CINECLUB CON LOS OJOS ABIERTOS EN LA CUMBRE
PROGRAMACIÓN SEPTIEMBRE-OCTUBRE 2008
EN EL CINE LUIS BERTI, BELGRANO 470
Algunos espectadores que vieron En la ciudad de Sylvia, o Luz silenciosa, durante el mes de junio, dijeron lo mismo: son películas lentas, aunque tal adjetivación no siempre dictaminaba un juicio final y negativo sobre ellas. ¿Qué se quiere decir? La unidad básica del cine es el plano, como podría ser la oración en el lenguaje escrito. Es decir, cuando hay objetos y sujetos dispuestos en un espacio filmado en el cual lo que vemos se mantiene igual hasta que se realiza un corte (y podrá o no volver al mismo espacio u otro espacio pero ya desde otra perspectiva) decimos que es un plano.
En el cine que vemos en las salas comerciales una película consta de 400 a 500 planos. Eso no la convierte ni en mejor, ni en peor. Pero lo que sí importa saber es que esa lógica de compaginación de planos es característica del comercial. En una publicidad, el espectador retiene el nombre del producto y alguna cualidad magistral que amerita su compra. No se puede pensar lo que se está viendo porque lo que importa es seducir al cliente y constituir un deseo por el producto que no se tiene. La velocidad no permite pensar a fondo, la lentitud sí. Y esto se repite en el cine mainstream e incluso en los noticieros, que además musicalizan sus noticias como si quien mira estuviese viendo una película (mala).
En otras palabras: el espectador medio participa de un régimen de la imagen, uno que lo sustrae de sus facultades críticas y que lo subsume en una suerte de observador inmóvil, dispuesto a que no sea él o ella quien se mueva por el plano para pensarlo y experimentarlo sino que los planos en su hiperactividad funcionen como un simulacro de actividad mental, mientras la pereza se naturaliza y se celebra un cautiverio cognitivo.
Alguien podría decir: «Che, después de todo se trata de películas». Sí, se trata del cine, un medio que formatea discretamente nuestra percepción, afectos, conceptos sobre el mundo y que, silenciosamente, nos enseña a desear (sugiero no perderse el film de Zizek, Guía de cine para pervertidos, en donde todo esto queda muy claro). No se debe subestimar el poder del cine. Todavía sigue siendo una práctica colectiva con efectos tangibles. Por eso, ver otro tipo de cine puede resultar un poco exigente, pero quien se anime habrá de constatar tras un tiempo que su mirada no es la misma. Y entonces no será una cuestión de películas, pues el mejor cine es aquel que nos devuelve al mundo con la sospecha de que no todo era como creíamos.
Roger Alan Koza, programador
3 de septiembre, a las 18.15hs: Ciclo de cine mudo
Una mujer de París, de Charles Chaplin, EE.UU., 1924
84 minutos / Apta para todo público (ATP)
A las 20.30hs: Película principal
El taxista ful, de Jo Sol, España, 2005
81 minutos / ATP
Antes de la película principal, en el horario especial de LAS 19.45HS, se proyectará Guía de cine para pervertidos (con Slavoj Zizek), de Sophie Fiennes, Reino Unido, 2006 (PRIMERA PARTE)
10 de septiembre, a las 20.30hs:
Temporada de sequía, de Mahamat-Saleh Haroun, República de Chad, 2006
96 minutos / No recomendada para menores de 13 años
Antes de la película principal, en el horario especial de LAS 19.45HS, se proyectará Guía de cine para pervertidos (con Slavoj Zizek), de Sophie Fiennes, Reino Unido, 2006 (SEGUNDA PARTE)
17 de septiembre, a las 20.30hs: Ciclo Herencia y presencia del Cristianismo
El diablo probablemente, de Robert Bresson, Francia, 1977
95 minutos / No recomendada para menores de 18 años
Antes de la película principal, en el horario especial de LAS 19.45HS, se proyectará Guía de cine para pervertidos (con Slavoj Zizek), de Sophie Fiennes, Reino Unido, 2006 (ÚLTIMA PARTE)
24 de septiembre, a las 20.30hs: Satyajit Ray en foco
La canción del camino, de Satyajit Ray, India, 1955
115 minutos / ATP
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Rouch, un noir, de Isaki Lacuesta y Sergi Dies, España, 2008
1 de octubre, a las 20.30hs:
Chamamé, de Cosima Lange, Alemania, 2007
104 minutos / Apta para todo público
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Última palabra, de Werner Herzog, Alemania, 1968
8 de octubre, a las 20.30hs:
Glue, de Alexis Dos Santos, Argentina-Reino Unido, 2006
110 minutos / No recomendada para menores de 18 años
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Al principio fue el viaje, de Alejandro Vázquez San Miguel, España, 2008
15 de octubre, a las 20.30hs: Ciclo Herencia y presencia del Cristianismo
Palabra y utopía, de Manuel de Oliveira, Portugal, 2000
130 minutos / ATP
Antes de la película principal, en el horario especial de LAS 19.45HS, se proyectará el mediometraje El home cinema de los hermanos Dardenne, de Jean-Pierre Limosin, Francia, 2006
22 de octubre, a las 20.30hs: Ciclo Brasil, una nación poderosa
Tierra en trance, de Glauber Rocha, Brasil, 1967
106 minutos / No recomendada para menores de 13 años
Antes de la película principal, en el horario especial de LAS 19.45HS, se proyectará el mediometraje Shohei Imamura, el librepensador, de Paulo Rocha, Francia-Portugal, 1995
29 de octubre, a las 20.30hs: Satyajit Ray en foco
El invencible, de Satyajit Ray, India, 1956
113 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal, en el horario especial de LAS 19.45HS, se proyectará el mediometraje Un día en la vida de Andrei Arsénevich, de Chris Marker, Francia, 2000 (Chris Marker en foco)
Fotos: 1) fotograma de Guía de cine para pervertidos; Glauber Rocha, director de Tierra en trance.
Sabes que varias veces te escuche decir: «es un galimatias pensar que el cine puede cambiar el mundo», y sin embargo ahora leo este escrito tuyo y me parece encontrar una paradoja respecto de la mentada afirmacion. Si como aclaras, el cine es «un medio que formatea discretamente nuestra percepción, afectos, conceptos sobre el mundo y que, silenciosamente, nos enseña a desear» entonces me parece vislumbrar en este medio un dispositivo maravilloso de alteracion, trasformacion de nuestra subjetividad en esos niveles, es decir fisico, intelectual, emocional y espiritual, y si acordamos que el mundo esta hecho de personas entonces me parece que el galimatias seria pensar que el cine no puede cambiar el mundo, claro, no como totalidad, sino esas pequeñas parcelas humanas que mutan merced a sus efectos. Pero por caso quien puede cambiar el mundo como totalidad, sino es que sea accionado una bomba atomica que nos esfume del planeta?
ME ALEGRO MUCHISIMO ESTA NUEVA, O QUIZA SIMPLEMENTE EXPLICITA SIGNIFICACION HUMANISTA DEL CINE.
Muchas gracias por escribir, Amante regular. RK