CINEFILIA ONLINE (02): TRES PELÍCULAS NOTABLES
Por Roger Koza
Como era de esperar, más allá de ciertas polémicas en torno a ella, la única película diferente de la cartelera, La vida de Adèle, duró una semana. Las películas de verano, algunas buenas, otras berretas, provienen todas del mismo lugar: Hollywood. Si no están los cineclubes, los cinéfilos pueden recurrir a la red.
Comunidad Zoom (ver aquí) es un sitio de visita obligatoria. El catálogo disponible revela cinefilia de pura cepa. Hay cine clásico, moderno y contemporáneo, y la mayoría de los casos todo se puede ver de forma gratuita. La taxonomía que organiza las secciones son pertinentes. Y hay joyas de todos los tiempos, una de ellas, Andrei Rublev (1966), de Andrei Tarkovski.
En una vieja entrevista en Positif, Tarkovski decía a propósito de su segundo largometraje y sin duda su primera obra maestra: «El primer y posiblemente último film que explora la cultura histórica del Cristianismo sin apelar a un contenido reaccionario, sino más bien acentuando su profunda e íntima grandeza y rectitud». En efecto, este estudio indirecto sobre la vida y la obra del pintor y monje ruso del siglo XV, Andrei Rublev, famoso por sus pinturas de la catedral de Vladimir y del monasterio Santísima Trinidad, quizás no ahonda en demasía en las técnicas del artista pero sí concibe el porqué de su obra y la fuente de la misma.
Tarkovski contextualiza magistralmente la vida del monje: invasiones tártaras en el territorio ruso, disputas teológicas no desprovistas de efectos prácticos, brujería, paganismo, es decir, un mundo convulsionado, quizás no muy lejano de la Rusia del tiempo del cineasta, y que llevó al monje a una crisis de fe, un escepticismo radical sobre la vida en la tierra que se tradujo en tomar un voto de silencio. La película, dividida en capítulos, culmina con la construcción de una campana, obra dirigida por un adolescente cuya tenacidad (y secreto) remite a la misma experiencia de fe, y que habrá de tener consecuencias salvíficas en la vida de Rublev y un efecto preciso en sus pinturas.
Cuesta elegir una escena a señalar, porque Tarkovski acumula pasajes extraordinarios de principio a fin. La apertura es una invitación literal a un vuelo, de esos que se tienen en los sueños. Las panorámicas de una iglesia y una batalla, o las de un ritual pagano, son admirables, pero es en el último capítulo donde los planos secuencia panorámicos adquieren una perfección visual indescriptible, hasta que aparece el color y quienes miran sobrevuelan una de las obras de Rublev. Si existe la perfección, ese desenlace es su mejor traducción cinematográfica. (Se puede ver aquí)
El canal de Youtube de Cinenacional ha subido El amigo (1960), el extraordinario cortometraje de Leonardo Favio. Notable aproximación a la infancia y a la experiencia de ésta determinada por la clase social a la que se pertenece. Un niño trabaja como lustrabotas. Mientras hace su trabajo siente la tentación de quedarse con el autito del hijo de un cliente. Elipsis mediante, los niños han intercambiado de rol, ahora son amigos y disfrutan una jornada entera en un parque de diversiones. Los inconfundibles travellings de Favio son de una precisión admirable y su capacidad para extraer de sus personajes la experiencia de la desposesión es inigualable. Película que anuncia la estética de Crónica de un niño solo, película en la que ya se adivina a un verdadero maestro del cine de todos los tiempos. (Se puede ver aquí)
Obreras saliendo de la fábrica (2005) es la ópera prima del realizador chileno José Luis Torres Leiva. Como lo fue el film de título casi homónimo de los hermanos Lumière, esta apropiación contemporánea es también un cortometraje, aunque más extenso. 16 planos secuencia (per)siguen el trabajo y la salida de cuatro obreras de una fábrica. Torres Leiva recorre el espacio laboral, y no solamente permite entender el tiempo y el lugar del trabajo, sino también el sonido de esa labor: las máquinas suenan y tiene efectos en el organismo de las trabajadores. Torres Leiva consagrará los últimos minutos al ocio de los trabajadores, un derecho sin imágenes. Una salida al mar es aquí un viaje al paraíso. Los contrastes hablan, a tal punto que una de las protagonistas hasta llega a recordar su infancia, estadio en el que el trabajo todavía no define quiénes somos. (Se puede ver aquí)
Roger Koza /Copyleft 2014
Una de las grandes paradojas del cine independiente, es que muchas veces resulta muy innovador a la hora de crear pero sumamente conservador al momento de distribuir y exhibir su producción. La obsesión por llegar a las salas tradicionales le esta impidiendo ver alternativas que la tecnología pone a su disposición.
una característica importante en materia cinematográfica, para los que habitamos en Argentina, es la disponibilidad cada vez mayor de películas proyectadas por Internet, lo que se conoce como VOD (Video On Demand). Esto se acrecentó ante la quiebra a fines del 2010 de la famosa cadena de alquiler y venta de videos Blockbuster, que arrastró en su caída a muchos videoclubs más chicos. El fenómeno del VOD merece una atención especial, porque es una de las pocas vías alternativas que tienen el cine independiente del mundo entero, para acceder a un público más numeroso. Si bien la tecnología está disponible desde hace varios años, la infraestructura de las conexiones de nuestro país no acompañaba de modo adecuado este fenómeno.
