CUARTA MUESTRA DE CINE INDEPENDIENTE 2008
Sostener una muestra de estas características no es una tarea fácil. Hay que buscar películas, verlas, pensarlas, escribir sobre ellas, incluso, en muchos casos subtitularlas previo a realizar una traducción, e intentar luego hallar cierta coherencia respecto del conjunto de películas elegidas que permita explicitar una noción de cine, un concepto de él, al menos para distinguir la imagen cinematográfica de la imposición del audiovisual.
Entiendo por imágenes un tipo de registro que nos devuelve algo del mundo, algo que precisamente no se pueda ver de otro modo y que el cine muchas veces puede darle visibilidad. Dicho de otro modo: una imagen ofrece alteridad, aquello que no es igual a uno, una dimensión de la vida, una evidencia que el mundo es múltiple y habla de muchas maneras. El cine es ese viaje sin movilidad por modos de vidas, concepciones cosmológicas, nociones de justicia, amor, insurrección, invención que de pronto se materializan en una película. Lo audiovisual, en este sentido, es exactamente lo opuesto: un estimulo óptico, algo que simula ser una imagen pero no devuelve absolutamente nada del mundo, excepto una voluntad de transformar todo registro de lo real en mercancía. Que el cine es un vehículo ideológico no es un descubrimiento.
Nuestra cuarta muestra intenta alcanzar al espectador esas imágenes robadas que no llegan nunca por vías normales a nuestro cine y tampoco a los videoclubes. Quien siga la totalidad de la programación habrá de constituir una cartografía de qué ocurre en el mundo. De pronto, lo que acontece en Bamako no es distinto a lo que ocurre en Buenos Aires. De pronto el dolor de un trabajador iraní está muy cerca de las adversidades que pueda vivir un espectador serrano. Sí, se trata también de dar cuenta de las diferencias, de efectivamente reconocer que hay otras culturas y clases sociales, y que el cine que solemos ver le da la espalda.
Hay películas para todos los gustos, pero todas, sin excepción, pueden expandir el gusto. Una muestra, un festival de cine amateur, si se quiere, debe impugnar la norma del gusto, pues el gusto suele ser producto del control de un mercado que selecciona lo que podemos ver y lo que no podemos acceder. Algunas películas, como el excepcional cortometraje La casa está oscura, de Farrokhzad, de no verse aquí difícilmente se lo pueda ver en algún otro lado. Es uno de los filmes más conmovedores que he visto en toda mi vida.
Hay películas de Kiarostami, Herzog, Depardon, Potter (no Harry, Sally), Godard, Bresson. Hay dos directores en foco: el gran autor independiente Phillipe Garrel y el surrealista Svankmajer; el primero con tres largometrajes y el segundo con una variedad de cortos. En definitiva: hay cine, mucho cine, películas destinadas, como decía Gutiérrez Alea (de quien pasamos su primer film), a un espectador activo, alguien que sabe que con sus ojos asume un proceso de comprensión crítica de la realidad.
Bienvenidos.
Roger Alan Koza, programador.
PRIMERA SEMANA
MARTES 8
21.30hs: Película de apertura
Diez canoas, de Rolf de Heer, Australia, 2006.
92 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal habrá un breve concierto de música australiana aborigen, a cargo de Damián Wunheiler. Luego se proyectará el cortometraje Ejemplo de Airón (13′), de Lluis Galter, España 2007.
Una de las películas más fascinantes de los últimos años y sin duda un ejercicio hermenéutico excepcional en donde un director «Balanda» (el hombre blanco) intenta aproximarse sin la imposición de su cosmovisión a una cultura ancestral para realizar un film comunitario. Como advierte el gran actor aborigen, David Gupilil, el cuentista en off de este mítico e inteligente relato, previo a ironizar respecto de la celebrada inscripción narrativa de la trilogía de La guerra de las galaxias, «es una gran historia, aunque no es la de ustedes». Y en efecto, el universo de los Yolngu, sus prácticas, sus costumbres, sus creencias, constituyen un contexto formidable para ser abordado en el cine, y aunque se trate de un verdadero Otro cultural no deja de confrontar con aquellos rasgos más universales de los hombres. Que este gran cuento esté centrado en el deseo amoroso de un joven por una de las tres mujeres de su hermano mayor es una excusa. La anécdota es la introducción a todo un mundo. Si hay un tema ubicuo en el film es del misterio de la vida y la muerte, pues del relato cosmogónico inicial, Diez canoas concluye con una ceremonia sepulcral, más parecida a un trance visual que a una escena lúgubre, en el que se explicita una tesis metafísica: la unión entre los individuos y un magma existencial, el charco inicial como se llama aquí, destino de todo ser viviente particular una vez concluida su vida. Los planos generales ofrecen una composición de lugar. La dialéctica entre los planos fijos y en blanco y negro respecto de los planos secuencias móviles y un vivaz color, sirven para dinamizar y separar dos relatos yuxtapuestos, aunque en un tiempo muy lejano, incluso mítico. Es un viaje a la Era del sueño, pero también un ejemplo excelso de narración, uno que bien puede definir una de las características singulares de nuestra especie: su voluntad de narrar. (Roger Koza, programador).
00.15hs: Rarezas de medianoche
Promesas del Este, de David Cronenberg, Canadá, 2007.
90 minutos / No recomendada para menores de 18 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje En el suicidio del último judío del mundo en el último cine del mundo (3′), David Cronenberg, Canadá, 2007.
En un reciente libro publicado llamado David Cronenberg, ¿Autor o Cineasta?, ensayo que intenta establecer una cierta continuidad entre la literatura y el cine, se sostiene que el autor de Spider problematiza la normalidad como categoría filosófica. En efecto, Cronenberg viene explorando el delirio, el devenir demente de nuestras sociedades revestidos por ritos disímiles que sostienen el orden simbólico bajo la creencia rídicula pero operativa que se vive una vida normal. Aquí todo empieza con un bebé y una prostituta de 14 años que al dar a luz muere. La enfermera que asiste el parto encuentra un diario. A veces se escucha fragmentos del mismo. Luego tanto la víctima como la enfermera están vinculados con la organización vory v zakone, una comunidad mafiosa rusa no exenta de misticismo, difuso si se quiere pero constatable. La identidad de los miembros, la biografía de éstos se escribe en el cuerpo. El tatuaje es un código secreto, una escritura esencial que explica una vida. Promesas del Este es un film que parece lineal y sencillo, pero que una mirada atenta habrá de hallar en su composición una compleja red semántica en la que se entreve una riqueza conceptual admirable. El erotismo atraviesa la totalidad de la trama, y ello implica aquí una homosexualidad dispersa. Hay un pasaje en donde el sexo y la violencia de Una historia violenta se reúnen en un solo momento. Son 5 minutos de cine que le llevaron a Cronenberg 3 días de trabajo. Son 5 minutos magistrales. (RK)
MIERCOLES 9
18.00hs: El ojo lúcido (Documentales)
10ª Sala -instantes de audiencia-, de Raymond Depardon, Francia, 2004.
