Hola Roger. Me encantó tu nota sobre Eastwood, me metí en tu blog y qué loco: me topo con tu comentario sobre el mismo video que recibí hace un mes atrás por correo y almacené para jugar en algún momento con un contrapunto: el significante (según Lacan) vs el valor fetiche de la mercancía. Un juego para asomarse a la diferencia entre el inconciente pensado como una superficie y la clásica idea del inconciente «profundo».
Abrazo desde Buenos Aires.
Yo vi el corto mientras me encontraba en ese aujero negro llamado «trabajo», así que te imaginas como pude haberme sentido, para colmo de los males con una vestimenta similar a la del protagonista/víctima del film. Es aterrador, pero al segunda vez que lo ví me dio mucha gracia y me hizo acordar en algo un cuento de Hernán Arias que se llama «la vecina», en ese relato el protagonsita mira a la gente que corre apurada hacia su trabajo y piensa «..corren detras del plasma..»
Hoy fui al cine creyendo que iba a ver el rastro, pero me confundi y a la hora que fui daban Shara. Fue una confusión feliz por que Shara me gusto, me parecio muy linda. Espero ver el rastro en estos días.
Abrazo.
Gracias por el regalo de este corto: síntesis, posibilidad de lecturas (marxista, lacaniana, etc; basta meter la mano en el agujero negro) y, en lo que a mí respecta, una especie de asociación metonímico/cinéfila:
me vino a la cabeza que en «Poltergeist» una especie de vortex tragaba literalmente uno a uno los objetos materiales de la casa residencial de la familia protagonista.
Spyri: uy, me deprimiste, yo también visto como el personaje del corto en mi trabajo.
Ojos Abiertos: aprovecho la ocasión para agradecerte por la calidad del sitio, uno de mis preferidos.
Hola Roger. Me encantó tu nota sobre Eastwood, me metí en tu blog y qué loco: me topo con tu comentario sobre el mismo video que recibí hace un mes atrás por correo y almacené para jugar en algún momento con un contrapunto: el significante (según Lacan) vs el valor fetiche de la mercancía. Un juego para asomarse a la diferencia entre el inconciente pensado como una superficie y la clásica idea del inconciente «profundo».
Abrazo desde Buenos Aires.
Gracias G: no había pensado acerca de esta lectura lacaniana del corto. Merci. Abrazo. RK
Yo vi el corto mientras me encontraba en ese aujero negro llamado «trabajo», así que te imaginas como pude haberme sentido, para colmo de los males con una vestimenta similar a la del protagonista/víctima del film. Es aterrador, pero al segunda vez que lo ví me dio mucha gracia y me hizo acordar en algo un cuento de Hernán Arias que se llama «la vecina», en ese relato el protagonsita mira a la gente que corre apurada hacia su trabajo y piensa «..corren detras del plasma..»
Hoy fui al cine creyendo que iba a ver el rastro, pero me confundi y a la hora que fui daban Shara. Fue una confusión feliz por que Shara me gusto, me parecio muy linda. Espero ver el rastro en estos días.
Abrazo.
Gracias por el regalo de este corto: síntesis, posibilidad de lecturas (marxista, lacaniana, etc; basta meter la mano en el agujero negro) y, en lo que a mí respecta, una especie de asociación metonímico/cinéfila:
me vino a la cabeza que en «Poltergeist» una especie de vortex tragaba literalmente uno a uno los objetos materiales de la casa residencial de la familia protagonista.
Spyri: uy, me deprimiste, yo también visto como el personaje del corto en mi trabajo.
Ojos Abiertos: aprovecho la ocasión para agradecerte por la calidad del sitio, uno de mis preferidos.
Gracias Pablot, de verdad. RK