EL BAFICI ANTES DEL BAFICI 2013 (10): EL CINE EN ESTADO PURO
Acerca de La libertad
Por Marcela Gamberini
Por una lado, La libertad es una película simple, sencilla, lineal y por otro es la película más hermética, oscura y difícil de los últimos años. Alejada de cualquier tipo de filiación cinematográfica, se constituye como una experiencia única y particular. Sin lecciones morales, sin didactismos, sin excesos, sin las convenciones del realismo local La libertad es un objeto estético en estado puro, depurado, casi cristalino. El relato de un día en la vida de un hachero no es, pese a su escenario pampeano, sólo una película argentina, sino que también aparece como una película universal. La rutina, la adversidad del medio geográfico y social, la difícil sobrevivencia diaria, la aparente libertad, la fragilidad de la felicidad son evidentemente temas universales. La libertad es una de las pocas –sino la única- película local en la que su director no opina, no remarca, no juzga, ni siquiera promueve la identificación. Alonso sólo describe el día del hachero, invitando al espectador a reflexionar. La libertad es un páramo en el cine nacional. Un objeto extraterrestre. Una ópera prima repleta de ideas acerca de lo que el cine debería ser. Una verdadera y maravillosa rareza.
Marcela Gamberini / Copyleft 2013
La libertad, Lisandro Alonso, Argentina, 2001
LU 15, 18.20, V. Recoleta 9;
VI 19, 18.10, V. Recoleta 9
Puede ser que el director «no juzgue», también que «no remarque»; absolutamente en coincidencia de que no promueve la identificación. Ahora es casi inaceptable decir que un director no «opina». «La» película es ya en si misma una opinión del director; tal vez no de las cosas que vos marcás , pero seguramente que de algo está hablando. Cómo se entiende la última oración que escribís al hablar de ideas acerca del cine y cercenar el concepto de opinión de aquel que tiene esas ideas.
Finalmente, la película me parece una invitación a reflexionar sobre volver a ver una película de Alonso.
Hola Mariano:
Claro que está hablando de algo y dice mucho. Me refería a que no hay ese gesto muy característico del cine que tiende a sembrar las películas de opiniones, volviéndose espiraladamente didácticas.
Y si, el cine de Alonso invita amablemente a la reflexión.
Gracias por tu comentario!
Saludos