103 minutos / Apta para todo público.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Cine al aire libre (3′), de Raymond Depardon, Francia, 2007.
Este austero pero brillante y contundente documental de Depardon fue una de las grandes películas que el 2004 compitiera en Cannes y pasara desapercibida. Desprovista de música, con 4 o 5 posiciones de cámaras, tomas siempre fijas, Depardon registra instantes de un conjunto de audiencias de la sala 10 de un tribunal cualquiera de París. Los encuadres son justos, como las imágenes, y sirven al objetivo central: observar cómo se constituye el discurso jurídico y los efectos de éste en los sujetos: fiscales, acusados, juez y público. Los casos son menores: insultos, alcoholismo, posesión ilegal de armas o de sustancias prohibidas, etc. Lo interesante y revelador es ver cómo los sujetos siguen reglas de comportamientos y asumen roles específicos, siendo ellos parte de un evento que desenmascara paulatinamente el orden simbólico que los legitima. De allí, que en el dramatismo de las víctimas y sus verdugos destelle un rasgo humorístico, porque detrás de las convenciones hay cierta dosis de ridiculez y patetismo. En esta gran comedia humana, no desprovista de dolor, injusticia y a veces de compasión, la verdad y sus formas jurídicas son el ejemplo de otro orden del discurso, uno que evidencia, naturalmente, poder. Por eso recién en el epílogo, un sociólogo acusado habrá de cuestionar este orden, momento en el que la incomodidad es otro modo de señalar la contingencia y nada inocentes regla de juego. (RK)
20.00hs: Clásicos para un canon
Historias de la revolución, de Tomás Gutiérrez Alea, Cuba, 1980.
93 Minutos / No recomendada para menores de 13 años
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje La muerte de Stalin en Bohemia (14m), de Jan Svankmajer, República Checa, 1990.
De las pocas películas cubanas que se estrenan en Argentina, la única que provocó un éxito de taquilla fue Fresa y chocolate, una película también realizada por Gutiérrez Alea, más conocido como Titón, acaso el director de ficciones más destacado de dicha cinematografía. Historia de la revolución no sólo es su primer largometraje, sino que también es la primera película estrenada y producida por el ICAIC. Se trata de un film divido en tres partes (El herido, Rebeldes y La batalla de Santa Clara) en el que se intenta reconstruir distintos puntos de vista de los acontecimientos revolucionarios que doblegaron la dictadura de Batista. Clásico y ligeramente panfletario, la preocupación que atraviesa los tres relatos es de índole moral, o cómo la acción política implica una deliberación moral. Puede ser albergar a un herido rebelde mientras que la policía lo busca; puede ser abandonar a un compañero revolucionario malherido o quedarse con él, sin medir las consecuencias posibles para un grupo de revolucionarios; puede ser constatar que la revolución tiene alcances indeseables, como cuando un gran amor pierde su vida en la lucha y ello contradice la alegría de una victoria. Pero esta meditación moral viene acompañada de ciertas elecciones formales en las que se puede divisar la maestría de Titón, pues su talento para filmar grupos humanos en movimiento, combates, ciudades es evidente en cada secuencia. (RK)
22.00hs: Horizontes contemporáneos
Si, de Sally Potter, Reino Unido, 2004.
100 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Viajé 9.000 kilómetros para dártelo (3′), de Wong Kar Wai, Hong Kong, 2007.
Este melodrama poético y político sobre el vínculo amoroso adúltero entre una científica irlandesa estadounidense y un chef libanés en un Londres multicultural post 11/9 posee mucha más musicalidad y vitalidad que aquel malogrado film que transcurría gran parte en Buenos Aires, La lección de Tango, de la misma realizadora. Escrita casi en su totalidad bajo la métrica del pentámetro yámbico, Sí, dedicada al ensayista y novelista John Berger, es una película que afirma el acto de existir sin apelar a creencia trascendental alguna, siendo el lenguaje no sólo un vehículo de seducción sino el límite de cualquier identidad cultural. En efecto, pocas películas se atreven a mostrar un romance como síntoma del cuerpo político de Occidente, pues de esta húmeda y apasionada relación se predica una discreta lectura utópica sobre el devenir histórico contemporáneo. Formalmente prodigiosa, Si es una de esas películas que demuestra cuán poco se explora sobre el lenguaje cinematográfico, y aunque por momentos puede ser excesiva su voluntad formal, nunca deja de ser atractiva. Lo que nunca está de más son las intervenciones de un sirviente mirando a cámara, cuyo discurso cómico y filosófico organiza ideológicamente la totalidad de la trama. (RK)
00.15: Horizontes contemporáneos
La llave Nelson, de Ryan Fleco y Ann Boden, EE.UU., 2006.
102 minutos / No recomendada para menores de 18 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Dimensiones del diálogo (12m), de Jan Svankmajer, República Checa, 1982.
Una conquista apasionada y compasiva sobre un retrato de una vida, este debut de los guionistas Ryan Fleco y Ann Boden se centra sobre tres personajes complejos: un profesor de historia secundaria, radicalizado políticamente (Ryan Gosling), devoto de su trabajo pero también adicto al crack, un temeraria estudiante de 13 años (Shareeka Epps) que le cuenta a su profesor un secreto y conforma un lazo afectivo con él, y un dealer local (Anthony Mackie) que empleó al hermano de la estudiante antes de ir a la cárcel y ahora pretende cuidarla. Bellamente interpretada y reveladora en sus acertijos morales, todas las historias de estos personajes son impredecibles. El personaje interpretado por Gosling es el protagonista más creíble de todas las películas estadounidenses que he visto durante el año; acaso inmaduro y desordenado, pero carismático, multifacético y sincero, del tipo que no podemos eludir sin eludir alguna parte de nosotros mismos. (Jonathan Rosenbaum, Chicago Reader)
JUEVES 10
19.00hs: Garrel en foco
El nacimiento del amor, de Phillip Garrel, Francia, 1993.
90 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el mediometraje Phillip Garrel, un artista (48′), de Francois Etchegaray, Francia, 1998.
Una investigación sobre el amor, la vida familiar y la amistad protagonizada por Lou Castel, Jean Pierre-Leaud y Johanna Ter Steege, esta película autobiográfica en blanco y negro es una de las primeras películas vistas aquí, del muy influyente Phillipe Garrel, aunque previo a este título había realizado docenas de películas, algunas experimentales, todas muy personales (un hijo espiritual de Jean Luc Godard, cómodo con las texturas y climas del cine mudo, y también padre espiritual de Leos Carax). Relativamente indiferente a la prolijidad narrativa canónica, esta película gira en torno a las emociones de un actor profesional (Castel) que sufre una especie de crisis de los 40 y periódicamente se separa de su mujer, su hijo adolescente y una hija menor para tener relaciones amorosas con mujeres más jóvenes. La belleza y la fuerza del film descansa casi por completo en la poética de sus imágenes y sus ritmos, y en sus poderosos pasajes emocionales más que en su fluidez narrativa. Su admirable fotografía está en manos de Raoul Coutard, quien rodó la mayoría de las primeras películas de Godard. (JR)
22.00hs: Horizontes contemporáneos
Miércoles 25, a las 20.30hs:
Viernes a la noche, de Claire Denis, Francia, 2003.
