunas vez podré filmar esa ausencia? ¿Cómo se hace?  Bueno, Edu pudo, tal vez algún día. O todo será olvido. Y tutto il mio foglio amore lo soffia il vento.)

Gracias por la invitación , y por un 2017 menos voraz en la muerte, y más digno en el mundo del cine, de la critica y del mundo a secas.

Oron Shamir · Crítico (Srita.net y City Mouse Magazine) · Israel-EE.UU.

  1. Manchester by the Sea (Kenneth Lonergan)

El mejor guión y la más sofisticadas actuaciones del año, y también uno de los films más sinceros que jamás se han hecho sobre la pena.

  1. Arrival (Denis Villeneuve)

La mejor película de ciencia ficción del año, que insta a varias lecturas e interpretaciones.

  1. Neon Demon (Nicholas Winding-Refn)

Una obra de arte glamorosa y viciosa, que no es solo acerca del mercado de la industria de los cuerpos bellos sino también de sus predadores.

  1. Aquarius (Kleber Mendonça Filho)

Un cine astuto y hermoso; una película que trabaja sobre el pasado y el presente, la realidad y los sueños de un modo enteramente original.

  1. Neruda (Pablo Larrain)

Tan ambiciosa como ligera, una apasionante y conmovedora visita a la vida del espíritu. Un cine de contradicciones; poesía en imagen movimiento.

Ópera prima

Mountain (Yaelle Kayam) + Sand Storm (Elite Zexer )

Ha sido un año estupendo para el cine israelí hecho por directoras mujeres y estos son los dos mejores títulos del año.

Una película de Israel:

The Diary of a Wedding Photographer (Nadav Lapid)

En solo 40 minutos, Lapid tiene mucho más para decir sobre el matrimonio y el cine que la mayoría de los largometrajes de 2016

Roger Koza · Crítico (Con los ojos abiertos) y programador (Ficunam-Filmfest Hamburg-FICIC) · Argentina

The Ornithologist / O Ornitólogo, (João Pedro Rodrigues)

The Death of Louis XIV / La mort de Louis XIV (Albert Serra)

Staying vertical/ Rester Vertical (Alain Guiraudie)

Sieranevada (Cristi Puiu)

A Quiet Passion (Terence Davies) / All the Cities of the North / Svi severni gradovi, (Dane Komljen)

 Ópera prima:

Jovens Infelizes ou Um Homem que Grita Não É Um Urso (Thiago B. Mendonça) y Viejo calavera (Kiro Russo)

Película argentina:

Cump4rsita (Raúl Perrone) +La noche (Edgardo Castro) + Kékszakállú (Gastón Solnicki)

Roger Koza / Copyleft 2016