En la era del realismo socialista, un musical oficialista/hedonista. Todo el mundo quiere hacer su Ciudadano Kane. Un cineasta francés es juez, jurado y verdugo.
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LOS PREMIOS: 1950
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LOS OLVIDADOS: ROY WARD BAKER
Conocido sobre todo por los films de terror que dirigiera en la última etapa de su carrera, Roy Ward Baker ha realizado, sin embargo, varios títulos interesantes en otros géneros. -
LOS PREMIOS: 1949
Un Shakespeare recalentado en el microondas de la egolatría. En Europa hacen cine con literatura y cenizas. Los hermanos brasileros hacen del melodrama una balada de tensión racial. -
LOS OLVIDADOS: JACK ARNOLD
Es probable que a Jack Arnold solo se lo recuerde por su obra maestra El hombre increíble, dejando de lado otros notables trabajos en el terreno de la ciencia ficción y títulos de interés dentro del western y el film noir. -
LA CASA DEL CINEASTA: LA LUZ SOBRE LAS COSAS
Empieza con la luz y termina en la sombra, pero sabe que vuelve, en algún momento, la luz. En ese trayecto desfilan fantasmas hermosos: Serton, Nykvist, Groppa, Calvetti y Fontán, el padre. -
LOS OLVIDADOS: CURTIS BERNHARDT
A pesar de su dilatada carrera de cuatro décadas en varios países (Alemania, Francia, Inglaterra y Estados Unidos) y de haber realizado varios títulos de interés, hoy casi nadie se acuerda de Curtis Bernhardt. -
LOS PREMIOS: 1948
El cine soviético filma cuentos de hadas y fantasías de otro tipo. La gran dupla creadora del Cine de Oro mexicano: el dueño del encuadre y el dueño de la luz. Develamos un chiste oculto en la ganadora del Oscar, una de sermones. -
LA CASA DEL CINEASTA: UN CUERPO QUE DICE PROMESAS
En eso que no responde a los caprichos del que dibuja y filma puede aparecer un pájaro o un hombre. En lo real anida lo que luego es obra. ¿Qué ha pasado entre el estímulo y el plano? -
LOS OLVIDADOS: LEWIS ALLEN
A pesar de la reivindicación que le hiciera Martín Scorsese y de haber rodado varias películas interesantes, son muy pocos los que hoy se acuerdan de Lewis Allen. -
LOS PREMIOS: 1947
Un director experimenta la guerra en carne propia y rectifica su mirada. La estética de la revolución ¿será domesticada? Un viaje en auto por el país del horror.
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