90 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectarán los cortometrajes Cine erótico (3′), de Roman Polanski, Polonia-Francia, 2007., y El departamento (13′), de Jan Svankmajer, República Checa, 1968.
Los primeros 40 minutos de película pueden ser entendidos como un concierto de música concreta de la ciudad de París. El conjunto de la trama puede ser vista como un bello e inquietante sueño. Y en la obra de Claire Denis, la gran poetisa del cine materialista, Viernes a la noche es una pausa conceptual respecto de su especialidad temática, los efectos del colonialismo en la vida europea (y personal), aunque su otra obsesión, el cuerpo como superficie de deseo (del otro), sí está presente aquí. En efecto, un embotellamiento espantoso que tiene paralizado a París es el contexto en el que una mujer a punto de mudarse con su prometido viva una experiencia amorosa con un extraño que recoge en la calle, sugestionada por un llamado solidario transmitido por la radio. Atmosférica y elegante, Denis filma los autos como si fueran extensiones del cuerpo humano, cápsulas de velocidad que al no poder circular se convierten en accesorios inútiles. Es una metáfora del progreso. Pero el auto es también el lugar del viaje y del encuentro, acaso una extraña intersección entre lo público y lo privado. Y es en ese artefacto propio de la Modernidad en el que Denis motoriza una meditación sobre el choque de los cuerpos, o cómo es posible que dos cuerpos se atraigan y se entrelacen. (RK)
00.15hs: Horizontes contemporáneos
Palindromes, de Todd Solondz, EE.UU., 2004.
100 minutos / No recomendada para menores de 18 años
Antes de la película principal se proyectarán el cortometraje Una semana tranquila en la casa (19′), de Jan Svankmajer, República Checa, 1969.
El provocador profesional del indie estadounidense es capaz de enfurecer a gente de izquierdas como de derechas, a progresistas como a conservadores, a abortistas y a sus oponentes. Una película que hace una traducción literal del término pedofilia como amor a los niños no posee límites. Pero Solondz no es un irresponsable; más bien es un pesimista visceral, y por eso que en el desprecio de todas las falsedades sociales encuentra alivio y honestidad; hay algo de moralista después de todo. Aviva, adolescente, queda embarazada y sus padres sugieren el aborto. En cierto momento, Aviva escapa de su casa y peregrina por los pueblos más reaccionarios de los Estados Unidos. De pronto llega a una comunidad religiosa que la adopta como a una de sus hijas. No es una comunidad perfecta, y como es predecible tiene sus secretos. Humorística e irritante, Solondz retrata la soledad infinita de sus personajes, también la estupidez y la crueldad. Estados Unidos está poblado por ignorantes. Como recientemente Haynes ha hecho con Bob Dylan, el personaje de Aviva es interpretado por varias actrices de distintas edades y colores, como si Aviva fuera un sujeto colectivo que expresa una mentalidad y un tipo de angustia. Finalmente, Solondz parece concluir con un frío determinismo: nada cambia, todo permanece igual, los genes dictaminan todo. Sea o no la respuesta de Solondz consistente, su diagnóstico desalmado tiene la virtud más excelsa del pesimista: su voluntad de no engañarse, y, por lo tanto, señalar en dónde están las mentiras que convienen a todos. (RK)
SEGUNDA SEMANA
MARTES 15
18.00hs: Clásicos para un canon
Pickpocket, de Robert Bresson, Francia, 1959.
73 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje La casa de la princesa eléctrica (3′), de Hou Hsiao Hsien, Taiwán, 2007.
«No comprender a Bresson es no entender el cine; es haber perdido aquel tren que los hermanos Lumiére filmaron llegando a la estación de Lyon hace unos 110 años atrás». Así presentaba el crítico Jim Hoberman una reposición de Pickpocket y Mouchette en octubre del 2005 en Nueva York. Definitivamente, Bresson es puro lenguaje cinematográfico, un realizador único en la historia del cine. De los 13 largometrajes realizados en 40 años de carrera, Pickpocket es una de sus películas más accesibles y de mayor belleza. ¿Un thriller? Posiblemente no, a pesar de que el protagonista es un carterista introvertido que terminará en la cárcel. Como siempre el catolicismo del realizador ordena simbólicamente su relato, aunque el objeto de compasión y redención sea aquí un sujeto marginal de dudosa moral. Deleuze alguna vez sugirió que Bresson era el autor que había descubierto lo táctil en el cine. Pickpocket es la consumación de esa extraña aunque irrefutable tesis. (RK)
20.00hs: Horizontes contemporáneos
Buenas días, noche, de Marco Bellocchio, Italia, 2003.
105 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Es un sueño (3′), de Tsai Ming Liang, Taiwán, 2007.
El lúcido director de La sonrisa de mi madre suspende su anticlericalismo cómico para explorar audazmente las contradicciones de la izquierda radical italiana de la década del ’70. El caso en cuestión: el secuestro y el posterior asesinato del primer ministro y líder del partido Demócrata Cristiano Aldo Moro, por parte de las Brigadas Rojas en 1978. Onírico y político, Bellocchio retrata una época, y elige el vínculo de la única mujer del grupo con el prestigioso mandatario para exigir coherencia en la militancia, sin eludir el interés legítimo de querer comprender la extraña fascinación experimentada frecuentemente entre secuestradores y rehenes. Absorbente, estimulante, Buenas días, noche es otra prueba de la estatura del realizador que en Italia, junto a Nanni Moretti, cree todavía en un cine capaz de movilizar el instinto utópico. (RK)
22.00hs: Horizontes contemporáneos
Klimt, de Raoul Ruiz, Francia, 2006.
93 minutos / No recomendada para menores de 16 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje El regalo (3′), de Raoul Ruiz, Francia, 2007.
