CRITICA Y RISA

CRITICA Y RISA

por - Ensayos
22 Oct, 2023 10:15 | Sin comentarios
Puan y Estertor. No son las únicas dos comedias que se podían citar, pero sí son las más directas y precisas. El género más difícil y menos valorado puede ser el más indicado y arriesgado para intervenir en el imaginario reaccionario que vuelve cada tanto y se establece como sentido común.

En los inicios de la década de 1940, Chaplin decide ridiculizar a Hitler y su proyecto de exterminio y conquista. Con su fama a cuestas, sabiéndose el representante universal de los desposeídos, el cómico rivaliza con el dictador. El denuesto alcanza su apoteosis en el instante en que emite sonidos estridentes concentrándose en los gestos del líder de los nazis y su habla jeringonza. Es una teatralidad no exenta de delirio e infantilismo, una forma de la oratoria aún vigente. 

El gran dictador

Entre nosotros no hay un Chaplin, y a quien podría canalizar su temeridad ya ni siquiera se lo ve como antes en la televisión. Se ha conformado con hacer una simpática gira teatral por varias ciudades del país acompañado por una periodista inteligente con quien mantiene una conservación para desplegar su ingenio verbal y sagacidad crítica ante todo. Sin embargo, algunas comedias recientes han recogido tangencialmente el desorden simbólico que caracteriza la vida pública en un país como el nuestro extenuado por su economía desamparada y asimismo saturado por signos que no pueden desembocar en una renovación de la vida democrática.

Puan, la más conocida, cuyo éxito sorprende incluso a sus responsables, arriba inesperadamente en su desenlace a exponer las consecuencias de un prejuicio laboriosamente labrado por intereses de un sector social que suele menospreciar la educación pública. Que María Alché y Benjamín Naishtat hayan imaginado cómo sería la distopía en ciernes del fin de la universidad pública en una comedia que parece estar ceñida al duelo de su personaje principal constituye un giro de lucidez de cómo pueden tejerse temas y subtemas en una película en la que ni siquiera la cita en alemán de un pasaje de la Crítica de la razón pura espanta a sus espectadores. La naturaleza popular de Puan no riñe con el pensamiento crítico. Lo presupone, lo alienta, lo democratiza. 

En el año en curso se estrenó otra película muy poco vista y de la que se no se ha hablado casi nada. Se titula Estertor. También la dirige una pareja: Basovih Marinaro y Sofía Jallinsky. En este film, un equipo de enfermeros cuida a un represor que padece de Alzheimer. Lo siniestro asedia, y en una escena inesperada todo se devela enteramente como un inescrupuloso negocio de un personaje. Pero Estertor es una comedia negra concebida como un laboratorio de una época. Es que todas las escenas plasman una subjetividad disociada de la historia y de cualquier gesto de cuidado del otro. La percepción de sí es que se existe solo. En la inconsistencia de lo que dicen y creen esos personajes radica el humor y el señalamiento crítico, porque la precarización simbólica de toda una generación queda expuesta sin piedad. Misteriosa comedia sobre la degradación es Estertor. A veces la risa está muy cerca del llanto desesperado.

*Publicado en Reviste Cero en el mes de octubre 2023.

Roger Koza / Copyleft 2023