Había visto a Mónica en algunos festivales vernáculos hasta que coincidimos en una ocasión en el intransigente Festival Internacional de Cortometrajes de Belo Horizonte, más conocido como FestCurtasBH en el 2015, si no recuerdo mal. Al conocerla personalmente pude luego relacionar sus textos de Desistfilm con su rostro. A ese festival nos llevó Victor Guimarães, el joven astro de la crítica brasileña, quien sabía muy bien qué estaba haciendo: el entendimiento estético entre nosotros fue inmediato (y, al leer ahora su lista internacional, puedo decir que el tiempo nos sigue manteniendo estéticamente cerca), y los ganadores fueron identificados en pocos segundos. Ya no recuerdo quién fue el otro miembro del jurado, pero sé que sintonizamos con él.

Los textos de Mónica son lacónicos y precisos. No abundan en ditirambos ni tampoco en invectivas. Tienden a desdeñar con lo justo y a vindicar con lo necesario. El equilibrio de su prosa es ostensible: atiende a las elecciones formales sin dejar de aventurar una interpretación; he leído en ocasiones apuestas muy a contramano de sus coetáneos, porque si hay algo que no practica es la corrección y la conveniencia. Que no se entregue al consenso biempensante no significa que demarque sus diferencias apelando a la habitual retórica de los díscolos dispuestos a acentuar en demasía su rol como disidentes y no tanto apoyándose en argumentos con los cuales toma distancia de un coro homogéneo y propone una perspectiva. La discreción es la virtud intelectual de la compañera Mónica, extraña y misteriosa, con la que lleva adelante una agenda que no desestima la confrontación directa y defiende un cine más cerca de los márgenes.

Mónica siempre sonríe, al menos conmigo. Su buen humor es un rasgo, porque también la he visto enfurecida ante el machismo ubicuo de la crítica de su país y entonces no ha economizado en describir la situación como cree que esta amerita. Es que la disputa no le es jamás indiferente. Pueden ser los machos, los dueños de la industria, los señores de la distribución e incluso las comunidades limeñas del cine independiente. Mónica no grita, pero jamás se calla.

Como suele suceder en estos casos, la selección de títulos que corresponde a su país devela el gran desconocimiento que muchos de nosotros tenemos respecto del cine peruano. En mi caso, he visto algunas películas de su lista, conozco otras sin haberlas visto y en algún que otro caso resulta la primera vez que escucho o leo sobre alguna de las películas elegidas por Mónica. De eso se trata, a fin de cuentas: las listas siempre ayudan a atenuar el asedio de nuestra ignorancia y el deseo de superarla a lo largo del tiempo. (Roger Koza)

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Querido Roger:

Alguna vez, Paul Schrader escribió que “es mucho más fácil hacer listas que explicar su porqué”. Quise hacer lo primero, pero terminé haciendo lo segundo, ya que al final de cuentas hacer listas es como un conflicto interior entre la síntesis, la actualización de ciertas cinefilias y la cuestión territorial. Quise pensar menos, así que decidí desestimar los films que me gustan de toda la vida (de Duras, Bresson, Bergman, McCarey, Fassbinder o Erich von Stroheim). Así que estas son dos listas marcadas por el periodo de aislamiento, del hecho de estar en casa y permitirme ver con detenimiento algunos films, o quizás porque los recuerdo con nostalgia de alguna proyección en 16 mm o 35 mm, o simplemente de alguna sala de cine de algún grato festival. 

En torno al canon peruano, elegí algunos films que creo imprescindibles para contextualizar un cine muy heterogéneo, frágil, eternamente joven, pero no porque todos hayan sido como bocanadas de aire fresco en su momento, sino porque es como un cine que siempre está reinventándose una y otra vez, negándose a una tradición, como pequeños inicios permanentes. En esta lista he colocado tanto largos como cortos como para acercarse al cine peruano desde su diversidad.

Lista peruana

Esta pared no es medianera (1952) de Fernando de Szyszlo

Runan caycu (1973) de Nora de Izcue

Niños (1974) del grupo Liberación sin rodeos

Allpa kallpa (1974) de Bernardo Arias

Danzante de tijeras (1974) de Jorge Vignati

Del verbo amar (1985) de Mary Jiménez

Una novia en Nueva York (1988) de Gianfranco Annichini

Juliana (1988) del grupo Chaski

Días de Santiago (2004) de Josué Méndez

Casos complejos (2018) de Omar Forero

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Trilogía La Mar brava (2011-2019) de Bryan Rodríguez

Fragmentos potenciales para desplegar fractal y cíclicamente (2019) de Paola Vela

Lista internacional

Greed (1924) de Erich von Stroheim + La última carcajada (1924) de F. W. Murnau

The Seventh Victim (1943) de Mark Robson + Witch’s Cradle (1944) de Maya Deren

Johnny Guitar (1954) de Nicholas Ray

Trono de sangre (1957)​ de Akira Kurosawa

Wavelength (1967) de Michael Snow

Trás-os-Montes (1976) de António Reis y Margarida Cordeiro

Toute une nuit (1982) de Chantal Akerman

Trop tot, trop tard (1982) de Jean-Marie Straub y Danièle Huillet + Film Socialisme (2010) de Jean-Luc Godard

Close Up (1990) de Abbas Kiarostami

Shakespeare must die (2012)/ Censor must die (2014) de Ing K

Hard to Be a God (2013) de Aleksei German + On the Silver Globe (1987) de Andrzej Zulawski

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*Fotogramas de encabezado: Film Socialisme+Fragmentos potenciales para desplegar fractal y cíclicamente+Esta pared no es medianera+Del verbo amar+The Seventh Victim+Trás-os-Montes .

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Mónica Delgado (Perú): ejerce regularmente la crítica de cine y publica asiduamente en Desistfilm.