Raoul Ruiz, acaso uno de los grandes maestros desconocidos del cine contemporáneo nació en Chile y trabaja hace décadas en Francia, confirma con este biopic onírico y alegórico sobre Gustav Klimt su inacabable creatividad. Difuso aunque preciso Klimt es en sí una pintura en movimiento sobre algunos episodios personales y sociales que han atravesado la obra de un pintor único, orgullo de los austriacos. No se trata de mostrar la psicología del artista y su historia, sino más bien recolectar como en un sueño qué fuerzas simbólicas determinaron una obra. En efecto, el Klimt de Malokovich, cuyo parecido físico no deja de sorprender, está en una clínica a punto de morir de sífilis. Es 1918. En su desvarío quizás recuerda: la exposición mundial, la secesión vienesa, sus encuentros con Méliès, sus amigos filósofos y críticos, además de todas las mujeres que amo e inspiró su obra, en especial Lea De Castro. Pero lo que es fascinante es el intento de Ruiz en asimilar la obra del pintor, siendo la forma el modo de reproducir la identidad de un artista. Así, el color dorado prevalece, y a menudo las imágenes se doblan como en un cuadro del vienés. Aunque ello no impide que la impronta de Ruiz esté presente: planos secuencias extensos y circulares, un trabajo sutil sobre el sonido, y una elección narrativa cuyo modelo pertenece a la lógica de los sueños. (RK)
00.00hs: Horizontes contemporáneos
Factotum, de Bent Hamer, EE.UU.-Suecia, 2005.
94 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Super dong (4′), de Yue Weng, Singapur, 2007.
Este nuevo acercamiento a la obra y vida de Bukowski es mucho más interesante que algunos esfuerzos precedentes, pues evita el cliché del escritor oscuro y destructivo, y concede mayor protagonismo a la propia historia de cómo se llega ser un hombre de letras. La escritura aquí no está divorciada del trabajo manual, y tampoco es dicho oficio el privilegio de una clase social determinada. Matt Dillon es Henry Chinaski alias Bukowski, y su trabajo excepcional probablemente esté más a tono con la personalidad del escritor que, por ejemplo, el Bukowski de Mickey Rourke. Factotum es el (auto)retrato de un artista cuyo humor e ironía no se traducen en cinismo, y es esa la gran sorpresa de esta comedia ligeramente sórdida dirigida por un realizador sueco sobre un escritor mítico de la cultura popular estadounidense. (RK)
MIERCOLES 16
17.50hs: Clásicos para un canon
Primer plano, de Abbas Kiarostami, Irán, 1990.
94 minutos / Apta para todo público.
Antes de la película principal se proyectarán los cortometrajes La casa está oscura (24′), de Forough Farrokhzad, Irán, 1962., seguido por ¿Dónde está mi Romeo? (3′), de Abbas Kiarostami, Irán, 2007., y El día de estreno de Primer plano (7′), de Nani Moretti, Italia, 1996.
Si se trata de magia del cine no hay película más perfecta que Primer plano. Allí un pobre tipo llamado Hossein Sabzian, un trabajador desocupado (y cinéfilo) decide, repentinamente, convertirse en Moshen Makhmalbaf, el otro gran cineasta de Irán. Mientras viaja en colectivo una mujer lo confunde con el realizador de Kandahar. En su desesperanza, Sabzian intuye que vivir la vida de otro puede ser, al menos por un tiempo, un modo de conjurar su amargura. La conversación con la mujer termina en un agasajo en su casa. Sus hijos y su esposo lo reciben como un artista consagrado. De pronto, los invita a participar de su próxima película. Y así empiezan a ensayar escenas posibles de un supuesto film. Tras un tiempo la familia sospecha de él. ¿Es Makhmalbaf? Sabzain acaba procesado, hasta que la justicia iraní lo absuelve. Así las cosas, la trama puede resultar interesante, pero en verdad es fantástica, mágica, pues toda la película está basada en un caso real. En efecto, cuando Kiarostami decidió hacer este film el proceso judicial todavía se estaba llevando a cabo, de tal modo que llegó a registrar situaciones de una emotividad poco frecuente. Pero más desconcertante aún es saber que no sólo Sabzian se interpreta a sí mismo, sino que todos los actores del film son los mismos involucrados en el caso: la propia familia en cuestión y hasta el verdadero Makhmalbaf, cuya aparición en la película trastoca el límite en donde la pantalla es el linde entre el mundo y el cine. (RK)
20.00hs: Planos y pentagramas
Chamamé, de Cosima Lange, Alemania, 2007.
104 minutos / Apta para todo público.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje La fundición (3′), de Aki Kaurismäki
Chamamé es un film con un objetivo preciso: entender qué es el chamamé. La realizadora alemana Cosima Lange recorrió principalmente Santa Fe, Corrientes, Entre Ríos y Misiones. Le llevo su tiempo hasta que pudo encontrar a sus 4 personajes principales, quienes representan aristas muy diversas de este género musical. Entre ellos está el sobresaliente Chango Spasiuk, cuyas apariciones elevan musicalmente la película. Esencialmente popular, Chamamé hace un uso formidable de los planos panorámicos, que explicitan una intuición omnipresente en todo su metraje: existe una secreta comunión entre paisaje, contexto social y expresión músical. En ese sentido, el film evita en todo momento la construcción de planos bajo la lógica publicitaria. Nada de turismo, algo de antropología cultural, y mucha curiosidad y placer por una música desconocida para la realizadora, incluso para los propios argentinos, más identificados por el tango que por este género musical que no se circunscribe a los porteños. (RK)
22.00hs: Película principal
El bigote, de Emmanuel Carrère, Francia, 2005.
85 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Encuentro exclusivo (3′), de Manoel de Oliveira, Portugal-Francia, 2007.
La opera prima del novelista Emmanuel Carrère se centra en la vida de un arquitecto, interpretado por el excelente Vincent Lindon. Un día el protagonista reside rasurar su bigote tras 10 años de conformar parte de su rostro. El problema es que ni su mujer, ni sus amigos, ni sus compañeros de trabajo perciben el sutil aunque esencial cambio. Tal desconocimiento implica la total desestabilización psíquica del arquitecto que termina huyendo a Hong Kong. Una comedia lúcida y muy fina sobre la identidad y el modo en el que uno se percibe a sí mismo, aunque también un retrato indirecto de la alienación cotidiana. (RK)
00.15hs: Planos y pentagramas
Nomadaax, de Raúl de la Fuente, España, 2006.
91 minutos / Apta para todo público.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Un buen día (3′), de Takeshi Kitano, Japón, 2007., y Un juego con piedras (9′), de Jan Svankmajer, República Checa, 1965.
Energética y utópica, la película de Raúl de la Fuente sigue la travesía planetaria y multicultural de dos músicos españoles, intérpretes del ancestral instrumento vasco txalapara, cuya característica singular es que se interpreta de a dos personas. La intuición es que el lenguaje musical es más efectivo para la comunicación y la comprensión de las diferencias culturales que cualquier otro sistema de signos. Así viajan por Laponia, India, Mongolia, Marruecos, etc., y en todos los lugares comprueban su corazonada, aunque en ese periplo sonoro y nomadismo metodológico también se constata la relación de la música con los paisajes, los climas, los sistemas de creencias, y cómo la música es un puente visceral, un fondo rítmico y melódico, capaz de constituir espacios simbólicos comunes. La ejecución del txalaparta es increíble, no menos su fabricación, y más todavía cuando se construye uno con hielo. Pocas películas transmiten tanto entusiasmo y pasión por una actividad determinada. El montaje final del film es un llamado a que el cuerpo de espectador esté en movimiento. El sonido, dicen estos músicos, surge del movimiento. Su película lo confirma. (RK)
JUEVES 17
19.00hs: Garrel en foco
El viento de la noche, de Phillip Garrel, Francia, 1999.
