CRÍTICAS BREVES (47): CAMILLE CLAUDEL 1915

CRÍTICAS BREVES (47): CAMILLE CLAUDEL 1915

por - Críticas, Críticas breves
15 Ene, 2014 03:46 | comentarios

**** Obra maestra ***Hay que verla  **Válida de ver  * Tiene un rasgo redimible ° Sin valor

berlinalecamilleCamille Claudel 1915, de Bruno Dumont, Francia, 2013 (***)

Por Roger Koza

Un trabajo notable, probablemente el mejor de Juliette Binoche, aquí como la artista Camille Claudel, internada en el asilo de Montdevergues, no muy lejos de Aviñón, varios años después de su ruptura con el famoso pintor Rodin, aunque para ella la actualidad de su relación amorosa contradice la objetividad del paso del tiempo. Como indica el título, el film transcurre en 1915; el tiempo del relato se limita a unos días. La vida de Camille al lado de pacientes psiquiátricos de todo tipo se redobla en la puesta en escena: los intérpretes secundarios son efectivamente personas que padecen alguna enfermedad mental, lo que implica un impacto directo sobre la propia Binoche como intérprete. En la mirada de Dumont, por otra parte, la cotidianidad de una vida signada por el encierro involuntario no dista mucho de la de aquellos que han elegido una reclusión religiosa (en cierta medida, Dumont, un director materialista obsesionado por el fenómeno religioso, sugiere que la religión es una forma de locura diferida). El clímax del film se construye en torno a la demorada visita de Paul, hermano de Camille, un católico devoto cuya fragilidad psíquica no parece estar muy lejos de la de su hermana. Si bien la experiencia espacial del encierro no es menor en la concepción de puesta en escena, el tema del film es discretamente la experiencia del tiempo: para Camille, la espera por la visita de su hermano trastoca la repetición de su rutina diaria. El plano final, antes que nos enteremos que Camille vivió 29 años más en ese asilo (hasta su muerte, a los 78 años), transmite magistralmente la locura como una experiencia de sustracción del propio tiempo, una forma de negación radical de cualquier principio de deseo.

Roger Koza / Copyleft 2014