Críticos como Diego Batlle en su sitio “Otros cines” escribió:
“El consumo de películas en Internet sigue creciendo de forma vertiginosa. En principio, la revolución digital generó como tendencia principal la descarga o la visión on-line de copias truchas y, en muchos casos, de baja resolución. El material pirata sigue siendo una alternativa elegida por muchos, pero en los últimos meses se ha desatado también una fuerte competencia entre varias compañías locales y extranjeras para lograr que, mediante el pago de un abono mensual o de un monto por film, el público pueda apreciar sus títulos favoritos en las mejores condiciones técnicas (calidad HD) y, a su vez, los productores y artistas reciban una retribución por ceder sus trabajos.
Dentro de esta movida del Video On Demand (VOD), que incluye el reciente desembarco del gigante Netflix y de varios operadores locales, así como las distintas ofertas por parte de las telefónicas o las propias señales de cable, se destacan algunas experiencias destinadas a los cinéfilos más exigentes, que no buscan tanques de Hollywood sino películas de autor, clásicos y rarezas de los más variados orígenes y estéticas. “ (ver la nota completa en: http://www.otroscines.com/cine_tv.php?idnota=5956 )
Sitios como MUBI.COM en acuerdo con los organizadores del Festival 4+1, pusieron a disposición de los cinéfilos una gran parte de las películas proyectadas en dicho festival a un precio accesible (U$S 1 o U$S 2 por película). Incluso, sin ser un experto en software de edición de video, podían bajarse a la PC y verlas en otro medio, momento o lugar. El sitio argentino COMUNIDADZOOM.COM organizó una especie de festival virtual al que llamó Festival Global, donde se “proyectaron” películas argentinas de gran calidad por un abono de solo $12. Pudieron verse películas como Vikingo, La peli de Batato, Los labios o Hacerme feriante, por poner un ejemplo. Estaba autorizada, incluso, la bajada del material y en el balance se muestran cifras espectaculares de visitantes, que resultarían difíciles de igualar para cualquier cine club orientado al cine independiente. Los organizadores nos cuentan:
“Desde las 24:00 horas del jueves 24 (es decir, la hora 0 del viernes 25) de noviembre de 2011 hasta las 24 horas del domingo 4 de diciembre, se llevó a cabo en nuestro sitio la primera edición del Festival de Cine Global, una experiencia que marcó un hito en la manera de ver y difundir cine.
Durante los 10 días de duración se pudieron ver películas que aún no se habían estrenado comercialmente en las salas tradicionales junto a otras que pasaron por circuitos alternativos o independientes o que no fueron tan conocidas pese a contar con atractivos ingredientes para el público.
Cada 2 horas estuvieron disponibles 2 de los 30 largometrajes en competencia, por un lapso de tiempo de 2 horas. A partir de ese momento, las 2 películas fueron reemplazadas por otras 2, como si de funciones de una sala de cine se tratara, pero con la ventaja de no necesitar llegar exactamente a un horario puntual de comienzo, pues se tuvo la posibilidad de comenzar a ver la película en cualquier momento de las 2 horas en las que estuvo programada.
Por otra parte, todas las películas de las secciones paralelas no competitivas, estuvieron disponibles las 24 horas del día.
ALGUNOS DATOS QUE ARROJÓ ESTE PRIMER FESTIVAL DE CINE GLOBAL:
47.000 personas circularon por nuestro sitio durante los 10 días de duración del festival.
Hubieron 120 películas participantes entre las secciones en competencia y las secciones paralelas.
Se contabilizaron 1500 votos del público.
Otorgamos 500 becas gratuitas.
Atendimos unas 800 consultas.”
En conclusión. Es hora de empezar a prestar mayor atención a este canal de difusión, como un medio alternativo genuino para que el cine independiente del mundo entero, pueda encontrar su público.
Rubliov: extraordinaria, única. El episodio de la campana: el final más emocionante de la historia del cine (creo que si Nietzsche la hubiera visto, capaz se volvía creyente).
El amigo: gran anticipo de lo que vendría.
Roger: «la única película diferente de la cartelera, La vida de Adèle, duró una semana». Sé perfectamente que escribís esta nota desde la perspectiva de la cartelera cordobesa. Dejame agregar algo dirigido a los lectores porteños: MUSEUM HOURS.
Oscar: el hipotético visionado de FN me resulta apropiado. Mi hipótesis es que solamente en el cine se puede ser creyente. ¡Grande Favio!.
Me gusta mucho Museum Hours. Haré mi campaña por el film si llega a Córdoba. Que se haya estrenado es casi un milagro.
Saludos. RK
La sequía de films que propongan algo que se parezca a se aproxime al cine es contundente. Uno pasa por las salas y todo parece cortado por la misma tijera. También habría que decir que Febrero se ha convertido en algo así como el mes de la cartelera mas oscarizada u ozcarizable que muchos interpretan como la gran oportunidad para ir al cine y así no quedar fuera de sintonía para la gran celebración de cada año.
La obra de Tarkovsky está disponible en DVD que en mi caso sigue siendo un formato que compensa en cierto modo la ausencia de películas que justifiquen el pago de una entrada.