92 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará una conferencia de Phillip Garrel sobre su film Los amantes regulares y el cine (47′).
Extraña película de Phillip Garrel, en colores, cinemascope y con una estrella como Catherine Deneuve, pero una ostensible película personal, como todas las de su filmografía, pues sus obsesiones personales e históricas están presentes, diluidas en la trama de este road movie generacional en el que una vez más se intenta esclarecer la memoria histórica desde una mirada subjetiva e íntima. Si el mayo francés habrá de ser reconstruido en su totalidad en Los amantes regulares, una indiscutible obra maestra, sin dudas El viento de la noche funciona como una preparación y un anuncio de que este hijo de aquella generación es un testigo clave de la última revolución europea con fines emancipatorios. Aquí el encuentro azaroso entre un joven escultor y un hombre del mayo francés que trabaja en proyectos de arquitectura, sumado a la amante del primero, que sin dudas pertenece a la generación del segundo, sirve para comprender las distancias, a veces inconmensurables, entre una generación politizada y otra «privatizada». Lo único en común es el presente, uno que no tiene telos, un mero devenir sin expectativas. Melancólica y austeramente nihilista, El viento de la noche es también una lección de cine: la composición de los planos, los encuadres y el juego entre luz y contraluz, son objetivamente magistrales. (RK)
22.00hs: Horizontes contemporáneos
Bamako, de Abderrahmane Sissako, Mali, 2006
115 minutos / Apta para todo público
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje de Guerra en paz (3′), de Wim Wenders, Alemania, 2007.
Después de su debut en la competencia de Una Cierta Mirada del festival de Cannes, en el 2006, la última y magistral película de Sissako sobre un juicio imaginario al FMI y al Banco Mundial respecto de sus intervenciones en África (e indirectamente Latinoamérica), no ha dejado de exhibirse en diversos festivales y recibir elogios en donde sea que se muestre. Como en La vida en la tierra, Bamako, también nombre de la ciudad en la que transcurre la audiencia, Sissako permite entender la particular dinámica de la vida cotidiana de la capital de Mali, en un contrapunto preciso con los discursos de los jueces, fiscales y los representantes del pueblo que acusan a las dos organizaciones más odiadas en el Tercer Mundo. En verdad es un juicio sobre la injusticia capitalista globalizada, pero también localizada en un contexto cultural específico, aunque sin duda el caso es una extensión histórica de las múltiples empresas colonialistas características del viejo mundo. Lúcido y conmovedor, y también cómico (como lo sugiere magistralmente el pasaje en el que algunos personajes ven un Western humorístico, interpretado por el director palestino Suleiman y el actor Danny Gloover, que sintetiza la impunidad de cómo intervienen las grandes potencias en los conflictos políticos del mundo) Bamako es una película que si hubiese sido estrenada en el 2002 habría sido un éxito de taquilla nacional. Sin embargo, la actualidad de su crítica y su legítima rabia son inobjetables, y como decía Pino Solanas, tras verla en el último BAFICI: «¡Qué riguroso!». Sin duda, Bamako, es una de las grandes películas de esta temporada. (RK)
00.15: Rarezas de medianoche
La felicidad de los Katakuris, de Takashi Miike, Japón, 2001.
113 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Un picnic con Weissmann (13′), de Jan Svankmajer, República Checa, 1969.
Entre las siete películas que Takashi Miike realizó durante el 2001 se encuentra esta comedia musical, entre experimental y kitsch, capaz de combinar en un par de secuencias elementos de La novicia rebelde, el video Thriller de Michael Jackson (cuando todavía era un ser humano) y un estilo surrealista de animación cercano al realizador checo Jan Svankmajer. Una primera mirada puede dar la impresión de que se trata de un conglomerado de escenas delirantes que vertebran la historia de una familia tradicional, trasladada recientemente al campo, en búsqueda de felicidad mientras llevan adelante una hostería. Pocos son los huéspedes, aunque cada uno de ellos representa un determinado perfil psicológico propio de una sociedad específica, ligados por un destino común: la muerte. Pero una mirada más atenta revela que detrás de este festivo e ilimitado irracionalismo de superficie hay una meditación filosófica sobre la soledad individual y la contingencia de nuestra especie. Darwiniana de principio a fin, Miike experimenta con el lenguaje cinematográfico plano tras plano, y ello puede desconcertar, incluso emocionalmente. Una muerte puede provocar un número musical y de un instante de plena alegría colectiva se predica a veces los pasajes más melancólicos y cósmicos. El epílogo, en ese sentido, es un buen ejemplo. Ligeramente basada en un filme coreano, La familia tranquila, de Ji Woon Kim, la traducción por parte de Miike de aquella película a su singular mundo confirma que su talento está por encima de las películas de yakuzas clase b y su gusto por la violencia extrema. (RK)
TERCERA SEMANA
MARTES 23
18.00hs: Clásicos para un canon
Wittgenstein, de Derek Jarman, Reino Unido, 1993.
69 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el mediometraje Elegía de un viaje (47′), de Alexander Sokurov, Rusia, 2001.
La última película de gran realizador inglés Derek Jarman antes de que falleciera por una enfermedad terminal es una concisa pieza de cámara, por momentos perfecta y siempre apasionante, en la que se intenta contar la vida y explorar la filosofía de unos de los grandes pensadores del siglo XX: Ludwig Wittgenstein. La empresa no es sencilla, más cuando el filósofo en cuestión ha dado a luz dos sistemas filosóficos antitéticos (el primero, notablemente, concebido en las trincheras de la primera guerra mundial; el segundo, tras experimentar diversas crisis existenciales, muchos años después). La inteligencia de Jarman y del crítico literario Terry Eagleton quien escribió el guión del film, es ofrecer un retrato de la vida del filósofo y sus meditaciones filosóficas sin promulgar un orden de continuidad aunque sí de intensidad. La puesta en escena se sostiene en un depurado expresionismo, que puede parecer teatral y afectado, pero que funciona muy bien para hacer verdaderamente accesible los dos sistemas filosóficos de Wittgenstein. Extrañamente conmovedor y estimulante, no hay en Wittgenstein ningún pasaje de más ni de menos; como los libros del filósofo, la inteligencia gobierna y la curiosidad es la regla. (RK)
20.00hs: El ojo lúcido (Documentales)
Apuntes de Frank Gehry, de Sydney Pollack, EE.UU., 2006.
83 minutos / Apta para todo público
Antes de la película principal se proyectará Contraplano (16′), de Eduardo Chapero Jackson, España, 2005.
Este documental de Sydney Pollack sobre el arquitecto Frank Gehry, poco tiene que ver con el cine de ficción del realizador. Casi nada emparenta Africa mía y La intérprete con estos Apuntes de Frank Gehry, excepto una necesidad por parte de Pollack de saberse parte de un sistema sin querer dejar por ello el deseo de ser personal. Situación de la que no es ajena Gehry, este heterodoxo e intuitivo arquitecto, más cerca de Le Corbusier y Lloyd Wright que de Guadi, que también suele trabajar por pedido o condicionado por el deseo de un cliente. La amistad del cineasta y el arquitecto se pone de manifiesto en el transcurso de la película, cuyo objetivo es no solo entender la gramática esencial de la creatividad, sino también concebir el espacio mismo como una superficie potencialmente artística. Algunas construcciones son admirables, aunque en algunas ocasiones, por ejemplo en el caso del museo Guggenheim de Bilbao, es ostensible la discontinuidad radical del edificio con la tradición arquitectónica de esa ciudad, a pesar de la positiva afluencia de turismo concomitante a la construcción del museo. De lo que se predica una meditación sobre cómo se construye en donde se habita. (RK)
22.00hs: Horizontes contemporáneos
Presidente Mitterrand, de Robert Guédiguian, Francia, 2005.
113 minutos / Apta para todo público.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Oscuridad (3′), de Jean-Pierre y Luc Dardenne, Bélgica, 2007.
Guédiguian deja por una vez Marsella y su clase trabajadora para ofrecer un retrato sobre los últimos días del presidente Mitterrand y su relación con su biógrafo. «Anote, anótelo todo y dígales que no soy el diablo», le dice el mandatario socialista (1981-1995, fallecido en 1996) a quien está a cargo de publicar sus memorias. Si Mitterrand como socialista paradójicamente nunca dejó de defender y perpetuar el orden burgués, Guédiguian elige problematizar el contexto de su pretérita resistencia al régimen de Vichy durante la ocupación alemana en la Segunda Guerra Mundial. Lo que queda claro en Presidente Mitterrand es el estatuto intelectual del personaje, cuya erudición está al servicio de una concepción estética de la intimidad. Finalmente, Guédiguian repite la sabiduría de El ciudadano a la hora de develar el secreto de una vida: aquí está prohibido pasar; la belleza del último plano de la película bien remite en su espíritu al inicio de la opera prima de Welles. (RK)
00.30hs: Rarezas de medianoche
Batalla en el cielo, de Carlos Reygadas, México, 2004.
94 minutos / No recomendada para menores de 18 años.
Antes de la película principal se proyectarán los cortometrajes Double ticket Artaud (3′), de Atom Egoyan, Canadá, 2007., y Comida (17′), de Jan Svankmajer, República Checa, 1992.
La película del mejicano Carlos Reygadas abrió el penúltimo festival de Cannes, y desde ya fue un escándalo: sexo, paganismo, cristianismo, rencor de clase, todo ello concatenado en un film en donde el chofer casado de un general mantiene un secreto amor por la hija de su patrón, quien a su vez se prostituye por diversión. Así descrito puede parecer un banal melodrama, pero Reygadas es un realizador prodigioso, y transforma este material en un ensayo poético y filosófico sobre las pulsiones del cuerpo y la codificación del mismo en la tradición cristiana. Los planos secuencias y el trabajo sobre la banda de sonido confirman la idoneidad y el rigor del director de Japón, cuyo cine todavía está en un período de evolución. (RK)
ESTA PELÍCULA TIENE ESCENAS QUE PUEDEN DAÑAR LA SENSEBILIDAD DEL ESPECTADOR
MIERCOLES 24
18.00hs: Clásicos para un canon
Lemmy contra Alphaville, de Jean Luc Godard, Francia, 1965.
95 Minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Yo te saludo Sarajevo (2′), Francia, 1993.
Las calles poco adornadas de Paris se convierten en Alpha 60, capital del Dolor, en esta película de ciencia ficción punzante y nublosa de 1965. Es la película más política de Godard antes de completa radicalización, y probablemente su film más angustiante. El territorio que recorre el agente especial Lemmy Caution (Eddie Constantine, la estrella de cine clase B) es inexorablemente estéril y opresivo, un desierto de cajas arquitectónicas de vidrio e infinito corredores blancos. La perspectiva sobre la tecnología como algo inherentemente malvado es quizás demasiado simple para la mente paradójica y delicada de Godard, y a veces el film no ofrece una crítica contundente. Sin embargo, la película es un ejemplo sobresaliente del poder del realizador para transformar, a través de una elección de ciertos detalles, un medio ambiente: todo es familiar, pero nada es reconocible. (Dave Kehr, Chicago Reader)
20.00hs: El ojo lúcido (Documentales)
La rueda del tiempo, de Werner Herzog, Alemania, 2003.
80 minutos / Apta para todo público
Antes de la película principal se proyectará el mediometraje Hércules (11′), de Werner Herzog, Alemania, 1962.
Este documental sorprendente sobre una fiesta y rito de iniciación budista, el Kalacakra, no parece ser un tópico ortodoxo para el heterodoxo Werner Herzog, pero una mirada atenta podrá constatar que el realizador de Aguirre, la ira de Dios, ha estado siempre interesado en los fenómenos extremos, siendo la religión experimentada como un paso más allá de la existencia ordinaria una variante del catálogo de sus intereses. Aquí se puede ver desde devotos que se postran por miles de kilómetros hasta llegar a Bodh-Gaya, India, el lugar en donde el Buda histórico se iluminó sentado bajo un árbol, hasta el Dalai Lama explicando algunos conceptos característicos del Budismo, aunque son las imágenes de Herzog las que ilustran con mayor precisión esta pasión colectiva por una religión en cuyo centro domina el vacío y la única certeza es la impermanencia de todo. (RK)
22.00hs: Clásicos para un canon
Kundun, de Martin Scorcese, EE.UU., 1998.
137 minutos / Apta para todo público.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Noche de película (3′), de Zhang Yimou, China, 2007.
Las dos grandes películas religiosas de Scorsese jamás se estrenaron en Argentina. La última tentación de Cristo, una verdadera película sobre la experiencia de la fe, llegó al cable en carácter de estreno, pero las aduanas de la verdad detuvieron la transmisión (aunque años más tarde, ya sin escándalo, se distribuyó en videos y ocasionalmente se pasó en canales privados). La otra es Kundun, una suerte de hagiografía del Dalai Lama, en donde todas las virtudes (y también defectos) del realizador de Taxi Driver están presentes como nunca, siendo una película fascinante y problemática. Fascinante porque la cultura tibetana es materializada visualmente por Scorsese bajo un esplendor formal pocas veces visto en el cine. Los movimientos de cámara son coreografías; algunas secuencias son inolvidables, por ejemplo, un plano secuencia que nace en un primerísimo plano para finalizar en un plano general cenital sorprendente, momento en el que muchos monjes tibetanos han perdido la vida. Kundun es prodigiosa por donde se la mire. Como en todo el cine de Scorsese el problema radica en su propensión a reducir la historia y la política a una contienda entre buenos y malos; aquí condensado en un encuentro entre Mao y el Dalai Lama, cuya representación está a un paso del ridículo. Sostener que los tibetanos son los buenos y los chinos los malvados no sólo es un reduccionismo, sino un prejuicio propio de una ideología ramplona. Pero eso no impide que Scorsese sí dé una visión precisa y exquisita del Budismo Tibetano y de la vida de su actual líder, y el modo elegido para hacerlo es casi una epifanía. (RK)
00.30hs: Rarezas de medianoche
La montaña mágica, de Alejandro Jodorowsky, México-EE.UU., 1973.
108 minutos / No recomendada para menores de 18 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Punch y Judy (10′), de Jan Svankmajer, República Checa, 1966.
El film de Alejandro Jodorowsky, de alto presupuesto y el que sigue a El Topo (1973), nuevamente con el mismo Jodorowsky en el protagónico, es mucho más imaginativo y admirable que aquel, aunque no menos pretencioso. Con ciertos rasgos esotéricos propios de la Nueva Era, más que otros films del director, La montaña mágica describe una búsqueda espiritual y se vale de giros inesperados cada vez que puede para provocar, sosteniéndose en composiciones visuales y algún que otro ocasional nutriente para el pensamiento. En su conjunto, un sinsentido sumamente deleitante. (JR)
JUEVES 25
18.50hs: Garrel en Foco
Los amantes regulares, de Phillip Garrel, Francia, 2005.
175 minutos / No recomendada para menores de 18 años.
Antes de la película principal se proyectará el cortometraje Aumento (3′), de Olivier Assayas, Francia, 2007.
Esta épica agridulce de Phillipe Garrel sobre las demostraciones en París en el mayo francés y sus consecuencias es uno de sus trabajos narrativos más logrados. Rodado en un prodigioso blanco y negro por el gran William Lubtchansky, la película destila la creciente melancolía de toda la obra meditativa y romántica de Garrel, que ha estado siempre ligada al legado del cine mudo (como aquí el piano solitario deja ver). Este film de 2005 centra su relato en un joven poeta parisino interpretado por el hijo del propio Garrel (que interpretó un rol similar aunque más sensual en el no muy honesto film de Bertolucci, Los soñadores) y su relación con una escultora (Clotilde Hesme). Finalmente se impone el derrotismo político, al que Garrel frecuentemente vincula con una entrega voluptuosa por parte del héroe a la adicción al opio. Y sí logra desenmascarar cuan consentida es su vida, que pasa a ser cómicamente evidente cuando el héroe en cuestión va a juicio por evadir el servicio militar. (JR)
22.00hs: Película de clausura
Amanecer de rescate, de Werner Herzog, EE.UU., 2007.
126 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará los cortometrajes Diario de un espectador(3′), de Nanni Moretti, Italia, 2007., y El beso (3′), de Gus van Sant, EE.UU., 2007.
Estrenada por la MGM, interpretada por dos actores de Hollywood muy ocupados, y despachada como una película de aventuras en Vietnam, este puede ser el film más comercial de Werner Herzgo en toda su historia. Pero es también un Herzog esencial, una historia sobre una voluntad de poder más que humana que ya le dedicara un documental, El pequeño Dieter necesita volar. Christian Bale ofrece un trabajo comprometido como Dieter Dengler, el piloto de avión estadounidense caído en Laos en 1966 y detenido en un campamento de la selva; Steven Zahn y Jeremy Davies son creíbles como los sufrientes compañeros de celda, respectivamente atraídos y reluctantes acerca del incontenible optimismo de Dengler en su planificación del escape. En su representación inadecuada de los guardias de Laos y su desenlace algo machista de regreso a casa, Amanecer de rescate puede asociársele al territorio propio de Rambo, pero como la mayor parte de la obra de Herzog es básicamente apolítico, más orientado a mostrar la guerra de un hombre contra su medio natural. (J.R. Jones, Chicago Reader).
00.30hs: Rarezas de medianoche
El duelista, de Lee Myung Sae, Corea del sur, 2006.
109 minutos / No recomendada para menores de 13 años
Antes de la película principal se proyectarán los cortometrajes Incómodo (3′), de Elia Suleiman, Palestina, 2007., y Carne enamorada (1′), de Jan Svankmajer, República Checa, 1988.
Dicen que el título original puede traducirse como «Detective», y la trama ratifica ese término porque se reconoce en ella los lugares comunes básicos del film noir, incluyendo su sentido trágico y su profundo romanticismo. Las principales diferencias son de contexto -el medioevo coreano- y de género -el detective es una señorita y la femme fatale es un joven melancólico, adecuadamente conocido como «ojos tristes»-. Hay una serie de peripecias que resultan subsidiarias, porque pronto se hace evidente que lo importante será la relación entre estos dos personajes, que se involucran emocionalmente aunque saben que no pueden. Se ha escrito que el realizador ha intentado «redefinir todo el cine de acción con este film» pero, aunque su inventiva formal es desbordante, energética y ciertamente original, la frase es injusta: El duelista no es un film de acción sino un melodrama pasional que se realiza a través de la violencia. Por eso es pertinente que el tono de sus coreografías que vuelva más oscuro a medida que el film avanza, que los primeros encuentros entre los protagonistas sean danzas antes que combates y que las confrontaciones decisivas están filmadas con la intensidad de un acto sexual. (Cátalogo 2007 BAFICI)
TODAS LAS PELÍCULAS SE EXHIBEN EN FORMATO DVD AMPLIADO
ORGANIZA CINECLUB CON LOS OJOS ABIERTOS
Roger Alan Koza, director artístico: se desempeña actualmente como crítico de cine en el diario La Voz del Interior. Ha publicado Con los ojos abiertos: crítica de cine de algunas películas recientes, colección Vital, Editorial Brujas, Córdoba, 2004. Es columnista de la revista Quid y La Rana. En la actualidad dirige cuatro cineclubes en el Valle de Punilla. Y desde abril de 2006, es programador de la sección de cine Latinoamericano, Vitrina, del Festival Internacional de Hamburgo, Alemania.
Interpretación general del inglés en el film Diez canoas: Terence Erbe (Terry); las traducciones pertenecen a Roger Koza y LB (en El duelista y Bamako); todos los subtítulos y correcciones de las películas especialmente realizadas para esta muestra pertenecen a Lucas Ceballos (lucasceballos@hotmail.com)
Agradecemos especialmente al intendente de La Cumbre, Sr. Carlos Engel, junto con sus colaboradores Marcela Medo, Guido Begué y Darío Durban. También el apoyo de Lucy Pravia, Leo Menna e Isabel Reinoso. Y claro está: a todos los auspiciantes que permiten llevar adelante este proyecto cultural con un programa para que usted pueda llevarse algo más que ver una película.
Hola roger
soy un ex alumno tuyo del curso del ojo soberano, fui con vos a una inaguracion de un cineclub en serrezuela. Lamento haber perdido el contacto contigo, ahora lo estoy retomando.
Te dejo mi mail y el sitio donde hay subidos 2 cortos que hcie para la faci este año que paso donde empece cine,miran desde lejisimos a estas peliculas q publicas vos.
te mando saludos, este enero voy a estar en la falda, asi que si me pasas tu telefono nos ponemos en contacto para ir a presenciar algun dia esta muestra tan linda que presentas.
Maxi
Una vez más (un año más), la geografía me sorprenderá en otras latitudes y me quedaré sin apreciar la muestra…
Pensé muchas veces en Anna Karina mirando a Eddie Constantine diciendo: “Increasingly, I see the human form…As a lover’s dialogue”, descubriendo poesía en esas imágenes, almacenándolo en mi memoria como un bello y hasta sagrado momento.. Será la próxima..
Les auguro un buen comienzo,
Todo aquello que se hace con la convicción
de que otra forma de ver es posible, vale..y mucho.
Nos vemos.
Feliz Año Amigo!
No vale,quiero ver la nueva de David Cronenberg,quiero ver la nueva de Werner Herzog,quiero ver Alphaville en pantalla grande,quiero ver la de Alejandro Jodorowsky.Quiero ver todo.Pero la tengo dificil.
Un abrazo .
Off Topic : Eva, tambien pense muchas veces en Anna Karina.
Hola José, hola Eva, y también Maxi: un gusto leerlos por acá; y me encantaría verlos en la muestra. Nos vemos pronto. RK
hola soy de la cumbre pero vivo in spain estoy alucinado con lo que van a proyectar por ahi lamento no poder ir este varano felicitaciones . se puede ver la de jodorovsky colgada en la red ?
he intentado varias veces escribirte recien logro aprender!
soy la chica de «cafe escondido» y voto por las cinco mejores peliculas..para q veas q no he olvidado tu propuesta:
1.Bamako
2.cafe lumiere
3.Mas alla del espejo
4.Klimt
5.y para el ultimo…..en este caso, con fuegos articiales, bombos y platillos lo mejor , de lo mejor para mi…. JLG JLG!!!!!Historias de cine!
nos vemos en el cineclub o quien te dice en cafe escondido!
Saludos!
Marcelo, en la web se puede bajar hasta un film en el que uno se está lavando los dientes y no sabe que lo filmaron. Supongo que sí, y que buscando un poco con el EMULE, en menos de un minuto lo sabrás. Ocurre que todo lo que paso en los cineclubes y las muestras no es material bajado sino comprado. Suerte en la búsqueda. RK
PS: lo de Jodo… se consigue en España, pues fue editado comercialmente en ese país.
Total que en un par de horas sumo un año mas a mi existencia y por tanto resto uno menos…………….y cuanto hay de sorpresa en una sorpresa que se sabe tal pero que se desconoce en su forma y en su contenido, no lo se; pero que satisfaccion cuando mi madre me lee en el diario, justo al lado de una nota sobre Susan (mi madre se llama Susana) Sontag (mi madre evita las letras plañideras de los Tangos), que en una semana se viene “Hablemos de cine”. Mejor sorpresa que esa fue saber que seguimos con los ojos bien abiertos y con los brazos en la misma posicion.
A proposito de la hospitalidad (me acuerdo de derrida cuando la nombro) tenemos de ganas de quedarnos con mi familia sanguinia (seremos unos tres) un par de dias en algun lugar fisico, que no sea un camping (”ya no estamos para esos trotes” dijo alguien por aca) y cuyos precios no sea para europeos. Espero tu recomendacion
A dieu amigo (otra vez Derrida) y como en el cine “Coming soon”
Henri Langlois de La Cumbre te felicito nuevamente por la muestra que armaste! mostrar películas como Factótum, La llave Nelson o los Amantes regulares es toda una apuesta por un cine ideológicamente independiente. Más aún el hecho de convocar a una sala a verlas en pantalla gigante y no en la compu descargadas en divx…
Te mando un abrazo y lamento no haber podido estar más tiempo en La Cumbre para verlas todas.
Espero por tus películas, así tenemos la exclusiva de un buen ojo, un buen cerebreo y un buen corazón. RK
Hola, esta es la primera ves que visito su blog. Me llena de mucha alegría haber encontrado este sitio donde se encuentra a gente que realmente ama y sabe de cine como usted y la gente que escribe en este blog(cinéfilos, espectadores medios, alumnos, ex alumnos, etc). Cómo decía, estoy muy alegre, siempre creí ser un cinéfilo solitario que en muy pocas oportunidades o casi nunca he podido hablar o discutir a cerca de las películas o directores que me gustan (Tsai, Kiarostami, Carpenter, Tarr, Hawks, bueno, mi lista es larga creo). Es mas, estudio Cine y Tv en la Nacional y también entre compañeros, y demás alumnos que asisten ahí no he encontrado a alguien que comparta mi «gusto» por el cine.
Conocí de su existencia como crítico cinematográfico hace algunos años cuando apareció el brillante libro «Con los ojos abiertos» en la vitrina de el cineclub municipal Hugo del Carril. Luego de pegarle una hojeada corri a comprarlo; hace años que lo leí y desde que lo terminé no he dejado de volver a él. También he tratado de conseguir el diario Comercio y justicia para leer tus críticas de cine, pero es muy difícil ya que no es un diario que se venda en la calle. La única ves que accedí a ese diario fue cuando fuí a la biblioteca del CISPREN y me enteré de que lo tenían. La última ves que leí una crítica tuya fuen en el 2005 (Una Historia de Violencia) del suplemento cult, de eses diario. Bueno, hay tanto de que quiero charlar del cine con usted. Tiene mi email, si es tan amable de responder algunas palabras estaría muy agradecido. Muchas Gracias
Pablo, Samurai: leer tu comentario me reconforta. Te aseguro que uno nunca sabe muy bien qué ocurre con lo que uno hace y escribe. Leerte es constatar lo que no puedo hacer por otros medios que aquel que ofrece un otro, en este caso vos. Entiendo muy bien la soledad, ese conformismo, paradójicamente, que se puede ver entre quienes dicen amar al cine. Dejé Comercio y Justicia, pero empecé a escribir en La Voz del Interior desde mayo del 2006, no siempre, pues estoy en el banco de suplentes. Por lo menos, escribo, y eso me da un poco de aire, pues es difícil conseguir espacios. Nos mantenemos en contacto. RK